El vicepresidente del IPV, Fabio Escobar, aseguró que las escaleras de emergencia de Chacra II y Chacra IV estarán terminadas antes de que finalice la gestión, luego de lograr destrabar la documentación que se requería. Hizo una evaluación positiva del desempeño del área en estos casi cuatro años.
Río Grande.- El vicepresidente del IPV, Fabio Escobar, informó por Radio Universidad 93.5 sobre el avance en las obras de instalación de escaleras de emergencia en los edificios de Chacra II y Chacra IV, y estimó que van a estar terminadas “antes de que termine la gestión”.
“Las empresas lograron destrabar la documentación que les pedían y volvió a avanzar la obra, para que la gente lo tenga terminado lo antes posible. Teníamos previsto terminar antes de la veda pero no se pudo. En la medida que el tiempo lo permite, se va avanzando con la soldadura de las estructuras, peldaños y demás. Es todo en hierro y se van completando de a poco. Esto permite que una empresa trabaje directamente en el barrio y que otra haga toda la soldadura en galpones y obradores, para luego ir a soldar en la obra en sí”, explicó.
“Esto se hace con fondos del excedente que se obtuvo por el endeudamiento en dólares y son fondos de la provincia. Se aplicaron a obra pública para generar trabajo local. La inversión ronda los 200 millones de pesos y se hace en su mayoría con empresas de Río Grande”, dijo el funcionario.
Recordó que “en Chacra IV se están haciendo las escaleras de emergencia y mejoramiento integral del barrio, que incluye fachadas, espacios comunes y de recreación; y en Chacra II son escaleras de emergencia solamente”.
En cuanto a la labor del instituto en la gestión que está por finalizar, sostuvo que “en Ushuaia se hizo mucha vivienda y en Río Grande también se hizo mucha infraestructura. Se han conseguido financiaciones de nación y la mayoría de las obras están terminadas, pero este financiamiento de nación no llegó a completarse totalmente. Para completar la obra, nación se atrasó en algunos pagos y las empresas no podían avanzar, así que la provincia va aportando para cubrir ese desfasaje. De lo que son mayores costos y redeterminaciones, al día de hoy no se ha pagado nada de nación y eso lo cubre la provincia. Se podrían haber hecho mucha más obras con esa plata que invierte la provincia para cubrir desfasajes”, afirmó.
“Se han cumplido con todas las obras a rajatabla y la directiva de la gobernadora fue cumplir con los plazos, ahorrar costos, para cumplir con la gente. Yo estoy desde 1993 en el IPV y no es un dato menor que la gobernadora sea planta permanente del IPV, porque está entre las mayores gestiones de obra de la historia del instituto”, remarcó.
“Al conocer nuestro movimiento, se han pasado muchas obras por el IPV y se destinaron recursos que venían de nación para que los ejecute el instituto. Además el IPV cumple muy bien con los pagos, porque recibe los fondos que tiene que recibir y no demora en depositarlos a los fines que tienen que tener”, apuntó.
Por otra parte se lo consultó sobre el avance de la construcción de las veinte viviendas de madera en convenio con aserraderos de Tolhuin. “Esas obras están avanzadas aproximadamente al 40% y tengo entendido que ya se ha pagado el anticipo para que los aserraderos puedan arrancar. Esto se certifica como cualquier obra”, sostuvo.
A modo de evaluación general, indicó que “estamos conformes con lo hecho, con los recursos que teníamos y con los recursos que aportó la gobernadora para poder concretar un montón de obras. Si no se aplicaba el ingenio, iban a estar complicadas”.
Finalmente se refirió a su futuro y, como planta del IPV, “volveré a mi trabajo normal en la ciudad de Buenos Aires, como delegado del instituto”.