El intendente Martín Pérez pidió al gobierno fueguino y a la cartera laboral toda la severidad posible ante la decisión inconsulta de las electrónicas de pagar el 70% de los salarios. “Necesitamos que las empresas se pongan los pantalones largos, nos acompañen y hagan un esfuerzo para brindar ayuda del punto de vista sanitario a nuestros centros de salud, al hospital, y que obviamente sostengan a sus trabajadores”, reclamó. Recordó que han sido las más beneficiadas por la promoción fueguina, que tanto costó defender en los cuatro años del macrismo, y han tenido “al Estado a su servicio”. Para el intendente no hay justificativo para una reducción, cuando hay pymes que hacen esfuerzos enormes para cumplir con sus obligaciones con el personal.
Río Grande.- El intendente Martín Pérez tomó postura ante la decisión de las empresas nucleadas en AFARTE de reducir unilateralmente los salarios, pagando ayer el 70% con la expectativa de lograr un acuerdo con el sindicato metalúrgico.
Por Radio Fueguina, planteó que ante estas situaciones “hay que tener templanza, porque son tiempos difíciles y la gente la está pasando muy mal. Lo que más nos desvela es que muchos vecinos de la ciudad, además de estar en riesgo por su salud, también la están pasando muy mal del punto de vista económico y eso nos duele a todos. Desde el municipio estamos tratando de hacer el mayor de los esfuerzos para cuidar a nuestros vecinos y dar respuesta a sus necesidades, en la medida de nuestras posibilidades. Nuestros funcionarios están dando todo de sí y haciendo el mayor esfuerzo posible, desde todo punto de vista, ya sea administrativo, político y económico, porque hemos tomado la decisión de que nuestros funcionarios hagan un aporte de su sueldo para crear un fondo de emergencia sanitaria, para pagar un adicional a casi cien agentes sanitarios de nuestra ciudad, que están trabajando desde el primer día de esta pandemia”, dijo.
“Esto viene para largo y se lo digo a los vecinos permanentemente. No es que el 13 de abril se terminó y volvemos a la vida normal. Nuestra vida cambió, nuestros adultos mayores no van a poder salir de su casa y no sabemos por cuánto tiempo, las clases no van a continuar y algunos hablan de que se puede estar todo el año sin clases; vamos a tener que educar a nuestros hijos en nuestras casas y ser muy cuidadosos del punto de vista administrativo, cuidar muy bien a nuestros trabajadores municipales y provinciales. Estamos luchando contra algo que no vemos y es muy dañino, y esto va a ser hasta tanto se pueda conseguir una vacuna en el mundo”, advirtió.
“Necesitamos dar el ejemplo como sociedad en Río Grande y podemos ser ejemplo de una sociedad que ha podido contener la enfermedad, que se maneja con responsabilidad, entender que tenemos que cambiar nuestro ritmo de vida y hasta eso puede ser saludable. Vamos a tener que trabajar mucho en eso, con mucha concientización y es el desafío que vamos a tener por delante”, manifestó.
La reducción de AFARTE
También opinó sobre las declaraciones de Federico Hellemeyer y subrayó que la situación “pasa por una cuestión de responsabilidad. Las empresas electrónicas han ganado mucho estos años y han tenido al Estado a su servicio para tener ganancias extraordinarias con respecto a otras empresas del país. Les pedimos que hagan un esfuerzo, que sean responsables, que acompañen a Río Grande y se pongan la camiseta de la ciudad”, enfatizó.
“Yo espero que el Ministerio de Trabajo de la provincia actúe con la mayor severidad posible, porque no tiene ninguna explicación que descuenten salarios. Hoy tienen que hacer un esfuerzo las electrónicas, porque ese esfuerzo también lo estamos haciendo desde el municipio. La recaudación municipal cayó más del 50% en quince días. A mí no me interesa si el dueño de una fábrica es Caputo o Cherñajovsky, que es una persona que realmente ha invertido mucho en la provincia, pero también nuestra provincia le dio mucho a estas fábricas y nuestra ciudad le ha dado mucho, le ha dado el esfuerzo de los trabajadores, del Estado, y justamente es el momento de que todos actuemos con responsabilidad”, sentenció.
“Con ese criterio nosotros, porque se nos cayó casi el 60% la recaudación en veinte días, tendríamos que estar recortando salarios a nuestros trabajadores, y tendríamos que estar recortando los servicios de recolección de residuos, pagarle menos a la empresa de transporte, o cerrar el grifo para que la gente tenga un 20% menos de agua. En definitiva el Estado somos todos y creo que el gobierno va a actuar en consecuencia en este caso. Realmente espero que el gobierno provincial y el Ministerio de Trabajo de la provincia actúen con la mayor severidad posible”, reiteró.
Aseguró que tiene diálogo con este sector y en realidad “tenemos diálogo con todos. En nuestra labor en el Congreso hemos defendido mucho la promoción industrial, por eso puedo hablar con autoridad política y moral del tema. Cuando fui diputado nacional, junto a mis compañeros de bancada hemos sido grandes defensores de la promoción industrial y los primeros beneficiados son los empresarios. Yo no estoy en contra de que los empresarios ganen, me parece bárbaro, y de hecho si pueden ganar más que en otro lugar del país también me parece bien, pero todos tenemos que entender que se ha hecho un esfuerzo muy grande desde el Estado y que hemos dado una batalla muy grande estos últimos cuatro años para que Macri no terminara de desmantelar la promoción industrial. No hay que olvidarse de eso, porque todos tuvimos que dar una batalla muy grande para que las fábricas no cierren y hubo empresas acá que tomaron la decisión de congelar salarios por dos años”, cuestionó.
“Es un momento en que todos tenemos que hacer un esfuerzo, actuar con responsabilidad, y las empresas radicadas en Río Grande tienen que ponerse la camiseta de Río Grande, porque la ciudad se va a tener que poner de pie después de esta situación y vamos a necesitar del esfuerzo de todos”, sostuvo.
“Si empresas de esta envergadura de un día para otro descuentan salarios, qué le podemos pedir después a las demás empresas, a una pyme que tiene 10 ó 15 trabajadores y está haciendo un esfuerzo descomunal para poder sostenerse –se preguntó-. No es ir en contra de nadie sino cuidar lo propio, y es cuidar la promoción por la que peleamos tanto estos últimos cuatro años. Por suerte hubo un cambio de gobierno y eso nos permite tener otro aire, pero este es un momento difícil en la historia de Río Grande y necesitamos que las empresas se pongan los pantalones largos, nos acompañen y hagan un esfuerzo para brindar ayuda del punto de vista sanitario a nuestros centros de salud, al hospital, y que obviamente sostengan a sus trabajadores, no como hizo Mirgor que los despidió intempestivamente”, concluyó Pérez.