El titular del Laboratorio del Fin del Mundo dio detalles del alcance de los convenios firmados este martes, que amplían el mercado de comercialización no sólo al sector estatal argentino, sino al privado, y se extiende a América Latina. Además, se agrega a la producción de Atazanavir que venían realizando, la producción de un medicamento que cura la Hepatitis C. “Este Laboratorio ya dejó de ser un proyecto para transformarse en una realidad bien concreta”, subrayó.
Río Grande.- El Dr. Carlos López, titular del Laboratorio del Fin del Mundo, informó por FM La Isla los alcances de los convenios firmados este martes, como corolario de “un largo camino de capacitación y de formación de equipos”, dijo.
“Yo destaco siempre a nuestros jóvenes profesionales, que son nuestra fortaleza y los pilares sobre los que basamos la adquisición del conocimiento en una industria tan compleja como la farmacéutica. Por otra parte, hay un fuerte apoyo político de la gobernadora Bertone que estuvo todo el tiempo al tanto de estas negociaciones. Lo venimos trabajando hace rato y se concretó este martes, con la firma de dos convenios con el laboratorio Bristol Myers Squibb. Primero fue una adenda al primer contrato de producción de Atazanavir, porque en el primero nos daban el canal de comercialización con el estado nacional. Para el primer año estimamos seis millones de comprimidos para el Ministerio de Salud de la Nación. Fuimos evaluados y auditados por esta firma, y con mucho agrado podemos decir que nos han cedido el canal comercial completo en Argentina, a nivel privado y de obras sociales, y además para toda América Latina. Para nosotros es un desafío increíble, porque nos cambia un montón de cosas en cuanto a provisión de insumos, equipamiento para la producción”, expresó.
“Vamos a ir despacito, pero brindarnos ese mercado implica ampliar la producción. Queremos ser una fábrica que esté funcionando los 365 días del año. Tenemos firme el mercado nacional y el 70% de la producción se la lleva el estado nacional; y el otro 30% la parte comercial privada. De acuerdo a la cantidad que se vende disminuye el precio, porque disminuyen los costos a mayores cantidades. Vamos a tener que aumentar nuestra capacidad productiva y, con el plantel que tenemos, empezar a hacer andar la fábrica de corrido. En este momento la fábrica está parada porque recién hace un año nos habilitaron por ANMAT y estamos re-certificando cada una de las cosas que utilizamos en la fábrica, estamos realizando capacitaciones con nuestro plantel profesional, y llevamos 54 capacitaciones en el año, es decir más de una por semana”, subrayó.
“Por un lado aumentamos la producción de Atazanavir y vamos por otros mercados. Tenemos que ir viendo la demanda país por país y nuestra gerencia comercial ya está trabajando en el tema, tomando contacto con distintos países. La frutilla del postre es Brasil, porque si ganamos ese mercado es muy importante. Vamos a seguir negociando con Chile, con Colombia, por esta ampliación del contrato”, indicó.
“Por otra parte, habíamos planteado que nos den otro antirretroviral para producir, y se firmó el contrato para un medicamento que es la cura de la Hepatitis C. En 24 semanas, alguien que tiene Hepatitis C se cura. El tratamiento es costoso, pero es muchísimo más barato que un trasplante de hígado, y del punto de vista humano también cambia la calidad de vida de la gente, que no tiene precio. Empezamos a hacer la transferencia de tecnología, con el mismo modelo que usamos para el Atazanavir. Si tenemos que mandar a alguno de nuestros profesionales a ver el proceso en Estados Unidos lo vamos a hacer, y queremos para julio o agosto del año que viene estar ingresando con la producción de este medicamento”, dijo.
Para este segundo medicamento “también nos dan el mercado argentino y el mercado de América Latina. Este Laboratorio ya dejó de ser un proyecto para transformarse en una realidad bien concreta. Hace un año no teníamos nada”, reflexionó.
“En estos días queremos hacer un informe de todo lo actuado durante el 2018. Se lo vamos a elevar a la gobernadora, que fue la instigadora de este proyecto. Yo quería un laboratorio de salud pública y Rosana planteó hacer un laboratorio de medicamentos. Lo primero que le dije es que era una locura, y ella todavía se ríe. De tres años y medio a esta parte, contamos con esta realidad y quien le dio viabilidad política fue Rosana Bertone y también todos los legisladores que aprobaron la ley por unanimidad”, destacó.
“Vamos a hacer el informe anual a la gobernadora, al Ministro de Salud que representa al estado como principal accionista, al Banco de Tierra del Fuego y a todos los legisladores. Estamos terminando el año con un regalo de Navidad anticipado y lo que buscamos es generar trabajo y, como peronistas que somos, Bertone plantea que el medicamento llegue a quien lo necesita a un costo accesible, para que quien lo necesite, lo tenga. Es un sueño logrado, estamos muy contentos, pero también es una responsabilidad muy importante, porque estamos evaluando un desafío logístico increíble, que esperamos que sirva para posicionar a Tierra del Fuego dentro de la industria farmacéutica en el continente”, concluyó.