Las presidentes de las dos entidades deportivas, Mónica Cobián Bares del ACRG (Automóvil Club Río Grande –Argentina-) y Tamara Valenzuela Ross de ADELFA (Asociación Deportiva Local Fueguina de Automovilismo –Chile-), tienen la responsabilidad de llevar adelante la 46° Edición del Gran Premio de la Hermandad.
Río Grande.- Mónica Cobián Bares, presidente del ACRG (Automóvil Club Río Grande), confió que “me crié toda mi vida con este gran premio, me críe entre las tuercas ya que mi mamá y mi papá corrían la Hermandad; durante muchos años preparamos el auto que era de ‘Condorito’ Muñoz, cuando corría por ‘El Onita’ que era la Escudería de mi papá”.
Agregó que “estoy muy contenta y muy feliz, la verdad es que es un honor poder ocupar el cargo que ocupo, participando del lanzamiento nacional de la carrera. Optamos este año por hacer un reconocimiento a toda la generación de pilotos y navegantes de fines de la década del ’70 y principios del ’80 porque todas las veces recordamos a aquellos 20 que largaron el primer año y nosotros decidimos con Tamara (Valenzuela Ross, presidente de ADELFA) que íbamos a reconocer a los que siguieron, que por lo general son los menos visibilizados a veces, pero que son los que incentivaron a otros para que sigan haciendo lo que hacen y que volcaron su amor a esta pasión que es el automovilismo”.
Mónica Cobián recordó que en esas épocas se corrían con los Fiat 600, Fiat 147, Renault 12, Renault 18, el Charade, el Toyota Starlett entre otros.
“Hoy la Hermandad dejó de ser una simple carrera, es algo que realmente une a dos pueblos y en el caso de Tierra del Fuego, el 70 por ciento de la provincia es tuerca, el que no corre en auto lo hace en moto o en karting; el fueguino tiene un primo, otro familiar o un amigo que compite, el espíritu tuerca está en las venas de la población, es algo que mueve muchísimo y que cada vez que la hermandad empieza en cualquiera de las dos ciudades (Río Grande y Porvenir) vemos como se modifica el patrón de conductas y lo que aportan económicamente a ambas ciudades. Hoy es un evento que no solo es deportivo, sino que también se declaró este año de Interés Turístico y Cultural, trasciende lo deportivo”, finalizó.
“Una carrera única en el mundo”
En tanto Tamara Valenzuela Ross comentó que “ADELFA es una institución que, junto al Automóvil Club Río Grande, está organizando esta cuadragésima sexta edición del Gran Premio de la Hermandad; es una carrera inusual, única en el mundo que se corre a frontera abierta, donde ni siquiera el conflicto del año 1978 entre ambos países, hizo que se suspenda esta importante carrera, donde dos pueblos afianzan más que nunca su hermandad entre ambos pueblos”.
Contrastó la titular de ADELFA que la Argentina “nos lleva un paso adelantado en lo que hace al reconocimiento de este Gran Premio; la verdad es que es muy difícil poder decidir a quién homenajear, pero la historia es una y no miente, y por eso nosotros, en este caso, buscamos a personas que hayan marcado hitos importantes dentro de estas 45 ediciones”.
Finalmente Tamara Valenzuela Ross observó que “no es un trabajo que lleve días, nosotros hace meses que venimos trabajando en este tema, con reuniones con organizaciones gubernamentales, con los servicios de cada país para que esto resulte de la mejor manera posible; hemos trabajado muy bien con la gente del Automóvil Club Río Grande, ya estamos prácticamente en carrera y la verdad que el trabajo es bastante y por eso estamos muy agradecidos con la gente que siempre está colaborando, porque todo esto lo hacemos por el amor, el cariño y el ADN que llevamos todos los fueguinos, tanto chilenos como argentinos, en esta carrera que más que una actividad para divertirse es algo que está arraigado entre nosotros y que afianza la relación entre muchas familias y amistades para siempre, así que estamos muy contentos y trabajando de la mejor manera posible para que todo resulte tan bien y de la mejor manera”.
