Durante la jornada de ayer, el joven Abdul Musaber fue indagado por el juez de Instrucción Raúl Sahade, en relación a los hechos que ocurrieron el fin de semana, y que una vez más, tienen como protagonista a este chico que posee antecedentes tanto policiales como judiciales. Por su parte, vecinos del pasaje Villegas, quienes han sido víctimas de Musaber a lo largo de los años, ayer se reunieron intentando buscar una solución, sin embargo, la indignación los invade y aseguraron “queremos que alguien nos escuche y ver si lo pueden dejar encerrado”.
Río Grande.- Abdul Musaber, Claudio Alfaro y Nahuel Ríos fueron indagados por el juez de Instrucción Raúl Sahade. Los tres están imputados de los delitos de lesiones, amenazas y violación de domicilio, todos delitos excarcelables, de hecho, representado por el Dr. Gasalla de la defensoría oficial, hizo el pedido de excarcelación, el cual deberá ser contestado por la fiscal, la Dra. Laura Urquiza y resultó en la presente jornada.
Musaber es el más complicado ya que se le imputa el robo a un local de calle Colón del que se llevó 1500 pesos que no aparecieron, junto a estos otros dos sujetos que tendrían una responsabilidad menor.
Por otro lado, Musaber violó un domicilio del pasaje Villegas, donde agredió a una mujer adulta mayor, lugar precisamente en el que se dieron cita los vecinos del lugar para reclamar que no vuelva a ser liberado.
“Siempre fuimos amenazados, no se si las amenazas son hirientes, pero tenemos que hacerle caso, no sabemos si son ciertas o no, creo que no lo hace en sus cabales, creemos en la justicia y vamos a apostar a eso, pero los vecinos están cansados como yo”, indicó el hijo de la mujer víctima de este último hecho.
Otro vecino indicó: “nos juntamos porque estamos cansados y queremos que se vayan y sino, necesitamos seguridad, no están resolviendo como debe ser. Hay denuncias pero no se hace nada, queremos que vengan y que se lo lleven, pero que no estén más. Las autoridades están presentes pero no hacen nada”, reclamó, acerca de la presencia policial en la zona.
Otro de los quince vecinos damnificados en diferentes oportunidades, y aún cuando Musaber era menor de edad, refirió con malestar: “Las últimas amenazas fueron verbales y fueron de quemar la casa y matarnos. Si lo largan y vuelven, vamos a hacer justicia por mano propia. Primero queremos que quede adentro porque no se puede vivir así, queremos estar tranquilos, estamos todo el tiempo atentos mirando por la ventana. Si vuelve se va en un cajón”, dijo para finalizar.