Margarita Maldonado, integrante de la comunidad shelk´nam, recordó la matanza producida en el año 1886 con la llegada de Ramón Lista. Se pronunció a favor de “seguir trabajando para recuperar nuestra cultura e identidad”. Advirtió que “Muchas cosas fuimos recuperando, fuimos reconstruyendo y las seguimos transmitiendo; no somos los dueños de la verdad pero es nuestra historia”.
Río Grande – “Hoy cuando me desperté para ir al trabajo no estaban las banderas a media asta cómo lo habíamos pedido”, dijo Margarita Maldonado, integrante de la comunidad shelk´nam, refiriéndose al día de duelo que se conmemoró este lunes en Río Grande, a raíz de la matanza de 28 miembros de ese pueblo ocurrida un 25 de noviembre del año 1886 en la zona de San Sebastián.
Recordó que en el año 2016 se votó un proyecto en el Concejo Deliberante declarando la fecha como día de duelo en la ciudad, pero dijo que recién al mediodía se cumplió con bajar las banderas a media asta después de haber realizado algunos llamados, entre ellos a concejales y al intendente Gustavo Melella “quien me pidió disculpas y me dijo que había sido un error”, destacó Maldonado.
Aclaró, durante la emisión del programa radial “Desde las Bases”, que lo relatado “no es una queja, sino una crítica constructiva para que el próximo año se empiece a trabajar a conciencia con esta fecha. Nosotros estamos para educar sobre estos temas y sabemos que no es fácil aprender cosas nuevas y trabajar para conmemorar un día de duelo, por algo tan triste para nosotros”, remarcó.
Dijo que se trata de “una de las primeras matanzas, porque fueron muchas”. Recordó que “no solo los mataron como sucedió en 1886, con la llegada de Ramón Lista, de Polidoro Segers y monseñor Fagnano. También quiero recordar que en ese barco llegó mi abuelo, papá de mi mamá, Antonio Vera Mayorga que tenía 13 años y vino de Osorno cómo un niño salesiano”, destacó Margarita Maldonado. Para referirse luego a las vejaciones, violaciones, torturas, asesinatos e ignominia que sufrieron los pueblos aborígenes.
Nuevamente se refirió a la conmemoración mencionando que se trata de realizarla “trabajando, como en el día a día. Hace más de 30 años que sigo una huella, sin parar un día, porque siempre estoy trabajando por la cultura y la identidad de mi pueblo ya que lo derechos se ejercen, no se mendigan”, aseveró.
Advirtió que “se habla mucho de extinción, de que somos un pueblo extinto” y rechazó ese concepto. Mencionando también que no se hace el debido hincapié sobre el genocidio que sufrieron. Margarita Maldonado recordó luego a sus antepasados, rescatando algunos nombres y mencionando la importancia de recuperar esas tradiciones y su cultura.
“Muchas cosas fuimos recuperando, fuimos reconstruyendo y las seguimos transmitiendo; no somos los dueños de la verdad pero es nuestra historia. Sabemos que estamos invisibilizados, porque tenemos gente y docentes que nos están acompañando; pero también hay otros a los que les molesta que queramos ocupar nuestros espacios y apuestan al etnocidio. Sin embargo acá estamos”, aseveró finalmente Margarita Maldonado.