Vecina asegura que sufre por funcionamiento de horno pirolítico

Una vecina de Río Grande asegura que detrás de su vivienda funciona un horno pirolítico no habilitado. Dice que está sufriendo los efectos del mismo y que su casa está cubierta de cenizas y olores nauseabundos. Pidió respuesta a las autoridades, pero la situación no varió. La mujer dijo estar siendo “atacada y envenenada en mi propia casa, se supone que la casa de uno debe ser el lugar más seguro, pero la mía es una trampa mortal”, aseveró.

Río Grande – Graciela Gosgaya, una vecina de Río Grande que se domicilia en la calle Base Marambio al 2600 de esta ciudad, aseguró estar sufriendo los efectos de un “horno pirolítico” que no estaría habilitado. En declaraciones a Radio Provincia, la mujer dijo estar siendo “atacada y envenenada en mi propia casa, se supone que la casa de uno debe ser el lugar más seguro, pero la mía es una trampa mortal”, aseveró.

Dijo que de una casa vecina emanen “olores a cables quemados, metales fundidos, las paredes están tapadas por una cenizas grasosas y pegajosas; que no salen con los elementos de limpieza”, aseguró. Además manifestó estar atravesando problemas emocionales, porque “no puedo estar dentro de mi casa, la que construí con mucho esfuerzo y durante años para poder vivir tranquila”.

La vecina señaló que los olores y la ceniza provienen “de una casa colindante, con la cual comparto una medianera, que está sobre la calle Cabro Primero Gómez. Me han dicho expertos que ahí funciona un horno pirolítico, pero yo he agotado las instancias de queja en los lugares indicados con cartas y notas, pero sin tener respuesta”, remarcó.

Gosgaya dijo que siente que se está cometiendo “abandono de persona” y pide ser escuchada “no solo por mí, sino por todos mis vecinos que no están reaccionando”. Pidió que se controle “el grado de contaminación que tiene la vivienda” y aseguró que: “si ingresan en mi casa apesta a goma quemada y está llena de ceniza pegagosa”.

Relató que recurrió a diferentes autoridades solicitando una respuesta, pero hasta el momento el problema subsiste. “Vivo casi en situación de calle, desesperada, porque tengo que irme por las emanaciones”, aseveró.

Para concluir manifestó que se encuentra “muy mal y con problemas de salud, siempre fui una persona sana salvo por una alergia por vías respiratorias, que con esto se me agravó”, mencionó finalmente la mujer.

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