La economista Silvina Batakis, ex titular de la cartera económica de la provincia de Buenos Aires, analizó el informe de la agencia Bloomberg y de otras calificadoras internacionales, que ubican al país en una economía de posguerra. Le dio un tinte político a estos informes, que surgen en pleno proceso electoral, y estarían marcando la necesidad de un cambio de rumbo, continúe o no el presidente Macri. También aseguró que, con el 50% de utilización actual de la capacidad instalada, un giro en la política orientada a la producción podría rápidamente revertir la caída de la actividad, porque las inversiones están hechas, a la espera de otro escenario para volver a poner en marcha la industria.
Río Grande.- La ex Ministra de Economía de la provincia de Buenos Aires, Silvina Batakis, analizó el mensaje de la agencia Bloomberg, que difundió un informe en el cual ubica a la Argentina a la cabeza de las economías más vulnerables de los países emergentes, por encima de Turquía y Sudáfrica.
Para Bloomberg, Argentina es el país más vulnerable a los vaivenes de los mercados de capitales internacionales y los indicadores son peores que los de Turquía, Sudáfrica, Brasil y otras dieciséis economías emergentes del mundo. Entre los factores que se midieron se cuenta la deuda externa al corto plazo, con un elevado porcentaje con respecto al PBI; una de las inflaciones más altas del mundo, con una desviación de 35,8 puntos porcentuales por encima de la meta del 10% que el gobierno fijó como objetivo; las bajas reservas y un déficit de cuenta corriente del 2% del PBI.
Sin embargo desde el oficialismo nacional se divulgó ayer el crecimiento “del 2% de la economía con respecto a mayo de 2018”, que fue uno de los peores meses de un muy mal año. “Los datos que tratan de mostrarse como positivos no dejan de ser muy malos. El 2018 fue muy malo en materia de caída del PBI y, comparado con 13 años parece que hubiera un crecimiento, que en realidad no hay. Cuando hay crecimiento en la economía de cualquier lugar del mundo, se generan puestos de trabajo. Uno puede decir que la situación está estabilizada económicamente cuando utiliza en forma plena todos sus factores productivos, ya sea la fuerza de trabajo como el equipamiento o la maquinaria. Nosotros estamos destruyendo puestos de trabajo, porque otro dato que se conoció es que acabamos de destruir cien mil puestos de trabajo de empleados registrados, además de los que ya se habían destruido en los años anteriores, y el último dato sobre el uso de la capacidad productiva está en el 50%”, detalló Batakis por FM La Isla.
“No estamos utilizando nuestros factores productivos para aprovechar el potencial que tenemos en nuestro país. Esto no sucede en la Argentina desde hace varios años y es la preocupación más grande que tenemos muchos que estamos todos los días mirando los datos”, dijo.
Los sectores más castigados son los generadores de mano de obra intensiva, como la industria o la construcción y, pese al mal diagnóstico, un cambio de política podría implicar una reactivación relativamente rápida: “Si tenemos el 50% de nuestra capacidad instalada que no estamos utilizando, uno puede pensar que rápidamente con una política industrial activa podemos revertir la situación de decrecimiento de la actividad económica, porque tenemos capacidad instalada. No tenemos que esperar a que lleguen inversiones para poder crecer. El tema es que necesitamos políticas activas para que eso suceda”, planteó.
“Esta capacidad instalada que no se está utilizando tiene que ver con las decisiones que toma un gobierno sobre qué rumbo quiere seguir. En este caso, este gobierno tomó la decisión de primarizar la economía y desindustrializarla, es decir volcarse solamente al sector primario y al sector financiero. En este esquema no hace falta capacidad instalada, porque el gobierno no quiere generar una política industrial que ponga al país en una matriz productiva con complejidad industrial”, sostuvo.
La apuesta de Macri pasa por el sector agropecuario, que “genera puestos de trabajo, pero no los suficientes como para incorporar a la matriz laboral a la demografía que acrecentamos todos los años los argentinos. Este indicador crece al 1% anual desde hace muchos años, y no es como dijo la gobernadora Vidal, que la población ahora creció más de lo que crecía hace diez años. Es todo lo contrario, porque en épocas de crisis la población crece un poco menos, y la natalidad es inferior”, contrapuso.
“Con el sector financiero y el agropecuario no vamos a lograr tener una matriz laboral que deje contentos a todos los argentinos. Cuando uno ve lo que hacen otros países en el mundo, tienen muchas medidas para-arancelarias, también tienen medidas arancelarias para proteger sus puestos de trabajo. En Estados Unidos la tasa de importación de bicicletas es del 25%, y la importación de cada una de las partes tiene un impuesto del 5%. Esto es así porque ensamblar la bicicleta genera puestos de trabajo. Hay casos similares con otros productos, como computadoras, aire acondicionado, celulares, pero eso está mal para los gobernantes que tenemos, y por eso Tierra del Fuego ha llegado a la tasa de desempleo que tiene”, comparó.
“Es inéditamente triste lo que está sucediendo en la Argentina con una caída tan fuerte de la economía, el desempleo, el aumento de la pobreza. Se conocieron datos de la FAO –organización de las naciones unidas para la alimentación-, que dice que en Argentina aumentó la cantidad de personas en situación de hambre respecto del 2015. Todos los indicadores se condicen con una economía de posguerra, y nosotros lo hemos hecho nada más que en un gobierno, y elegido por el voto. La verdad es lamentable”, expresó.
Todos depreciados
La calificación de Bloomberg y de otras agencias internacionales tiene impacto no solamente sobre el gobierno sino sobre las empresas que siguen produciendo, al aumentar el riesgo. “Están admitiendo que la economía argentina es una de las más vulnerables del mundo y bajaron las calificaciones que tiene el país, las provincias y también las empresas argentinas. Un ejemplo es ARCOR, que había sido premiada años atrás y ahora está en situación de vulnerabilidad. Estos organismos internacionales están mostrando que la economía argentina realmente está muy mal”, remarcó.
“Cuando uno mira los indicadores del 2015, aun sabiendo que Argentina tenía muchos problemas, tuvimos la mejor transición en la historia argentina desde 1983. Cuando Alfonsín se fue, tuvimos uno de los episodios de hiperinflación más grandes del país. Cuando se fue Menem, tuvimos una tasa de desempleo que superó el 20%, y ni hablar de lo que fue el 2001 y el 2002. Aun con todos los problemas, en 2015 Argentina tenía buenos indicadores, y ahora estamos aparentemente en una situación de posguerra”, manifestó.
Consideró que detrás del informe de las calificadoras también “hay un mensaje político. Ellos saben que estamos en una transición electoral en este momento y con esto están advirtiendo que la economía está muy mal y que debería haber un cambio de rumbo, haya o no un cambio de presidente. No es ingenuo este tipo de informes. En un proceso electoral no es ajeno este tipo de informes tan duro”, dijo.
Respecto de las implicancias de este podio que ubica a la Argentina como la más vulnerable, dijo que “significa que cualquier país del mundo que estornude, a Argentina le da angina y termina en una situación de hospitalización. Turquía bajó las tasas y hay que ver cómo repercute en la economía Argentina en estos días. Ellos pasaron del 24% a casi el 20%, para tratar de reactivar su economía”, señaló, y podría tener su rebote en el país.
