Es en homenaje al trabajador petrolero y en esta primera vuelta a uno de ellos, Juan José Degratti quien en 1960 unió por primera vez Ushuaia con Alaska con una pequeña motocicleta. El homenajeado tuvo un accidente doméstico que lo dejó fuera de la travesía. El evento fue organizado por la Agrupación Hermanos del Viento con el apoyo del Sindicato de Petroleros Privados y de la que participaron otras agrupaciones de moteros. Más de un centenar de motos partieron de la Rotonda del Avión y recorrieron los yacimientos.
Río Grande.- Luís Sosa, secretario General del Sindicato de Petroleros Privados, compartió que “los compañeros moteros se acercaron a nuestra organización para ver de qué manera nosotros podíamos estar presente en esta primera vuelta histórica que iban a hacer los compañeros de la Agrupación Hermanos del Viento”.
Agregó que “pudimos sumar a Juan José Degratti en el gremio ya que es su casa, y nos sacamos fotos entre todos y lamentablemente el compañero Degratti tuvo un accidente en su domicilio particular y hoy, 16 de diciembre, la primera vuelta que van a hacer los compañeros moteros dentro de los yacimientos nos pone muy felices y contentos por ellos y nosotros lo único que hacemos es darles un apoyo en este evento”.
Recordó que Degratti “fue también Secretario General de nuestro sindicato”.
Moisés Barría, referente de la Agrupación Hermanos del Viento, comentó que “esta agrupación la conformamos con mi hermano, además de dos hermanos más que son los Calixto, y las veces que fuimos a los moto-encuentros siempre nos agarraba el viento”.
Agregó que “mi hermano se baja en la zona de la barcaza y me dice qué pasa que siempre que salimos hay viento y ahí decidimos ponerle a nuestra agrupación Los Hermanos del Viento. Comenzamos 4 y ahora somos 27 y seguimos sumando gente y comenzamos hace más de un año y medio”.
Moisés Barría agradeció a Luís Sosa y a René Vergara “por hacer realidad este evento que creo que va a ser maravilloso y esperamos que se consolide en el calendario en los años que vengan”.
Han participado además integrantes de otras asociaciones moteras como Los Desterrados, Vouken Kayen, desde Ushuaia Los Piratas del Asfaltos, Las Águilas del Asfalto, Los Pingüinos, entre otras.
“Los agasajos siempre hay que hacerlos en vida”
René Vergara, secretario de Prensa, por su parte, comentó que “estamos muy contentos por participar de esta primera vuelta histórica hacia los yacimientos, lamentablemente el accidente que tuvo Juan José Degratti hoy lo dejó afuera de esta travesía que lleva el nombre de él y era una buena oportunidad, pero lamentablemente pasó esto. Pero estamos muy contentos igual porque se están sumando muchos compañeros, teníamos alrededor de cien inscriptos y se han sumado más, hay gente de Ushuaia, gente de Tolhuin y la mayoría de acá de Río Grande”.
El dirigente gremial dijo que no se dejaron detalles librados al azar, se ha contratado una ambulancia lo mismo que los seguros de modo de tener toda la cobertura posible hasta el final del trayecto. “Esta es nuestra primera experiencia y esperamos seguir mejorándola en los años que vienen”.
Consultado sobre el circuito, René Vergara detalló que “vamos a ir por María Behety, Los Flamencos, San Julio, Río Avilés; después volvemos por el Cruce de Chorrillos, nuevamente la ruta por acá. Vamos a compartir un asado en una cantera que nos autorizó la estancia”, dijo finalmente.
Un hito histórico
Juan José Degratti, rosarino y a su vez antiguo poblador fueguino, quien a la edad de 22 años recorrió 28.000km en 32 meses atravesando el continente de una punta a la otra en una motocicleta marca Alpino.
Degratti dijo en un reportaje a Radio Universidad el 20 de agosto de 2015, que “todo comenzó cuando se inició la Misión Salesiana con el reverendo padre Ruiz y el padre Aurelio Muñoz del Val, ya que fue a ellos quienes les comenté mis intenciones de hacer este viaje. Fue es así que el 19 de noviembre de 1960 a las 09:45 parto de Ushuaia con una moto Alpino 175cm3, motor 421”; y agregó que “mi único equipaje eran algunas herramientas, una cubierta de repuesto, un termo de café y una frazada”.
Del mismo modo, al recordar otra de sus aventuras durante el recorrido, Degratti dijo que “estaba totalmente decidido a avanzar ante cualquier obstáculo que se interpusiese, Tal es así que tuve que afrontar terremotos, volcanes en erupción y algunas guerras civiles que hubo como fue la de Ecuador impidiendo que pueda cruzar la frontera desde Perú”. Asimismo recordó que “cuando tuve que cruzar por Costa Rica habían alrededor de 12 o 15 ríos por lo que tuve que desarmar la moto varias veces para atravesar las partes. Para mí fue una aventura inolvidable”.
Por otro lado, Degratti destacó que “este tipo de viajes se hacen con mucho dinero o seco del todo, yo lo hice en la segunda opción. Siempre buscaba la forma para poder conseguir combustible, generalmente pedía ayuda a los cuerpos de Bomberos Voluntarios. No obstante, una vez en Paraná sucedió que me ofrecí para limpiar el coche de un hombre a cambio de que me cargue combustible. Resultó que ese hombre era el dueño de la estación de servicio, por lo que no sólo me dio de comer y me cargó combustible, sino que además me regaló un dólar”.
Asimismo, el aventurero indicó que “tuve algunos inconvenientes con las embajadas argentinas para que puedan orientarme para transitar en los distintos países. Sin embargo en Lima, Perú, hablé con el embajador para que me facilite dinero para comprar una cubierta y él no dudó en hacerlo. Luego, cuando tuve que renovar mi pasaporte en México, allí estaba el mismo embajador”.
Según indicó Degratti, al momento de pasar por Rosario, en su viaje de ida a Alaska, Juan José estuvo cerca de cancelar su aventura por una joven que había conocido. No obstante, debido a la motivación de su padre eso no sucedió. Asimismo, el aventurero dijo que “en Lima conocí a dos muy bellas mujeres, hermanas, de las cuales tengo muy lindos recuerdos, incluso en Estados Unidos también conocí a otra mujer a la cual le pedí matrimonio pero que afortunadamente no aceptó”. Cabe decir que actualmente, Juan José está casado, tiene 5 hijos y 9 nietos.
Haciendo un balance lo que fue este recorrido de punta a punta por el continente, Juan José aseguró que “el mejor momento fue cuando regresé a Rosario, ya que quería llegar para el cumpleaños de mi padre que era el 25 de diciembre. Fue así que tuve la posibilidad de viajar desde Miami en un avión Jet, que recién comenzaban, debido a que uno de los pasajeros se bajó y me dieron el lugar a mí. No obstante, ocurrió un desperfecto en el avión producido por una sobrecarga de energía eléctrica por lo que mucho creían que nos íbamos a estrellar, siendo este a la vez el peor momento del viaje”.
Así también, el aventurero explicó que “cuando estaba llegando a Fortín Mercedes, había un médano que hizo que la motocicleta se encajara. Fue así que saqué mi frazada y me acosté a descansar. Cuando desperté al otro día, advertí que me encontraba al lado de la tumba de Ceferino Namuncurá. A partir de allí me hice devoto de él hasta el día de hoy que tengo una medallita”.
En relación a la motocicleta con la cual realizó los 28.000km, Degratti dijo que “la cambié por cuatro cubiertas para mi auto por lo que el motor de la moto lo utilizaron para armar un carting. Mi idea es poder recuperarla y que sea colocada en el museo histórico de la ciudad con toda la documentación que tengo guardada de lo que fue este viaje”.
Por otra parte, Juan José contó que “al papa Francisco lo conocí cuando era un sacerdote común en Buenos Aires junto al Monseñor Musto en la iglesia de Balvanera, en la década del ´80, donde se hizo una misa en homenaje a José Ignacio Rucci”.
Por último, Juan José Degratii hizo referencia al conflicto bélico de Malvinas y aseguró que “en aquella época colaboraba con el intendente Juan Carlos Apollinaire a sacar y entrar los aviones en la base aeronaval. Asimismo, mi hijo mayor nació un 2 de abril, siendo doblemente importante esa fecha para mí. Espero que algún día podamos recupéralas”, finalizó.