La Dra. Adriana Basombrío, epidemióloga del Municipio de Ushuaia, destacó la importancia del uso obligatorio de mascarillas caseras porque está comprobado que disminuye la transmisión del virus. Será obligatorio en Ushuaia a partir del 14 de abril y estos días se están destinando a la adaptación de la comunidad. Además, habrá cambios en los testeos, porque se ha demostrado que el ciclo no termina el día 14 y antes del alta habría una nueva toma de muestra al día 20 de contraída la enfermedad.
Río Grande.- La Dra. Adriana Basombrío, epidemióloga del municipio de Ushuaia, fue consultada por Radio Provincia sobre la decisión del intendente Walter Vuoto de disponer el uso obligatorio de barbijos o mascarillas caseras. “Vamos conociendo cada vez más al COVID-19 en base a la lectura de mucha documentación de otros países, y por eso se van tomando distintas decisiones y se hacen recomendaciones a las personas, porque se sabe más a medida que se investiga”, sostuvo.
“El decreto del intendente Vuoto se va a hacer efectivo el día 14 de abril, y hasta el 13 se va a hacer la recomendación del uso de las mascarillas. A pesar de que hay una gran discusión entre algunos grupos, ya algunas instituciones como el centro de control de enfermedades de Estados Unidos y algunas opiniones de la Organización Mundial de la Salud, se han manifestado a favor de esta medida y la Sociedad Argentina de Infectología también está encarando este tema”, afirmó.
“Sabemos que la mascarilla de protección comunitaria de fabricación casera disminuye la propagación del virus, sobre todo de las partículas más grandes, y frena la transmisión del virus. Aunque no funcionan de una manera ciento por ciento efectiva, sí disminuyen la transmisión. Esto disminuye el número de nuevas infecciones y limita el contacto mano-cara. En función de que en la provincia estamos en una etapa de mitigación de la pandemia, esta es una medida dirigida a mitigar el impacto del virus en la comunidad”, explicó.
“Esta medida está recomendada a las personas que tengan que ir a comprar comida, los que van a la farmacia, en el momento en que salen de la casa. Se recomienda el uso de la mascarilla, no del barbijo, para que la gente no vaya a comprar el material que necesita tanto el equipo de salud. El 14 de abril comienza a ser obligatorio y en estos días es recomendable, así nos vamos adaptando a esta nueva situación”, señaló.
Se planteó el problema del municipio al no tener poder de policía para obligar a los vecinos a usar las mascarillas. “Es un tema controvertido y por eso apelamos a todo el material científico disponible, porque varias provincias del país están tomando la misma decisión, como Tucumán, Catamarca, La Rioja, Jujuy, Misiones, Santiago del Estero, tenemos entendido que lo va a hacer Salta también, y algunos municipios. Todo el gabinete está trabajando para ver los distintos aspectos de esta medida”, dijo.
“Esta propuesta de uso de máscaras caseras se acompaña por supuesto del lavado de manos y de todo lo que venimos diciendo hasta ahora para limitar el contacto personal, que nos cuesta muchísimo, porque uno hasta hace el ademán de saludar. Es difícil adaptarse a las situaciones nuevas”, señaló.
Por otra parte se le preguntó sobre el puesto sanitario en las 640 viviendas. “Este tema está en manos del grupo del Dr. Corradi. El centro de salud número 6 que está en las 640 viviendas no está trabajando porque hubo una persona afectada por el virus. La provincia propuso instalar una unidad sanitaria móvil, en convenio con ambulancias en caso de emergencia, para llegar con rapidez a un centro asistencial”, indicó.
Preparados para lo peor
Respecto de la capacidad del sistema de salud para dar respuesta cuando llegue el pico de contagio, dijo que “estamos tratando de estar preparados para complicaciones y es difícil predecir el futuro. Hemos hecho estimaciones en base a datos mundiales, adaptándolos a los datos locales, donde tenemos menos cantidad de mayores de 65 años y personas con enfermedades preexistentes. Esto hace que hagamos los cálculos en función de las variables. Estamos por debajo de lo que habíamos calculado, pero esto no quiere decir que vayamos a bajar los brazos porque no hemos llegado al pico de la epidemia. Se ha hecho un cálculo para la primera semana de mayo y el municipio está articulando con el sector público y el privado. Los números son altos, también en función de que somos una provincia que tiene acceso a hacer los análisis, porque antes dependíamos absolutamente del instituto Malbrán, que se fue saturando”, observó.
“Se han comprado reactivos para hacer la mayor cantidad de testeos posible, que ayuda en esta fase de mitigación, porque tenemos mayor conocimiento de cuántas personas están infectadas. Se supone que el 15% va a padecer una enfermedad moderada, y alrededor del 5% será grave o crítica. Pareciera que Tierra del Fuego tiene muchísima cantidad de casos en relación con otras provincias del país, pero está relacionado con la posibilidad de tener el resultado en poco tiempo. Esos números hay que mirarlos a la luz de estas variables. Estábamos realizando unos 45 tests por día, junto con la provincia, y se pueden hacer hasta 70 determinaciones por día”, aseguró.
“Yo testearía la mayor cantidad de gente posible porque es importante saber qué cantidad de personas están en contacto con el virus en esta fase de la pandemia. Si esto se incrementa o va llegando a picos, quizás más adelante no sea necesario, pero en este momento hay que tener la mayor cantidad de gente hisopada posible. El método que se está usando en el hospital es excelente, porque hay mucha gente que le tiene miedo a falsos negativos. No se están dando errores en la toma de muestras”, garantizó.
Por otra parte, adelantó cambios en el plazo para dar el alta a un paciente. “El Ministerio de Salud de la Nación aconseja hacer dos análisis más antes de dar el alta a una persona y estamos sabiendo que correspondería hacerlo no en el día 14 de aislamiento sino esperar unos días más, porque de hecho se ha detectado el virus en el día 15. El comité provincial está evaluando hacerlo a partir del día 20”, informó.
“Una vez que la persona está dada de alta, ya adquiere inmunidad y no se vuelve a contagiar. Hoy somos todos susceptibles, porque no tenemos anticuerpos para el virus”, concluyó la especialista.