Implicará para el Estado un ahorro superior a los 300 millones de dólares. Se estima además que el costo de la energía eléctrica caerá de 69 dólares por MWH a unos 60 dólares.
Buenos Aires.- El Gobierno tiene decidido recortar y pesificar los pagos por la generación de electricidad, en una medida que implicará para el Estado un ahorro superior a los 300 millones de dólares y que tendrá fuerte impacto sobre los ingresos de las empresas del sector.
El ministerio de Desarrollo Productivo, a cargo de Matías Kulfas, emitirá esta semana una resolución que pesificará la generación de energía eléctrica con efectos retroactivos al primer día de febrero.
Cuándo y cuánto van a subir las tarifas es la pregunta que no se responde.
La medida sería publicada el miércoles o el jueves en el Boletín Oficial y significaría una reducción importante de los ingresos que perciben las empresas generadoras de energía eléctrica del país.
La decisión generará un ahorro fiscal cercano a los 300 de dólares millones anuales en los ingresos de las empresas, que se explica por una baja en las transacciones de 1.344 millones a 1.026 millones de dólares, según estimaron fuentes oficiales.
Se estima además que el costo de la energía eléctrica caerá de 69 dólares por MWH a unos 60 dólares.
En lo respectivo a las tarifas, la producción de energía es el 50% del valor, sin embargo, al estar congeladas hasta julio, la medida no tendrá un impacto directo.
Actualmente, el 50% del costo de generación de energía eléctrica está subsidiado por el Gobierno.
Los valores en pesos se ajustarán regularmente de acuerdo a un valor que contemplará el índice de inflación mayorista (IPIM) y el minorista (IPC).
Adicionalmente se dispondrá la pesificación de las remuneraciones por generación de energía de las centrales hidroeléctricas binacionales, pero sin reducir la remuneración.
De esta manera, el Gobierno dio un primer paso en la desdolarización de las tarifas de energía eléctrica, en el marco de un intento del Poder Ejecutivo para desindexar la economía.
Durante el gobierno de Mauricio Macri, la decisión del ministro de Energía de entonces, Juan José Aranguren, de dolarizar las tarifas, fue ampliamente criticada por todo el arco opositor.
En ese sentido, el Gobierno actual argumenta que varias empresas del sector tuvieron grandes ingresos durante los últimos cuatro años.