El peronismo unido, que será oficialismo a partir del 10 de diciembre, se ubicó del lado derecho del recinto, mientras que Juntos por el Cambio se mudó hacia las bancas de la izquierda. Sergio Massa y Máximo Kirchner, las figuras de la jornada.
Buenos Aires.- Con palcos explotados por familiares, amigos y militantes, se realizó este miércoles la jura de los diputados electos en octubre, en lo que representó la previa de la vuelta al poder del peronismo unido. Ahora, con el Frente de Todos a la derecha y Juntos por el Cambio en las bancas de la izquierda, se vio la nueva radiografía del recinto.
Algarabía kirchnerista, aplausos efusivos y cánticos marcaron la ceremonia que comenzó una hora retrasada, a la espera de que las nuevas figuras de la Cámara baja ingresen al recinto.
Poco antes de las 13, Sergio Massa, Máximo Kirchner y compañía se llevaron todas las miradas y fueron los más buscados por los fotógrafos. El nuevo presidente de la Cámara, que sería consagrado minutos más tarde, recibió fuertes abrazos por parte de Agustín Rossi, José Luis Gioja y Daniel Filmus.
La sesión preparatoria arrancó una vez que el radical Gonzalo del Cerro, en su condición de ser el diputado con mayor edad, se subió al estrado. Desde allí agradeció “infinitamente” por la “responsabilidad” que le había sido asignada y al “pueblo de la Nación Argentina”.
Reflexionó que en “circunstancias difíciles, donde han tomado tal vez nombres desagradables algunas diferencias que tenemos, como estas palabras de grieta, creo que todos debemos en el ejercicio de la política tratar de resolverlas y congeniar de nuevo una unidad que fue la que nos dio origen”.
La jura contó con la presencia de varios invitados, entre ellos el gobernador electo de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof -diputado nacional hasta el 10 de diciembre-; la vicegobernadora bonaerense electa, Verónica Magario; y el vicegobernador bonaerense saliente, Daniel Salvador.
También concurrió un nutrido grupo de gobernadores, entre los que estuvieron Alicia Kirchner (Santa Cruz), Gerardo Morales (Jujuy), Mariano Arcioni (Chubut), Sergio Ziliotto (La Pampa), Arabela Carreras (Río Negro) y Ricardo Quintela (La Rioja), éstos tres últimos próximos a asumir.
Además participaron los senadores Anabel Fernández Sagasti, Norma Durango, Inés Blas, Lucila Crexell, Laura Rodríguez Machado, Claudio Poggi y Oscar Parrilli.
Exultantes. Diputados de todas las fuerzas políticas posaron para cuanta foto podían. Desde los palcos, los pedidos para los del Frente de Todos fueron varios. Sonrientes, miraban a las cámaras y no olvidaban el gesto de la “V” de la victoria.
Fucsia presente. Resaltaron dentro del recinto con un vivo color fucsia las bonaerenses Silvia Lospennato, con su vestido de encaje; María Luján Rey, con una blusa; y la fueguina Rosana Bertone, con un blazer del mismo tono.
Varios diputados juraron acompañados por sus hijos o sobrinos. Uno de esos casos fue el de la radical Karina Banfi, quien desde temprano estuvo presentando a sus niños -a los que adoptó el año pasado- a sus compañeros de bancada. Muy simpáticas, Silvia Lospennato, Carmen Polledo, Marcela Campagnoli, Mariana Zuvic, y también después Mario Negri, se entretuvieron dialogando con los pequeños.
¿De ministro a ministro? Conversando amenamente se los vio a los formoseños Luís Basterra y Ricardo Buryaile. El primero suena como próximo ministro de Agricultura de Alberto Fernández, un cargo que el segundo ocupó durante los primeros dos años de la presidencia de Mauricio Macri.
Les tocó a Sergio Massa y Graciela Camaño, su exmano derecha, jurar juntos en la sesión. Se saludaron con un beso a secas, aunque el final fue un poco más “afectivo”: él la abrazó y ella le tiró una palmaditas en la espalda.
“En este y cada día, sí juro”, expresó Máximo Kirchner cuando le tocó prestar juramento, citando así parte de la letra de la canción “Ya nadie va a escuchar tu remera” de Los Redondos.
Andrés “Cuervo” Larroque ofició en la sesión preparatoria como cebador de mates. En la ronda se sumaron Sergio Massa, Cristina Alvarez Rodríguez, Fernanda Vallejos, entre otros. Bebida infaltable.
Lucieron con el pañuelo verde a favor del aborto legal la cordobesa Gabriela Estévez y la salteña Verónica Caliva, ambas del Frente de Todos. Por su parte, Dina Rezinovsky del Pro desplegó su pañuelo celeste en la banca.
Antes de proponer a Sergio Massa como presidente de la Cámara de Diputados, Máximo Kirchner se permitió una concesión. “Antes de comenzar me quiero tomar una licencia muy muy personal, le quiero mandar un saludo a mi hijo que está en Río Gallegos, que hoy no pude estar, que hoy terminaba el jardín, así que un beso para Néstor Iván. Son cuestiones que yo las aprendí muy de pequeño que pasan”, dijo.
“Juro por…”. Como es costumbre, varios legisladores juraron por diversos nombres y causas. Hubo menciones a “los 30 mil desaparecidos”, a “Perón y Evita”, a “Néstor y Cristina”, a “los trabajadores”, y hasta a “Manuel Belgrano, Martín Miguel de Güemes y Juana Azurduy”.
Con una remera de la fórmula Fernández-Fernández, el misionero Héctor “Cacho” Bárbaro fue el único que juró “por Alberto y Cristina”.
“Por la Constitución, por la república, por la independencia del Poder Judicial, y por mis dos maestros políticos Alfredo Bravo y la humanista Elisa Carrió”, lanzó la cívica Mónica Frade y bajaron abucheos desde los palcos, e incluso se escuchó un “que venga a trabajar”.
A su turno, María Luján Rey, madre de Lucas Menghini Rey, fallecido en la tragedia de Once, lo hizo “por cada víctima de la corrupción e impunidad”.
“Por Lucía Pérez, por las víctimas de los femicidios, por las víctimas de la clandestinidad, sí juro. Será ley”, expresó Victoria Donda acompañada por su hija Trilce, junto a quien sostenía una foto de Lucía Pérez, la joven asesinada en 2016 en Mar del Plata.
El porteño Emiliano Yacobitti juró “por la educación libre y gratuita siempre”; mientras que el rionegrino Martín Soria lo hizo por “el pueblo de Río Negro y la memoria de mi viejo el gringo Soria” en referencia a Carlos Soria.