La semana que pasada la Gobernadora Rosana Bertone firmó un convenio con la Facultad Regional Tierra del Fuego de la UTN para saldar la deuda histórica que la provincia mantenía con los docentes de la universidad por el incumplimiento de la ley 295 operado durante el gobierno de la ex gobernadora Fabiana Ríos.
Río Grande.- Fabio Seleme, representante docente de la UTN expresó que “La deuda data del año 2011 y fue el resultado de las políticas de hostigamiento y persecución que Fabiana Ríos llevó adelante contra la UTN y sus docentes. Hay que recordar que en el año 2009 la ex gobernadora Ríos decidió arbitraria y caprichosamente dejar de abonar la equiparación salarial para docentes universitarios que establecía la ley 295. Esto fue hecho en el marco de toda una serie de acciones persecutorias y hostiles contra la universidad. En ese mismo momento la gobernadora Ríos trató de enajenar el edificio con el que la UTN contaba en Ushuaia, se robaron 7 profesorados del ISPRG ordenándose un traslado compulsivo y traumático de alumnos y docentes. Para dimensionar el odio y ensañamiento que tenía este grupo político contra la UTN basta recordar que en una ocasión se hicieron presentes en la institución, el esposo de Fabiana Ríos con la entonces concejal Marisa Montero, para arrancar dentro de la universidad misma, de manera insólita e inédita, carteles de nuestro gremio docente que criticaban la gestión de su jefa política.” Seleme continuó explicando que “dentro de ese marco es que Fabiana Ríos, de manera impune, empezó a incumplir la ley 295 de equiparación salarial que era un beneficio exclusivamente para los docentes de la UTN y no para la institución”
Respecto de las acciones de reclamo el representante docente dijo que “En aquel momento concurrimos a la justicia. Lo hizo la Facultad y la FAGDUT, nuestro gremio docente. Y ganamos, obtuvimos sentencias favorables en todas las instancias y la Provincia fue condenada a pagar en el año 2014. No sin sucesivas intimaciones Fabiana Ríos fue obligada a avenirse a lo dispuesto por la justicia y abonó el periodo reclamado que iba del 2009 al 2011”.
Refiriéndose luego al accionar a la conducta que tomó la administración provincial después de los fallos judiciales adversos, Fabio Seleme agregó que “lejos de regularizar la situación hacia adelante, la ex gobernadora Ríos continuó incumpliendo con la ley 295 desde el año 2011 en adelante. La decisión de Ríos fue acumular capital más intereses a una deuda con los docentes que indefectiblemente el estado iba a tener que pagar. A pesar de contar con sentencias judiciales en contrario siguió utilizando al estado como herramienta de su capricho personal contra la UTN, generando un perjuicio a las arcas de la provincia con una irresponsabilidad y negligencia que seguramente merecería una investigación y condena judicial.”
Sobre la situación actual el referente universitario dijo que “Hoy la gobernadora Bertone regularizó esta situación luego que la legislatura derogara la ley 295. Tuvo que hacerse cargo de una deuda, judicialmente consolidada e inapelable ya que contaba con sentencia firme”. “Tenemos que agradecer la disposición del Gobierno de Rosana Bertone, con el que siempre pudimos hablar y dialogar para solucionar la situación. Sabíamos que este gobierno no era el responsable y por eso también cedimos nosotros para poder llegar a un arreglo que cerrara el conflicto. Esperamos pacientemente porque también entendemos los procedimientos legales y administrativos que preceden un acto de gobierno”
Finalmente, Fabio Seleme tuvo un párrafo para el futuro haciendo notar que “hay muchos que nos amenazan con que si cambia el gobierno volveremos a ser objeto de persecuciones y hostigamientos. Desgraciadamente personas con nombre y apellido y que conocemos nos han venido a querer amedrentar, a decirnos que estamos en la mira. Inexplicablemente hay grupos políticos, por suerte minoritarios, que piensan que mejorar la educación en Tierra del Fuego consiste en perseguir a la universidad pública nacional, piensan que los docentes de la UTN no somos docentes, que nuestros alumnos no son alumnos. Lamentablemente, estos grupos sectarios a veces acceden a puestos con poder de decisión porque para algunos monopolizan las demandas educativas y la voz de los docentes”
La firma del convenio UTN-Provincia cierra así un capitulo absurdo de la reciente historia de Tierra del Fuego donde en vez de cooperar el Estado con la universidad, buscaba condicionarla en su actividad educativa.