Frente al optimismo de los funcionarios nacionales que aseguran que la recesión llega a su fin, Federico Hellemeyer reaccionó con escepticismo y sostuvo que a lo sumo se podrá ver un “paulatino repunte”, confiando en que pueda acelerarse el proceso. El impacto fue muy grande con la caída del consumo en el segundo semestre y no hubo buenos resultados de los últimos eventos de Black Friday y CyberMonday. Los minoristas están “aligerando stock” pero esto no se traduce en nuevos pedidos todavía.
Río Grande.- El sector industrial tomó una fuerte posición ayer desde la UIA, a partir de las declaraciones de su vicepresidente, Guillermo Moretti, quien aseguró que el modelo económico de Macri “no contiene al sector industrial” y advirtió que si “la sociedad quiere suicidarse seguirá con este modelo”. Las expresiones se sumaron al descontento de distintos industriales con las políticas del gobierno y, para algunos analistas, es el adelanto de una posición a favor de un modelo opositor al actual.
Desde AFARTE la posición fue más moderada, pero no ocultó el escepticismo frente a los anuncios del gobierno nacional de que el país está “en el último tramo de la recesión”, de la cual estaría saliendo sobre fin de mes. Su presidente, Federico Hellemeyer, afirmó por FM La Isla que todavía “hay mucha incertidumbre y yo no conozco esta información sobre el fin de la recesión. Se hablaba de un informe que el Ministerio de Hacienda había preparado al presidente de la nación donde planteaba una curva ascendente en la economía el año que viene. Ojalá sea así, porque la verdad la caída del consumo que hubo el segundo semestre y el impacto que tuvo en nuestro nivel de actividad, es muy grande. La expectativa de todos es que repunte, pero hay tantos pronósticos como gustos disponibles. Ningún pronóstico habla de un rebote, sino de algún tipo de paulatino mejoramiento en las variables económicas. Esperemos que ese paulatino mejoramiento sea lo más acelerado posible, porque con este nivel de actividad es muy difícil sostener la situación”, señaló.
Hasta ahora no hubo cambios en el consumo de productos. “En los últimos 60 días hubo dos eventos donde se procuró dinamizar el consumo, como el CyberMonday y el BlackFriday, y no he recibido comentarios de que hayan dinamizado el consumo. Seguramente algo se mueve, pero nada muy dramático como pasa con las fiestas o días especiales cuando hay actividad económica. Esta vez estuvo muy tranquilo”, dijo.
“Aparte, no olvidemos que como estos son mecanismos de promoción a nivel de comercio minorista, lo que hace el minorista muchas veces es aligerar el stock, pero esto no implica ningún nuevo pedido a las fábricas”, aclaró.
Asimismo, consideró que no están dadas las condiciones que se necesitan en materia de variables económicas, porque la tranquilidad cambiaria se logró a costa de altas tasas de interés. “Nosotros necesitamos estabilidad, y esto significa que la variable cambiaria se mantenga quieta y la tasa de interés comience a bajar. Hace un par de semanas empezó a bajar la tasa de interés. El Banco Central en las colocaciones empezó con una tendencia a la baja, unos 5 puntos al principio, y es una señal positiva, porque a partir de eso baja la tasa de interés de referencia y empieza a bajar el costo del financiamiento. Pero ahora me parece que esa incipiente tendencia que empezó a mostrar el Banco Central se va a retraer porque, si bien no se disparó el dólar, hubo un poco de calentamiento, porque pasamos de 36,30 a 39,90 pesos. Son valores que ya tuvimos, pero generan inquietud. Yo lo estuve hablando con algunos conocidos economistas y es una obviedad que si se toca la tasa se altera el dólar, pero algunos le atribuyen otros factores, como el desarme de Lebacs y otras cuestiones. El tipo de cambio ya estaba muy bajo para lo que sería la banda cambiaria actualizada en el acuerdo con el FMI y hay muchas explicaciones. La realidad es que necesitamos que el dólar no se dispare y que la tasa baje”, planteó.
Acuerdo con la UOM
Por otra parte, ratificó la vigencia del acuerdo con el sector gremial para sostener los planteles a cambio de congelar paritarias por dos años. “La sociedad fueguina siempre es muy sensible a cualquier tipo de comentarios y tal vez alguien interpretó que mis declaraciones eran una luz amarilla para el acuerdo con la UOM”, dijo, luego de haber expresado que era un acuerdo de “difícil cumplimiento”.
“La realidad es que nuestra intención es mantener ese acuerdo hasta el fin de su vigencia, porque es la llave para que nosotros podamos seguir existiendo. Si nosotros desarmamos eso, o se cae, es un escenario muy destructivo para nosotros, porque sería un paso atrás en el camino de competitividad que venimos dando. Al mismo tiempo, desde nuestra particular visión, creemos que es la mejor carta de presentación para discutir la prórroga del subrégimen frente al gobierno nacional. Si damos un paso atrás, perdemos nuestra mejor credencial para dar esa pelea”, remarcó.
“Eso no quita que hay una realidad evidente, porque la crisis está para todos. Es importantísimo redoblar esfuerzos y seguir adelante con el acuerdo vigente. Permanentemente tenemos contacto con el gremio, nunca lo dejamos de tener y nunca han pasado más de 60 días sin que hayamos tenido una reunión. Las problemáticas que charlamos cada vez que nos juntamos son diversas. A veces hay un problema puntual en una empresa, algunas excepciones, o un tema de la ART, temas de asignaciones familiares, por lo cual la agenda está siempre abierta”.
Proyecto de prórroga
También se le preguntó por la ausencia del sector empresarial y el sindical en la presentación del proyecto de prórroga que realizó la gobernadora Bertone en el Senado. “Es una pregunta que habría que hacerle al gobierno provincial. No sé si nuestro lugar era estar presentes o no en ese acto, que fue en el marco del Poder Legislativo y eminentemente político. Fuera de esto, nadie puede pensar ni un segundo en que nosotros no estemos de acuerdo con impulsar un pedido de prórroga del régimen. Por eso salimos atrás del anuncio de la gobernadora con un comunicado de prensa, dando nuestro punto de vista”, recordó.
“Yo no puedo explicar por qué no estuvimos presentes, pero no tenemos ninguna razón para no estar. Simplemente me parece que hay momentos para la política y así lo habrá entendido el gobierno provincial. De todas maneras el trabajo es coordinado con todos los actores de la sociedad. Cuando la UOM a nivel nacional hace algún tipo de gestión, nosotros procuramos estar coordinados con ellos, trabajando conjuntamente, y lo mismo cuando hace otro tanto el gobierno provincial”, concluyó.