Productores madereros de Tolhuin se reunieron con autoridades municipales para evaluar alternativas frente a la crisis que atraviesa el sector. Entienden que el salvataje podría venir si localmente se impulsara el consumo de productos que están en condiciones de elaborar. Se refirieron puntualmente a la construcción de casas sociales, o cubrir necesidades que pueda tener el IPV en cerramientos y muebles.
Río Grande.- Sergio Dittler, quien se encuentra al frente del aserradero Guaraní que fue noticia esta semana por la paralización de sus actividades, se refirió a la reunión que mantuvieron en la Cámara de Comercio de Tolhuin para analizar la problemática del sector -de la cual participó también Eliseo Levin como Secretario de la Producción de la Municipalidad- y señaló que “entre todos los madereros estamos viendo como le podemos buscar una solución a todo esto”.
Indicó que la situación del aserradero Guaraní será tomada como prioridad para buscar una salida, teniendo en cuenta la inactividad y la posibilidad de la pérdida de casi 30 puestos de trabajo, pero también “para el resto de los colegas”, señaló Dittler en declaraciones a Radio Provincia. Recordando que en el sector “no podemos seguir trabajando, porque no nos dan los números y por eso estamos buscando una solución”.
Sobre el caso particular del aserradero Guaraní, comentó que los inconvenientes los arrastran “desde hace un año, por el tema que la madera sigue manteniendo el mismo precio desde hace un año y todos los productos que usamos para trabajar en el aserradero están dolarizados, así que aumentaron hasta tres o cuatro veces y por eso no podemos seguir trabajando”.
Dijo que mantuvieron reuniones con el intendente Claudio Queno para analizar la situación, en el intento de “buscar una solución”. El productor maderero aseguró que su intención es “seguir trabajando, por eso lo que precisamos es ver que ayuda podemos tener para poder seguir. Porque quienes quedamos en la calle, los 25 trabajadores y yo también, solamente sabemos hacer esto y no otra cosa”, remarcó.
En el mismo sentido indicó que “En Tolhuin fundamentalmente hay aserraderos, hay un poco de turba pero ya está cerrando por el invierno y los aserraderos estamos todos igual. Estamos tratando de buscar otros mercados como Chile, Lenga Patagonia también dicen que la van a comprar, pero todo eso va a llevar tiempo”, advirtió.
Los productores indicaron que se ven afectados fundamentalmente por el incremento en el costo de materiales e insumos para producir, mientras se ven imposibilitados de aumentar el precio de sus productos porque “si los aumentamos no nos compran”. “Entonces nos tenemos que manejar con eso, además nos dan cheques a 30, 60 o 90 días y eso no lo podemos aguantar más. Así que la situación es muy complicada”, aseveraron.
Dijeron que los cheques, cuando los cambian anticipadamente, tienen una pérdida de “entre un 12 y un 15 por ciento mensual, nosotros no tenemos espalda para aguantar y terminamos reventando esos cheques. A todo esto se suma el combustible, que antes no se notaba tanto pero hoy es un costo muy importante”, indicaron.
“Quisiéramos hacer casas para el Gobierno, buscar la vuelta por ese lado, pero hasta el momento no pasa nada”, reiteraron los productores. Mencionando finalmente que se dedican a la producción de “tirantería y madera para obra”, pero también están en condiciones de producir mobiliario y cerramientos.
Consultado por último Dittler sobre el posible convenio con el IPV, para avanzar con la producción en ese sentido, respondió que están “esperando”. Reiterando que los madereros de la provincia están en condiciones “de elaborar casas sociales, cerramientos y muebles que puedan ser consumidos localmente”.