El diputado del FPV Martín Pérez expuso la gran expectativa generada esta semana, luego de meses de debate sobre la despenalización del aborto, y de cara a una sesión que comienza el miércoles y terminaría el jueves a la madrugada. El parlamentario adelantó su voto a favor del dictamen que hoy se termina de definir, y resaltó que dejó su posición personal de lado, para pensar en “resolver un problema de estricta salud pública”. Lamentó el equívoco de plantear que unos defienden la vida y otros no, y advirtió que el aborto, legal o no, se seguirá practicando pero de forma clandestina.
Río Grande.- El diputado del FPV Martín Pérez dialogó anoche con FM La Isla momentos antes de abordar el avión a Buenos Aires, para firmar el dictamen esta tarde y participar mañana de la sesión en la que se someterá a votación la despenalización del aborto en Argentina.
“Está muy pareja la votación y, por lo que pude chequear hasta el momento, hay incertidumbre respecto de lo que pueda suceder. Se va a terminar sabiendo el día de la votación”, dijo.
Informó que hoy a las 15 está prevista la firma del dictamen definitivo, “con lo cual vamos a tener una precisión mayor respecto del proyecto final que se va a discutir en el recinto. Pero es un final abierto lo que pueda llegar a suceder el miércoles o el jueves a la madrugada, cuando se calcula que vamos a terminar votando la ley”.
“Hay cerca de 20 diputados que están indecisos o no han manifestado su intención de voto, y creo que entre hoy y el miércoles va a ser determinante para que tomen una decisión. Hay mucha expectativa de la sociedad en este tema. Hay posiciones equilibradas, otras muy extremas, yo soy de los que se inclinan a que tratemos de encontrar una posición equilibrada, más allá de lo que cada diputado decida hacer, priorizando el respeto al otro y buscando un punto en común”, sostuvo.
“Yo he decidido votar a favor de la despenalización y mi voto ha sido reflexionado en plena conciencia, porque esta ley tiene que resolver un problema de estricta salud pública”, subrayó el parlamentario.
“Yo fui padre hace tres meses, por supuesto estoy enamorado de mi hijo y creo absolutamente en la vida, pero eso está fuera de discusión -sentenció-. Ese punto lo he corrido, teniendo en cuenta que yo tomé la decisión junto a mi señora de ser padres, porque hemos estado los dos de acuerdo y teníamos el deseo de hacerlo. Pero hay muchas mujeres y personas gestantes que se encuentran en otra situación, tal vez de embarazos no deseados, forzados, en situaciones de vulnerabilidad social, y son aspectos que no tienen nada que ver con lo que me ha pasado en mi vida personal. Lo mismo se puede analizar del punto de vista religioso, y yo he sacado absolutamente cualquier preconcepto religioso para tomar la decisión de mi voto, siendo una persona católica que he concurrido a un establecimiento salesiano toda mi niñez y adolescencia”, recordó.
A diferencia de los que siguen fundando su voto en convicciones religiosas, dejando de lado que Argentina es un estado laico, Pérez manifestó que la religión en este caso “no ha influido en lo más mínimo. Esta ley debe sancionarse por una cuestión estrictamente de salud pública”, reiteró, remarcando que “esta ley no va a obligar a ninguna mujer a hacerse un aborto, porque no es una ley que promueve el aborto. Lo que promueve esta ley es que las personas que decidan en el plano de su conciencia practicarse un aborto, no lo tengan que hacer de manera clandestina. Es simplemente eso”.
Observó que “en la clandestinidad entran en juego otros factores, que la mujer pobre tenga que morir, que la mujer que tenga recursos tenga que ir a pagarle a algún vivo que se llena de plata detrás de esta situación tan problemática para el que tiene que tomar la decisión. Y si esta ley no se sanciona, no se va a resolver el problema del aborto en la Argentina”, advirtió.
“Debemos ser francos en esto, porque se van a seguir practicando abortos clandestinos y van a seguir muriendo mujeres. No importa la cantidad de mujeres involucradas, porque ayer una vecina me decía que solamente mueren 50 mujeres por año por abortos clandestinos. Tal vez lo planteaba desde una posición de desconocimiento, pero no tienen que ser ni siquiera 50 mujeres, ni una, ni 50, ni diez mil. El Estado tiene que estar presente para resolver esta situación, para dar contención a una mujer que decida practicarse el aborto, que la mujer que llegue al hospital tenga un equipo interdisciplinario que la aconseje, en todo caso que le dé cinco días para pensarlo y la trate de convencer para que no se realice la práctica, y le dé un acompañamiento. Todas estas cosas se discuten en el proyecto”, aseguró.
Las dos vidas
También el diputado lamentó “la falacia en lo que han planteado algunos, que se está a favor o en contra de la vida. No es así, porque todos estamos a favor de la vida, pero a favor de una vida íntegra donde la mujer pueda decidir si quiere seguir o no adelante con un embarazo no deseado”, enfatizó.
La temida reforma laboral
Por otra parte, y teniendo en cuenta las pautas que fija el FMI luego del acuerdo que firmó el gobierno nacional, se le preguntó sobre la posibilidad de que se aproveche la “distracción” del mundial de fútbol para avanzar con la reforma laboral, ya que hay pedida una sesión especial del Senado para fines de este mes.
El diputado Pérez consideró “ingenuo” si el gobierno “piensa que los trabajadores son estúpidos y no se van a dar cuenta de que van a tratar de aprovechar el mundial para aprobar leyes de ajuste. Si piensan que los trabajadores van a estar mirando otra película y no van a manifestarse en contra de este ajuste laboral que pretenden hacer, me parece una ingenuidad de parte del gobierno”, subrayó.
Advirtió que no van a poder “promover una discusión sin la presencia activa de los trabajadores porque, más allá del mundial, los trabajadores van a estar muy atentos a estas situaciones y van a dar una discusión muy profunda”.
“Yo estoy en contacto con todos los trabajadores nucleados en la CGT de Río Grande, que están observando muy de cerca este tema, y lo mismo están haciendo muchísimos gremios. El propio Hugo Moyano está planteando un paro para el próximo jueves. Hay una ebullición dentro de las filas sindicales en la Argentina, porque se está viendo que las consecuencias de llevar adelante un acuerdo con el FMI van a significar un ajuste brutal en todos los sectores económicos de la Argentina y nosotros vamos a estar acompañando a los trabajadores como siempre lo hicimos”, ratificó.
“El año pasado manifestamos que se venía la reforma previsional, el ajuste a los jubilados, y que venían también por la reforma laboral. También advertimos que venían por el FMI y lamentablemente se fue cumpliendo todo lo que planteábamos. Espero que podamos poner un freno a esta reforma laboral y va a depender mucho de la movilización de los trabajadores”, concluyó.