El senador del FPV exteriorizó una postura resignada frente a la decisión del gobierno nacional de no torcer el rumbo económico. Ayer hubo una nueva corrida cambiaria y la propuesta del presidente Macri fue más deuda con el FMI que, para Catalán Magni, fue un fracasado intento por “enviar un mensaje a los mercados”, que no surtió efecto. “El gobierno no encuentra el camino y no queda otra que dejar que el tiempo transcurra y ser una alternativa en 2019”, señaló. Incluso analiza, en la próxima visita de Marcos Peña, no tener ninguna intervención porque “no hay respuestas sino expresiones de deseo”.
Río Grande.- La falta de expectativa en una mejora en el rumbo de la economía y del país en general quedó expuesta ayer por el senador Julio Catalán Magni, en diálogo con FM Del Pueblo. Con un breve discurso de Macri que precedió a una nueva corrida cambiaria, para el senador lo único que queda por hacer es dejar que transcurra el tiempo y construir una alternativa para 2019.
“Debe haber sido el discurso más corto de la historia y para mí fue claramente una señal a los mercados antes de que abrieran, para tratar de marcar algún tipo de solvencia -analizó-. Toda la política económica tiene un rumbo incierto y el gobierno no termina de generar confianza para tranquilizar los mercados y avanzar a una inversión real. Algunos economistas plantean que el dólar debería estar en los 36 ó 37 pesos y tenemos una economía dolarizada, en los precios de los combustibles, en las tarifas, y el impacto en las pymes y los trabajadores es enorme”.
“El gobierno no encuentra el camino para no discutir el día a día y generar una proyección a largo plazo. Los mismos recursos que se fueron a buscar al FMI, que son 50 mil millones, es la misma plata que se fue de las arcas propias del atesoramiento de distintos inversores, porque fueron alrededor de 52 millones, y es la señal más concreta de falta de confianza”, subrayó.
Ayer el dólar cerró por encima de los 34 pesos y “en cualquier medio los analistas económicos están hablando de lo que va a pasar por no tener certidumbre en la política económica. Esta historia ya la conocemos”, advirtió.
“El gobierno ha intentado poner en debate distintas cuestiones, como ocurrió con el aborto, para distraer a la población, pero la realidad es una sola. El poder adquisitivo se licuó en un 50%, no se puede sostener el empleo y ahí se termina el maquillaje en los medios. No encuentran un camino para salir”, reiteró.
Puertas adentro de la provincia, dijo que se trata de “mantener la economía ordenada para que el impacto sea el menor posible”.
A propósito del gobierno, se la mencionó a la gobernadora Rosana Bertone en los medios nacionales por dos motivos, primero como una de las voces más duras en contra del ajuste dentro de la liga de gobernadores peronistas, y luego por una medición que la ubica como una buena compañera de fórmula del PJ, que podría encabezar el cordobés Schiaretti. “Lo que está pasando en torno a la figura de Rosana no me asombra, y los que estamos en la gestión tenemos claro el desarrollo y la puesta en valor del estado en nuestra provincia. Eso algún medio nacional lo valora, porque sabemos el estado de abandono en que se recibió la provincia, con servicios básicos que no funcionaban. Nosotros hemos puesto el norte en desarrollar y poner en valor la provincia. El impacto fue muy duro en los primeros meses de gestión pero, cuando uno mira las provincias vecinas, claramente se ve que no estábamos equivocados con lo que hicimos. A la distancia se valora el esfuerzo que hizo el gobierno de Rosana para poner en pie la gestión. Se viene llevando adelante una gestión responsable, más allá de que queda mucho por hacer todavía”, dijo.
Manu sin premio
Como nota de color, mencionó la actitud de Gabriela Michetti ayer, conocido el retiro de Manu Ginóbili: “La vicepresidenta de la nación nos informó que no tiene plata para las medallas, correspondientes a varios reconocimientos que se entregan a deportistas destacados. El premio más importante sin duda este año debería ser para Manu Ginóbili, es el premio más importante que entrega el Senado y serían 80 mil pesos de inversión. Pero la vicepresidenta por una circular interna nos hizo llegar la información de que no había recursos para hacer la premiación y que, si queremos hacerla, que entreguemos diplomas. Esa es la mirada que tiene el gobierno de Cambiemos hacia nuestros ídolos. Nadie puede cuestionar lo que nos ha dado Manu Ginóbili como deportista y persona de bien de nuestro país”, subrayó.
“Estoy de acuerdo en que tenemos que ajustar los números todo lo que podamos, pero los chicos en mi despacho no tienen agua y, si quieren tomar, se la tienen que traer. Nosotros teníamos un bidón y un dispenser para tomar mate, pero no hay agua. Si se quieren tomar un café se lo tienen que traer de la casa, y el achique no pasa por ahí. Hay que achicar pero en otras cuestiones”, planteó.
También se le preguntó sobre la publicación de la liquidación de la dieta de Máximo Kirchner por 552 mil pesos, cobrados en marzo. “Esa liquidación está muy lejos de lo que percibe un legislador nacional, y por más que quieran estigmatizar a un sector de la política, los termina desbordando la realidad. La gente quiere respuestas concretas y no más excusas”, sostuvo.
Marcos Peña en el Senado
Finalmente adelantó la posibilidad de no tener ninguna intervención ante la presencia del jefe de gabinete en la Cámara Alta: “La próxima semana tenemos la visita del jefe de gabinete y con mi equipo de trabajo realmente estamos viendo si sirve hablar o no, porque luego de la exposición ni siquiera hay preguntas, porque es casi una interpelación lo que tratamos de hacer todos, dado que el nivel de cinismo que tiene es enorme; y al día siguiente terminamos haciendo catarsis entre amigos porque el resultado es cero. Cumplimos el rol constitucional, que obviamente celebramos, pero después de más de dos años de gestión sería bueno que el jefe de gabinete traiga alguna respuesta concreta. Lo que trae es un relato de una enorme mentira y expresiones de deseo”, dijo.
“En estos dos años y medio el velo se va cayendo y justamente estamos viendo si vale la pena hablar la próxima semana o ni siquiera emitir opinión. Lo que queda es dejar que el tiempo transcurra y tener en 2019 una alternativa que sea evaluada por la sociedad”, se resignó.
“Realmente es frustrante, porque hemos tenido una gestión responsable, y el ejemplo más duro fue con las tarifas, porque la oposición avanzó para poner un límite al avasallamiento, sabiendo que la gente no puede más, y el presidente lo vetó a las dos horas. Pasó con las asignaciones familiares también, porque presentamos un proyecto de ley que ni siquiera se trató en comisión. La comisión de presupuesto la preside Bullrich y ni siquiera abrieron el debate sus asesores”, cuestionó el senador.
“Estamos dispuestos a discutir en serio el rumbo de la economía y del país; sin embargo del otro lado sale un DNU o se veta una ley, que deja a las instituciones en el peor escenario de su funcionamiento”, concluyó.