El diputado nacional Diego Bossio presentó ayer junto a la gobernadora Bertone el proyecto de prórroga del subrégimen industrial y reivindicó la necesidad de fortalecer la industria nacional y la fueguina en particular. Aseguró que no van a ceder a presiones de “lobbistas que no defienden la industria nacional” y advirtió sobre políticas erróneas del gobierno nacional, con la apertura de importaciones. “No se crece importando sino produciendo”, subrayó, y consideró que el mundo va hacia ese camino, poniendo como ejemplo la política de Trump en Estados Unidos.
Río Grande.- El diputado nacional Diego Bossio, uno de los impulsores del proyecto de prórroga del subrégimen industrial fueguino, dialogó con FM Aire Libre sobre la presentación realizada ayer en el Salón de las Provincias del Senado, junto a la gobernadora Rosana Bertone.
“Acompañamos a la gobernadora Bertone, entendiendo que la Argentina necesita discutir una política industrial, que las cosas no son porque sí, sino que debe haber un estado activo que propone un camino y una serie de políticas”, dijo.
“Nosotros estamos convencidos de que este es el camino, que hay que profundizarlo, seguramente incorporar mayores discusiones en torno a la dinámica industrial, pero la Argentina tiene que darse un debate en torno a qué tipo de industria quiere, dónde la quiere localizar, y un activo estratégico para nosotros tiene que ser la provincia de Tierra del Fuego y las Islas Malvinas. Para eso necesitamos más y mejor industria, y más desarrollo”, expresó.
“Nosotros vamos a pedir que se trate en las comisiones, el presidente de la Cámara de Diputados tiene la obligación de girar el proyecto, y yo mandé una carta al ministro Sica, porque sabemos que tiene que ver con la industria y la producción, para que también lo tome como bandera. No queremos que sea una cuestión partidaria, sino que trascienda a los partidos políticos”, sostuvo el parlamentario.
“En la medida que vaya avanzando el proceso de industrialización y consolidación de la industria en el sur de la Argentina, el régimen entra en competencia. Esto ocurre en Brasil, puntualmente en Manaos, y tenemos que lograr homogeneizar los criterios y tener una lógica de competitividad distinta. Es lo que pretendemos aportar desde el Estado. Esta prórroga se propone aproximarse al régimen de Brasil y seguramente va a ser un punto de discusión en la Cámara de Diputados porque hay distintos planteos. Nuestro proyecto aspira a que tengamos una extensión que nos ponga en un pie de igualdad con Manaos”, dijo, apuntando a una extensión del régimen al 2073.
Frente a la política de la gestión Macri, advirtió que “no se crece importando, se crece produciendo, con más trabajo, y nosotros estamos apostando a la industria. El que nos diga que el camino es abrirnos, evidentemente está en un mundo totalmente distinto. El presidente Trump le plantea a sus principales corporaciones que quiere que sus productos los hagan en territorio americano, y les está pidiendo cuidar el trabajo americano. Nosotros estamos diciendo lo mismo con esta ley: que cuidemos el trabajo argentino”, remarcó.
No descartó una fuerte oposición frente a los intereses de los importadores que se ven afectados. “Los lobbistas que hagan lo que tengan que hacer, nosotros no nos vamos a dejar presionar por el lobby de los que no defienden la industria nacional. Luego tendremos que ser claros en la transparencia, la trazabilidad, los mecanismos de control y en todos los mecanismos tecnológicos que permitan que esta industria funcione bien, y darle explicaciones al conjunto de los argentinos, pero son dos cosas distintas”.
Por otra parte, valoró el apoyo de representantes de distintas provincias a este proyecto: “De hecho, todos los firmantes del proyecto no son de la provincia de Tierra del Fuego, desde Marcos Lavagna, hasta Pablo Kosiner de Salta, Oscar Macías de Chaco, Rubén Miranda de Mendoza. Tenemos una visión federal, queremos apoyar a la industria y estamos convencidos de que la Argentina necesita discutir lo que vamos a hacer en Tierra del Fuego”, enfatizó.
Consultado acerca de si prevé mantener alguna comunicación con el oficialismo, dijo que envió “una carta al ministro Sica, porque esto no tiene que ser una cuestión de banderas políticas, sino que tiene que ser una bandera nacional”, y espera que el funcionario nacional “haga suyo el reclamo de un grupo de diputados de diferente extracción política y de diferentes provincias, y también del Senado de la nación. Tiene que ser política de Estado, como es en Brasil, en México y en otros países”, sentenció.
“Si no tenemos una alternativa económica distinta que profundice la generación de trabajo, el mercado interno, la capacidad de generar dólares, una banca pública capaz de prestarle a las empresas que realmente produzcan y puedan colocar sus productos, evidentemente estamos eligiendo un camino errado. Nosotros queremos ser una alternativa a lo que plantea el presidente Macri y seguramente la vamos a presentar en las próximas elecciones. No creemos que el único camino sea el ajuste, tanto fiscal como monetario, con tasas de interés del 75% que hacen inviable cualquier proyecto productivo en la Argentina. Hoy es más rentable la timba financiera que la producción y nosotros necesitamos un país que apueste a la producción”, concluyó.