Durante el encuentro de un grupo de gobernadores del justicialismo desarrollado en la Casa de Entre Ríos en la ciudad de Buenos Aires acordaron un camino común de cara a los próximos encuentros con el gobierno, como así también coincidieron en darle al gobierno nacional apoyo legislativo a las herramientas que necesita para la gestión. También mostrarán una posición conjunta respecto de las transferencias no automáticas e ingresos brutos. Además hubo desconcierto por el anuncio a las Pymes de frontera.
Río Grande.- La reunión entre los mandatarios provinciales se llevó adelante en la Casa de la provincia de Entre Ríos, donde Gustavo Bordet ofició de anfitrión de los gobernadores Juan Schiaretti de Córdoba, Juan Manuel Urtubey de Salta, Domingo Peppo de Chaco, y Rosana Bertone de Tierra del Fuego, encuentro del cual también participaron los jefes de los bloques peronistas en Diputados y el Senado, Pablo Kosinery Miguel Pichetto, mientras negocian la llegada del Frente Renovador a este grupo.
“Pero nosotros no co-gobernamos, el que gobierna es el gobierno nacional y por lo tanto tiene que hacerse cargo de los errores y resolver los problemas de los argentinos”, manifestó Bordet
Al respecto sostuvo que “entendemos que hay metas fiscales que tienen que alcanzarse, pero queremos que en la consecución de esas metas fiscales exista un criterio de equidad, estamos dispuestos a hacer un esfuerzo, pero tiene que ser equitativo”, insistió. Además resaltó que “pensamos que nos tiene que ir bien a todos los estamentos de gobierno porque en definitiva le va bien a la gente que es para los que estamos y para lo que nos votaron”, aseveró.
Según explicaron en otros distritos, además de acordar el apoyo legislativo, se pusieron de acuerdo en “armar una posición en común respecto a los recortes en las transferencias no automáticas, la reducción del ritmo de la baja de Ingresos Brutos y, en particular el paso de Aysa, Edenor, Edesur, transporte y la justicia ordinaria a la órbita de las administraciones de la provincia de Buenos Aires y de la Ciudad”.
Respecto a este último punto, y mientras la gobernadora María Eugenia Vidal suma apoyo de intendentes del PJ para rechazar el traspaso, los gobernadores suman fuerzas.
“El gringo por Schiaretti se lo planteó claro a Macri y además estaba acordado en el Consenso Fiscal, si quieren ajustar, que sea parejo”, señalaron.
Turno de los Ministros de Economía
La semana que viene se reunirán los ministros de Economía y de Hacienda de estos distritos para trabajar en los números de las transferencias e IIBB, en el caso de los servicios, ya hay un trabajo que salió de la provincia mediterránea y que ya está en el despacho presidencial.
En ese informe se establece que el ahorro nacional de transferir al AMBA la empresa Aysa sería de $15.268 millones (0,12% PBI), el paso de la justicia ordinaria a CABA unos $5.506 millones (0,04% del PBI), los subsidios al transporte $49.210 millones (0,39% del PBI) y la transferencia de la seguridad que presta Gendarmería $10.024 millones {0,08% del PBI).
“Si quieren reducir el déficit fiscal, que empiecen por traspasar y tienen un ahorro de $80.009 millones, o 0,63% del PBI”.
Pero mientras los equipos técnicos trabajaban en articular estos puntos, se fueron enterando del anuncio del Gobierno de adelantar 2 años el mínimo no imponible en contribuciones patronales, previsto en la reforma tributaria aprobada por el Congreso, para comercios minoristas que estén registrados en la Ley PyME.
El beneficio solo estará disponible para empresas radicadas en provincias con alícuotas de Ingresos Brutos para comercio minorista de hasta 3% en 2018.
Hay 14 provincias que tienen esta situación y sólo tres Corrientes (2,9%), Catamarca (3%) y San Juan (3%) están en condiciones de entrar en el nuevo régimen. El resto, deberá acelerar el proceso de reducción.
Noticia que fue sorpresa en varios distritos
“Tenemos un acuerdo firmado hace seis meses que plantea un sendero de reducción de IIBB y ahora esto lo modificaría, aunque sólo es para los distritos de frontera, afecta la recaudación y si uno no lo hace le genera una competencia con la provincia vecina”, se quejó un ministro provincial. Otro fue un poco más lejos y evitó cualquier sutileza: “parece que nos están tomando el pelo”.