Mónica Acosta planteó un año de luces y sombras, con mucha producción por el mundial pero mayor incertidumbre ante la recesión, que deriva en falta de pedidos en el corto plazo. En enero comenzarán a fabricar televisores, a partir de insumos adquiridos con un préstamo del BTF y además decidieron presentarse en la licitación lanzada por la provincia para la adquisición de luminarias led. Pidió mayor presencia del estado y un cambio de políticas hacia un modelo inclusivo, y estimó que queda menos de la mitad del personal empleado en la industria, comparando con la gestión anterior. Instó a la unión de todos los sectores para pelear por el régimen fueguino.
Río Grande.- La presidente de la Cooperativa Renacer, Mónica Acosta, realizó un balance del año por Radio Provincia y consideró que hubo un 2018 “de luces y sombras”.
“En lo productivo para nosotros fue un año muy bueno, también muy sacrificado por la crisis que nos ha atravesado. Fabricamos aproximadamente 65 mil televisores y 70 mil microondas. Desde que comenzó el año pusimos el centro en mejorar la tecnificación y adquirimos una máquina usada para chipeo, de manera de generar mayor valor agregado y no tener que tercerizar este servicio. Posteriormente y luego de casi un año de espera, el estado nacional cumplió con la entrega de un subsidio, con el cual compramos la segunda máquina de inserción superficial”, dijo.
“Fue un año en el que logramos realizar algunas cosas que teníamos bastante postergadas, aumentamos el 30% el valor de nuestra hora mensual y hacía dos años que no podíamos hacerlo. Este año se entregaron 60 departamentos para integrantes de nuestra cooperativa en el barrio Renacer de Andorra. Inauguramos nuestro bachillerato popular, en principio para nuestros trabajadores de la fábrica, pero también tenemos intención de abrirlo a la zona donde está radicada la fábrica para los distintos vecinos, de modo que puedan continuar con el programa que permite finalizar los estudios secundarios”, indicó.
“Fuimos batallando con una crisis que se profundizó muchísimo a partir de determinados decretos nacionales que vaciaron aún más de contenido nuestro régimen de promoción industrial, acotando mucho las bondades de la producción. La recesión en el mercado hizo que ninguno de nuestros clientes estuviera en condiciones de renovar ahora en el corto plazo ninguna orden de compra”, lamentó, sin perspectivas para un 2019 que amenaza con ser más complicado todavía.
“Obtuvimos un crédito con una tasa del 34% del Banco Tierra del Fuego por un monto de 24 millones de pesos, con lo que compramos insumos para 3.000 televisores que van a llegar a fines del mes de enero. Esto es todo lo que tenemos para producir”, aseguró.
“Hace pocos días atrás, llevando una fuerte discusión también, nos presentamos en la licitación pública para la provisión de mil luminarias de led a la provincia. Estamos compitiendo con cuatro oferentes más, así que estamos peleándola y tratamos de salvaguardar siempre nuestra fuente de trabajo, viendo qué se puede hacer. Pero tiene que haber un contexto político nacional y provincial que tiene que mejorar, porque si hay un sector que ha perdido a lo largo de estos tres años en la provincia, es el sector industrial”, subrayó.
“La pérdida de empleo impactó de forma preponderante en la isla, y ya nadie habla de los 15 mil o 16 mil puestos de trabajo que teníamos en la industria antes de asumir este gobierno nacional y provincial en 2015. Somos muchísimos menos y, con toda la suerte sumando las tres ciudades, llegamos a 6.000. Este es el peor flagelo a combatir”, consideró.
“Nosotros somos una cooperativa, por lo cual en lo particular nos atraviesan cosas con mayor intensidad y necesitamos mayor presencia del estado y definiciones desde lo público, para generar herramientas donde seamos tenidos en cuenta. Hay cosas que parecen mínimas pero no lo son, como las licitaciones públicas”, planteó, con la expectativa de poder competir en ese ámbito.
“Nuestro caso es muy especial, somos parte de una misma familia y nos conocemos desde hace muchísimos años. Sabemos que hemos construido una forma de vida sencilla, sin lujos. Lo que más destaca a este grupo de trabajo es la solidaridad y la concepción de cómo se genera y se reparte la riqueza. De la puerta para afuera nos rigen las leyes descarnadas del mercado, pero de la puerta para adentro a veces soñamos con el germen de un nuevo estado y con un socialismo que estamos muy lejos de conseguir. Los vientos que soplan cada vez nos alejan más de una política distributiva y lo vemos en los fenómenos que se están dando en Latinoamérica”, observó.
Instó a salir adelante entre todos, y no dejarse llevar por grietas que no son reales, sino alentadas por determinados grupos políticos. “No hay que generar falsas líneas divisorias y creo que es el primer paso para discutir qué tipo de provincia nos merecemos. No nos merecemos sufrir hasta el último momento por la ley de promoción y solamente aferrarnos a lo temporal. En este momento es más necesario trabajar juntos para lograr un modelo distinto que nos incluya a todos”, priorizó.
Venta comunitaria de alimentos
Por otra parte, dio a conocer que junto a 14 organizaciones decidieron poner a la venta bolsones de alimentos el próximo sábado 22 de diciembre, pensando en la cena de Navidad.
“Hemos definido una compra comunitaria y estamos acercando bolsones de 11 kilos de fruta y verdura a 250 pesos, y el maple de huevos a 100 pesos”, informó, destacando la importancia de “organizarse frente al ajuste, la pérdida de poder adquisitivo, la fuerte inflación y la suba de precios, que es más que significativa para la época de las fiestas. En principio la venta comunitaria iba a ser entre las organizaciones pero también está abierta al público desde las 11 hasta las 18 horas, el día 22 de diciembre, en la sede de la Cooperativa Renacer”, concluyó.