“Hoy conmemoramos el 202 aniversario de nuestra Independencia, me resulta oportuno compartir el Acta fundacional de nuestro país como Estado Independiente de cualquier otra potencia extranjera”, dijo el vicegobernador de la provincia Juan Carlos Arcando.
Río Grande.- El vicegobernador de la Provincia y Presidente de la Legislatura provincial, Juan Carlos Arcando, participó de los actos patrios por el Día de la Independencia que se realizaron en esta ciudad.
“Hoy conmemoramos el 202 aniversario de nuestra Independencia, me resulta oportuno compartir el Acta fundacional de nuestro país como Estado Independiente de cualquier otra potencia extranjera”, dijo Arcando.
Acta de la Independencia 9 de julio de 1816
En la benemérita y muy digna ciudad de San Miguel de Tucumán a nueve días del mes de julio de 1816: terminada la sesión ordinaria, el Congreso de las Provincias Unidas continuó sus anteriores discusiones sobre el grande, augusto y sagrado objeto de la independencia de los pueblos que lo forman. Era universal, constante y decidido el clamor del territorio por su emancipación solemne del poder despótico de los reyes de España; los Representantes sin embargo consagraron a tan arduo asunto toda la profundidad de sus talentos, la rectitud de sus intenciones e interés que demanda la sanción de la suerte suya, pueblos representados y posteridad. A su término fueron preguntados ¿Si quieren que las provincias de la Unión fuese una nación libre e independiente de los reyes de España y su metrópoli? Aclamaron primeramente llenos de santo ardor de la justicia, y uno a uno reiteraron sucesivamente su unánime y espontáneo decidido voto por la independencia del país, fijando en su virtud la declaración siguiente:
“Nos los representantes de las Provincias Unidas en Sud América, reunidos en Congreso General, invocando al Eterno que preside el universo, en nombre y por la autoridad de los pueblos que representamos, protestando al Cielo, a las naciones y hombres todos del globo, la justicia que regla nuestros votos: Declaramos solemnemente a la faz de la tierra que, es voluntad unánime e indubitable de estas Provincias romper los violentos vínculos que los ligaban a los Reyes de España, recuperar los derechos de que fueron despojados, e investirse del alto carácter de una Nación libre e independiente del Rey Fernando VII, sus sucesores y metrópoli. Quedan en consecuencia de hecho y de derecho con amplio y pleno poder para darse las formas que exija la justicia, e impere el cúmulo de sus actuales circunstancias. Todas, y cada una de ellas, así lo publican, declaran y ratifican comprometiéndose por nuestro medio al cumplimiento y sostén de esta su voluntad, bajo el seguro y garantía de sus vidas haberes y fama. Comuníquese a quienes corresponda para su publicación. Y en obsequio del respeto que se debe a las naciones, detállense en un manifiesto los gravísimos fundamentos impulsivos de esta solemne declaración».