Así lo afirmó el Presidente del Laboratorio del Fin del Mundo, Dr. Carlos López, quien participó ayer de una reunión con concejales de Río Grande en la que dio detalles del proyecto que en breve lanzará su primera producción, y también de las posibilidades de llevar adelante los controles antidoping. Destacó la generación de mano de obra directa con el grupo de profesionales que lo acompaña, y también de movimiento económico en la provincia. Una vez en marcha el laboratorio, se pondrán en venta las acciones que hoy están en un 90% en manos del Estado fueguino.
Río Grande.- “El proyecto va tomando forma y estamos a un paso de empezar a producir el Atazanavir, dirigido a todos los enfermos de HIV”, dijo el Dr. Carlos López, presidente del Laboratorio del Fin del Mundo, luego de la reunión que mantuvo con concejales de Río Grande vinculada con el debate de la ordenanza antidoping.
“Estamos realizando las gestiones con el (ex) Ministerio de Salud de la nación, que es el comprador. Va a salir con un nombre propio registrado, que es Suravir, y es uno de los medicamentos que más se utiliza en los pacientes con HIV.El 30 de diciembre del año pasado fuimos calificados por la ANMAT como laboratorio productor de medicamentos. Esto se hizo en tiempo récord. Tenemos 20 empleados de manera directa y los operarios van a ser por producción por el momento, porque estamos haciendo solamente un medicamento. Esperemos que puedan estar trabajando constantemente el año que viene con el desarrollo de otros productos”, confió.
Aseguró que “la semana próxima estimamos comenzar con la producción. Hay entregas pautadas con el Ministerio de Salud de Nación, que es nuestro principal cliente en este momento. También generamos actividad económica de manera indirecta, con fletes, tenemos herrería de acero, carpintería de acero, de madera. Es la primera vez que se va a realizar el empaque secundario en el país de este medicamento y el control de calidad en nuestras instalaciones”, subrayó.
“En este momento somos dueños del registro de Atazanavir a nivel nacional y esperamos que en la medida que se siga utilizando en las terapias de HIV, lo vamos a seguir produciendo. Hoy el estado provincial es el dueño del 90% de las acciones y el 10% restante es del BTF, que sería la parte privada. La idea es empezar a producir medicamentos y después poner las acciones en venta, porque van a tener un mayor valor”, explicó.
“Este proyecto busca no solamente generar ganancia económica sino también capital social, por un lado asegurar el trabajo a todo el plantel actual y al que podamos incorporar, y ser sustentables económicamente, también disminuir el costo de los medicamentos para que lleguen a quienes realmente lo necesitan”, subrayó.
Por su parte, la bioquímica Paulina Ruiz Cardona, hizo referencia al encuentro con los ediles, interesados en la capacidad del laboratorio para realizar los exámenes toxicológicos que serán requeridos, de aprobarse la ordenanza antidoping. “Nos reunimos para aclarar algunas dudas que tenían los concejales, porque son temas muy complicados. Las dudas fueron más que nada sobre el procesamiento de la muestra, de lo analítico, que es el lugar desde el que podemos asesorar del punto de vista bioquímico, por el conocimiento que tenemos”, dijo.
“Con el laboratorio podemos certificar si hubo o no consumo de una droga tanto ilegal como legal, pero no podemos hablar de adicciones”, aclaró, dado que un resultado positivo de un análisis de consumo de drogas no implica que la persona atraviese una adicción.
“El laboratorio cuenta con todo el equipamiento para confirmar si hay consumo o no y para realizar todos los estudios pertinentes de un análisis toxicológico”, garantizó.