El secretario de Recursos Humanos del gobierno provincial, Martín Solá, evaluó el desarrollo del programa de retiros voluntarios, que finalizó el 30 de junio, luego de la prórroga que se había otorgado. “Los resultados que obtuvimos fueron positivos por el número de agentes que se adhirieron. Son 130 personas que ya tienen el beneficio otorgado y tenemos unas 77 más en trámite, con lo que estaríamos superando los 200 agentes en la administración”, estimó por FM Master’s.
Río Grande.- El secretario de Recursos Humanos del gobierno provincial, Martín Solá, destacó que “más allá de mejorar la eficiencia de la administración, uno busca dar oportunidades que generen empleo, dado que el retiro voluntario muchas veces es para iniciar un emprendimiento y, si funciona bien, después genera más fuentes de trabajo”, explicó.
Al respecto manifestó que “esa era la idea y la mayor cantidad de adhesiones que tuvimos no resintieron el buen funcionamiento, porque la política preveía que la autoridad máxima de cada una de las dependencias podía denegar el retiro voluntario por razones de servicio”.
La cifra final cumple con las expectativas porque “cuando iniciamos esto, en charlas con el ministro de Economía, se estimaron entre 150 y 300 personas, y más o menos estamos dentro del número previsto”, sostuvo.
Entre los que se acogieron al programa, diferenció dos grandes grupos: “Uno eran personas que ya estaban cercanas a obtener el beneficio jubilatorio y eran personas de edad avanzada. Tenemos todos los ingresos que se dieron en 2005, que son personas que ingresaron con el Megapase y ya tenían edad bastante avanzada y tenían tareas pasivas. Para esas personas fue un beneficio importante y tenemos un grupo grande, que es el 40% de los que ingresaron al beneficio”, dijo.
“Después tenemos otro grupo de jóvenes profesionales, o personas que ya tenían un oficio y, a partir de esto que da una espalda por tres años para poder lanzar un nuevo negocio, optaron por este beneficio para poder independizarse”, manifestó.
Recordó que el retiro prevé el pago “del 60% del haber bruto. Aparte de este 60% podían optar por mantener la obra social”, en los casos en que no se acogen al beneficio jubilatorio.
Por tal motivo aseguró que “el estado provincial ha mejorado muchísimo su rendimiento. Hoy tenemos un estado que está presente y estamos evaluando el rendimiento en el área de los docentes, donde hemos incrementado casi en 5.000 agentes la matrícula, y también hemos incrementado los docentes. A partir de un trabajo en conjunto con los directores de las escuelas se hicieron proyecciones, viendo que cada docente esté destinado a un curso, y que ese curso tenga alumnos. Se trabajó en estos cuatro años en hacer un estado inteligente y la sociedad obtiene un beneficio por el funcionamiento del estado”, afirmó.
Los que accedieron al retiro voluntario no pueden volver a la administración pública hasta después de transcurridos cinco años, contados a partir de que finaliza el período de tres años durante el cual van a estar cobrando el 60% del haber bruto.
