El concejal electo y ex miembro del consejo directivo de la Cooperativa de Vivienda Nuestro Techo informó sobre la carta de intención firmada con el intendente Walter Vuoto, que prevé la preadjudicación de veinte terrenos. Además se analiza la posibilidad de que se hagan cargo del tendido de las redes de servicio. Detalló dos prototipos de viviendas ya diseñadas, que se realizarán en tres etapas, con el fin de permitir la ampliación.
Río Grande.- El concejal electo por el Partido Verde Javier Branca, ex miembro del consejo directivo de la cooperativa de viviendas Nuestro Techo, informó sobre los alcances de la reunión mantenida el miércoles con el intendente Walter Vuoto, en la que se firmó la carta de intención que prevé la entrega de veinte lotes.
“Es una gestión que veníamos realizando desde septiembre de 2018. Solicitamos tierras para las familias que se iban sumando a la Cooperativa, que son vecinos de la ciudad. Se ha sumado una cantidad importante de familias y esta semana se concretó la primera etapa. El pedido de tierras era más abundante, pero lo que ofreció el intendente fue una carta de intención para 20 decretos de preadjudicación que van a salir en breve, y serán terrenos destinados para ellos”, dijo por Radio Nacional Ushuaia.
“Cada terreno será para una persona de la Cooperativa, pero la intención es hacer un complejo habitacional como el que hicimos anteriormente, con otra modalidad probablemente, con un prototipo de vivienda diferente, acorde a nuestra capacidad de producir los insumos para la construcción de las viviendas. La intención es que sean 20 casas iguales o adaptables a las familias, si son numerosas, atendiendo a sus necesidades”, indicó.
“Hace unos meses ya realizamos dos prototipos de vivienda hechos por el arquitecto que trabaja con nosotros, Marcos Sarmiento. Son dos modelos modulares, uno de 50 metros cuadrados que se puede ampliar a 100 en una segunda etapa, y a 150 metros cuadrados en una tercera. En cada una de esas etapas es habitable. Luego tenemos el modelo de 80 metros cuadrados, que se amplía a 103, y luego a 130 metros cuadrados. Son los dos prototipos que elaboró nuestro arquitecto y en cada uno de ellos la casa es habitable desde la primera etapa. La de 50 metros cuadrados es chica, pero sirve para dejar de pagar alquiler”, destacó.
Nuevos bloques y más económicos
Apuntó que “también se van a ir adecuando según los materiales que se usen. Venimos trabajando con la Universidad de Buenos Aires, ahora con el CADIC y con el INTI, en la fabricación de bloques suelo-cemento. Con esto merma la cantidad de cemento y de áridos, y se utiliza tierra de la zona. Para producir áridos se dinamita y no es muy amigable con el ambiente, pero el uso de la tierra de la zona no requiere cocción y tiene mucho menos impacto ambiental para la fabricación de estos bloques”, dijo.
“El Municipio aparentemente acompañaría todo ese recorrido hasta que se obtenga de parte del INTI la documentación necesaria para que la Secretaría de Vivienda de la Nación tenga los certificados de aptitud técnica. Es lo que requiere la Secretaría para utilizar materiales en obras que ellos financian”, explicó.
Aseguró que este material “abarata de manera impresionante la producción de los bloques, en consecuencia abarata la construcción de las viviendas, y la ciudad obtendría la matrícula en la elaboración de un producto que ya se viene haciendo en otras partes del país, pero no todavía en la provincia. Esto va a permitir generar puestos de trabajo en la producción y en la venta. Podemos proveer al barrio Gral. San Martín y otros barrios de la ciudad”.
Trabajo parado
Por otra parte, se le consultó sobre la actividad de la cooperativa y dijo que “está parada en este momento porque el día 12 de junio firmamos un convenio con el IPV para la ejecución de 29 viviendas restantes de un proyecto de 39 que firmamos hace varios años, y el IPV no dio cumplimiento. Pocos días después de las elecciones nos vino una notificación de la presidencia del IPV, diciendo que al convenio había que recortarle algunos ítems, y por lo tanto había que recortar el monto presupuestado. Nos pareció raro, porque el convenio lo había armado el IPV con sus diferentes áreas, y lo firmó el presidente con la presidenta de la Cooperativa. Después de las elecciones pidieron que recortemos, y ahí vino una pelea importante con el IPV hasta que finalmente nos dijeron que el convenio iba a quedar como estaba. Pero en medio la moneda se devaluó un 28%, o sea que el dinero que nos van a dar ahora va a ser casi un tercio menos de lo que íbamos a recibir. Además estamos a principios de octubre y el convenio del 12 de junio decía que en 10 días tenían que pagarnos, pero todavía no pasó nada”, cuestionó.
“Hay 29 familias esperando el cumplimiento del IPV, que son personas que hoy no pueden trabajar, y queremos que de una vez por todas cumpla”, reclamó.
Como concejal electo, sostuvo que “la agenda de trabajo la tenemos armada desde antes de la campaña. La pelea nuestra es por la tierra, por la urbanización de la tierra y por el techo propio, las viviendas. Esa va a ser nuestra agenda principal y luego obviamente surgirán otros temas, y tendré que prepararme para abordarlos con responsabilidad. Nosotros llegamos a la banca diciendo que íbamos a hacer esto, y no otra cosa, y seguiremos con la pelea por la vivienda como prioridad, y utilizando la banca para esa pelea por el techo propio”, adelantó del eje de gestión.
“Entendemos que la Cooperativa es una herramienta, también es una herramienta la bloquera, y creemos que la banca del Concejo Deliberante es una herramienta más para la lucha por el techo propio, añorada por muchos habitantes de la ciudad”, subrayó Branca.
Tendido de servicios
Por Radio Provincia, adelantó otro proyecto en marcha con el Municipio de Ushuaia, vinculado con la urbanización Gral. San Martín, donde está pendiente el tendido de servicios. Hubo vecinos que concurrieron a reclamar al Concejo Deliberante hace pocos días y “la intención es que nosotros podamos hacer la instalación de los servicios. Si hemos tenido experiencia en construir del suelo hacia arriba a mitad de precio, suponemos que del suelo hacia abajo podemos hacer lo mismo”, aseguró.
En principio se haría el tendido de servicios en las viviendas de la cooperativa, pero además “hay una intención del Ejecutivo municipal de que nos hagamos cargo del tendido de redes en general. Dimos el ejemplo de una obra que licitó el IPV de encauzamiento de unos hilos de agua que pasaban frente a nuestro terreno. Por un poco más de cien metros de caños, esa obra salió casi la totalidad de las 10 casas que hicimos nosotros. Cuando hablamos con los muchachos que estaban haciendo la obra, nos decían que ni de casualidad costaba un millón de pesos y el IPV la pagó más de siete millones”, expresó, confiado en que lograrán bajar notablemente los costos.
“El Municipio debe respetar la carta orgánica y tiene que entregar los terrenos con cloacas y luz. Del resto se encargarían los adjudicatarios, contratando en forma privada a una empresa o a nuestra cooperativa. Todavía no calculamos cuánto sale la obra, pero llevamos la referencia que tenemos en la actualidad de los precios de las viviendas del IPV y el contraste de precios lo podemos replicar en estas obras de infraestructura. Después, si es contratación directa o licitación, se tendrá que ver de parte del estado. En la carta de intención está previsto encarar de manera autogestiva el tendido de la redes. El IPV daría un crédito a la cooperativa, que luego contrata a quien quiera. Es lo que venimos peleando desde el año pasado con el IPV, que es la posibilidad del autocrédito para personas físicas o jurídicas, y que ellos después contraten a quien quieran para hacer la obra. Todavía está muy verde y hay que buscarle la forma jurídica a esto”, aclaró.
En caso de una contratación directa, negó incompatibilidades con su futura función: “Yo por cuestiones legales, como concejal no puedo pertenecer ni al consejo de administración de la cooperativa ni tener un cargo en el mismo. Tengo que renunciar, y de hecho ya presenté la renuncia y estoy desvinculado”, concluyó Branca.