El Decreto 332 que aumentó la tasa de estadística de 0,5% al 2,5% es confuso y generó dudas sobre si están o no gravadas también las exportaciones. El Gobierno asegura que no, pero empresarios esperan una aclaración, que podría sacar AFIP en las próximas horas.
Buenos Aires.- El Decreto 332 publicado ayer en el Boletín Oficial mediante el cual el Gobierno aumentó la tasa de estadística para todas las importaciones -de 0,5% a 2,5%- generó una fuerte polémica en las distintas cámaras empresarias, cuyas áreas legales interpretan que además de las compras al exterior, también quedan gravadas con ese tributo las ventas.
«No están alcanzadas las exportaciones. Tanto el área de legales de Hacienda como de AFIP coinciden en eso y no es el espíritu de la decisión», dijeron en el ministerio de Hacienda, ante la consulta de Infobae. Sin embargo, la normativa resulta confusa y en la AFIP analizan sacar una aclaración en las próximas horas, dijo una fuente oficial.
¿Qué fue lo que dio lugar a la confusión?
Concretamente, el decreto 332 suspende normativa antigua que habilitaba excepciones al pago de la tasa de estadística. Así, suspende los artículos 26 y 27 del decreto 690 del 2002, y el 26 claramente dice que quedan exceptuadas del pago de esa tasa a) las mercaderías que se exporten en forma suspensiva o definitiva para consumo y b) las mercaderías originarias de los Estados parte del Mercosur. «Por ende, este decreto elimina la excepción que tenían las exportaciones», analizaron los técnicos legales de la UIA.
Desde Hacienda remarcaron insistentemente que «no están gravadas las exportaciones» y la explicación técnica es que existe «un decreto de 1991 que exoneraba las exportaciones de pagar la tasa de estadística y que luego otra norma de 1995, erróneamente, las volvió a citar». De todos modos, quedó claro que la redacción genera dudas y merece una aclaratoria.
Más allá de esta aclaración, que dejará tranquilos a los empresarios, la decisión oficial de aumentar la tasa de estadística sobre las importaciones generó una fuerte molestia en el sector privado. En la cartera que dirige Nicolás Dujovne aseguraron que los números no cierran y se tuvo que recurrir a esta decisión, que venía bajo análisis desde hace tiempo. Implicará una recaudación anual de entre $28.000 y $30.000 millones.
El sector autopartista había realizado esta propuesta, pero como forma de compensar una suba de los reintegros a la exportación o una rebaja de retenciones, que reclaman para mejorar la ecuación exportadora de la industria automotriz. Con el alza de la tasa de estadística, el Gobierno iba a poder evitar un impacto fiscal.
Su impacto es similar a una suba generalizada de aranceles ad valorem y profundiza los problemas de falta de competitividad e inflación de la economía argentina, al encarecer los bienes e insumos importados en el mercado doméstico (CIRA)
Finalmente, Hacienda decidió encarecer las importaciones y la industria automotriz sigue esperando la buena noticia. Por el momento, y si bien en el Ministerio de Producción mantienen la negociación con Dujovne, el contexto económico vuelve difícil avanzar en ese sentido, dijeron fuentes cercanas al ministro.
La lectura que realizaron en el sector es que como producto de la suba del tipo de cambio hoy las retenciones representan menos en términos porcentuales (2 puntos aproximadamente), esta suba de la tasa de estadística para importar, en el caso automotriz, les compensa esa mejora. Vale recordar que las terminales importan mucho vehículo terminado y de lo que producen localmente, el 70% son piezas del exterior.
También cuestionó la medida la Cámara de Importadores (CIRA). Mediante un comunicado de prensa, la entidad aseguró: «La medida fue presentada con el objetivo de incrementar la recaudación fiscal y aparece como una contraprestación por servicios de estadística. Su impacto es similar a una suba generalizada de aranceles ad valorem y profundiza los problemas de falta de competitividad e inflación de la economía argentina, al encarecer los bienes e insumos importados en el mercado doméstico».
