El delegado de APA en Río Grande, Luís Márquez, aseguró que cuentan con el respaldo de la asociación sindical a nivel nacional y, ante el temor de un contagio similar al que se dio en Ushuaia, no atenderán ningún vuelo. “No están dadas las condiciones para que opere el aeropuerto de Río Grande, porque estamos expuestos”, sostuvo el dirigente, y destacó “el ciento por ciento de acatamiento” del personal. También celebró el “apoyo total y contundente” de los riograndenses. A nivel nacional los gremios aeronáuticos seguirían la misma línea.
Río Grande.- La conectividad aérea de Tierra del Fuego, que por su condición insular es aerodependiente, se ve comprometida seriamente ante la negativa del gremio que nuclea a los trabajadores del aeropuerto a atender los vuelos de Aerolíneas Argentinas.
Luego del cierre de operaciones del aeropuerto de Ushuaia a raíz del contagio de trabajadores de APA, hubo un fuerte rechazo al pedido del gobernador para que los vuelos salieran desde Río Grande, y finalmente fueron suspendidos el miércoles, por lo cual la provincia se encuentra literalmente aislada. Paralelamente, desde el Municipio se pide el cierre de la comunicación terrestre de la ciudad.
Por FM Master’s, el delegado de APA en Río Grande, Luis Márquez, expresó la “preocupación ante esta pandemia que está viviendo todo el mundo y nos está afectando, por lo que ha pasado desgraciadamente en la base de Ushuaia con nuestros compañeros. Hoy tenemos compañeros que se han contagiado, no se sabe el número pero son varios los que están en cuarentena y hay mucha preocupación. Estoy en contacto permanente con sus seres queridos, y estuvimos trabajando a full con nuestra asociación en Buenos Aires y con la empresa, dando nuestro punto de vista sobre la posibilidad de que pusieran vuelos especiales”, dijo.
Cuando estalló el conflicto en Río Grande en la noche del miércoles, con caravanas de autos y cacerolazos en contra del desvío de los vuelos programados “para sacar pasajeros de Ushuaia, teníamos versiones desde temprano”, aseguró el dirigente.
“Nosotros vimos que no estaban dadas las condiciones para que se opere en el aeropuerto de Río Grande, porque estamos expuestos. Nos pusimos a trabajar y tuvimos el apoyo total de nuestra asociación a nivel nacional, así se lo hicimos saber a la empresa, que lo entendió. No hay garantías para nosotros y lamento muchísimo esta situación. Yo tengo un gran respeto por el gobernador Melella pero se equivocó al tomar una decisión tan importante de sacar pasajeros de Ushuaia por Río Grande. Creo que la gente que lo asesora no lo hizo bien. El virus está en la provincia y en este caso en Ushuaia y, si hasta ahora no tenemos enfermos en Río Grande no tenemos por qué exponernos a eso”, sentenció.
“Es un riesgo muy importante para toda la comunidad de Río Grande y el resultado ha sido un no contundente. Con los compañeros de Río Grande hicimos un trabajo tranquilo pero consciente de los riesgos que corríamos y hubo un ciento por ciento de acatamiento de nuestros compañeros. También la sociedad de Río Grande nos dio un apoyo total y contundente, y nos lo hicieron saber a través de todos los medios en la tarde y la noche”, destacó.
“Vamos a estar atentos a ver cómo sigue todo esto pero no estamos en condiciones de atender estos vuelos especiales de gente de Ushuaia. Desgraciadamente el virus ha entrado por crucero y por avión, ya se ha expandido por todo el mundo y las autoridades provinciales debieron tener en cuenta eso después de lo que pasó en Ushuaia. Tampoco es momento para tirar nafta al fuego y tenemos que tratar de estar tranquilos y poner lo mejor de cada uno, pero la decisión está tomada y nosotros no vamos a atender ningún vuelo, ya sean vuelos especiales de Ushuaia o vuelos que vengan a Río Grande. En estas condiciones no vamos a atenderlos, porque estamos expuestos a que nos podamos contagiar. Así se lo hicimos saber a la empresa”, remarcó.
Prevención tardía
Para Márquez, en el aeropuerto de Ushuaia no se tomaron a tiempo las medidas de prevención que correspondían para evitar el contagio. Consultado sobre la necesidad de que lleguen insumos, medicamentos, además de fueguinos que están varados en Buenos Aires, y qué va a ocurrir con las otras empresas que operan en los aeropuertos fueguinos, dijo que “hasta el 5 de abril está en cuarentena todo el personal que trabaja en el aeropuerto de Ushuaia. Mis compañeros están todos en cuarentena y hay mucha preocupación. También está preocupada la empresa por lo que ha pasado en Ushuaia. No sabría decir si está cerrado para todas las empresas que operan en el aeropuerto de Ushuaia, pero creo que es así”, barajó.
“En Río Grande el aeropuerto está abierto para algún vuelo sanitario o alguna operación de emergencia. Sabemos que nuestro aeropuerto está abierto por la noche, pero por estos días está habilitado de 14 a 17 horas, pero no tenemos vuelos ni fecha de cuándo va a haber. Por como está la situación, no vamos a atender los vuelos de Aerolíneas y Austral porque no están dadas las condiciones, más aun con todo lo que pasó en Ushuaia. Creo que se les fue de las manos y en esto todos los sectores están involucrados. Tenemos gente contagiada de distintos sectores, y habrá que ver cómo sigue esto. Tenemos que encontrar lo mejor para la salud de todos”, planteó.
“Sin ninguna duda se tomaron tarde las medidas en los aeropuertos. Desde APA veníamos siguiendo paso a paso lo que venía ocurriendo en Ushuaia, me llamó mucha gente conocida y la información que me llegaba era de mucha preocupación. Obviamente no me correspondía a mí intervenir porque soy representante de la asociación en la base de Río Grande. Sin ninguna duda a las autoridades del aeropuerto de Ushuaia, al gobierno de la provincia y a las empresas se les fue de las manos y el resultado está a la vista. Tenemos mucha gente contagiada y nosotros nos vamos a oponer a brindar el servicio en Río Grande. Si llegan a mandar algunos vuelos de Ushuaia a Río Grande nos vamos a oponer y ya se lo hicimos saber a la empresa”, reiteró.
Gremios aeronáuticos en sintonía
Respecto de la postura del resto de los gremios aeronáuticos, estarían tomando la misma determinación en todo el país. “Estoy en contacto con los compañeros de todas las bases del país. Esta semana hubo un vuelo para terminar de sacar pasajeros de Salta a Buenos Aires y quedan muy pocos vuelos para traer pasajeros a las provincias. Estamos en comunicación todos los cuerpos de delegados y se supone que el movimiento va a ser nulo, porque así lo ha decidido nuestra asociación, para cuidar al personal nuestro, que está muy expuesto”, señaló.
“Hace muchos años venimos trabajando unidos todos los gremios, y más en esta situación que estamos viviendo. Tenemos compañeras contagiadas entre los aeronavegantes también y sé que los gremios están trabajando unidos con el gobierno nacional, aerolíneas, el ministerio de salud y el ministerio de transporte. Además estamos muy preocupados con lo que quiere hacer LATAM de bajar los salarios a la mitad. Quieren aprovecharse de la situación que vive el país y se la quieren tomar con los trabajadores. Sin ninguna duda nos vamos oponer desde los gremios aeronáuticos. Son 4.500 compañeros y estamos trabajando codo a codo para no permitir que se rebajen los salarios”, concluyó.