La cuarentena se extendería siete días más a partir del lunes, cuando venza el plazo fijado por el presidente Alberto Fernández. Se permitirían mayor cantidad de actividades en aquellas regiones en las que no exista circulación del virus.
Buenos Aires.- Si bien en algún sentido el Gobierno relaja las etapas, todavía no se espera un levantamiento total de la cuarentena, que será por provincias, de manera periódica y siguiendo determinados protocolos sanitarios.
Allí surgen las preguntas respecto de cómo seguirá y si se contemplarán las particularidades de cada lugar del país.
Según un informe de la consultora Abeceb, Entre Ríos, Jujuy, Catamarca, Formosa y La Pampa son las provincias que están en mejores condiciones para comenzar con un proceso de flexibilización gradual de la cuarentena.
Para llegar a esa conclusión, el análisis de la consultora toma en cuenta cuatro factores claves: el avance del virus, la estructura sectorial, el riesgo de ingresos de la población y su situación fiscal. De acuerdo al informe, esas cinco jurisdicciones tienen «mayor capacidad de respuesta a la crisis» porque se encuentran menos afectadas por la enfermedad, pero también por las características de su estructura productiva (incidencia de la administración pública), económica y política.
El informe considera que la salida de la cuarentena sería más rápida en aquellas regiones en las que no exista circulación del virus -es decir, que haya un bajo número de casos registrados- y especialmente en pequeñas localidades que puedan mantenerse aisladas de manera conjunta, desarrollando de manera normal sus actividades.
Por otro lado, asegura que la cuarentena impacta con menor intensidad en las zonas que desarrollan «más actividades esenciales» o en aquellas que pudieron mantener su ritmo de producción, especialmente provincias con predominancia de producción agropecuaria o mayor peso del sector público.
Para los sectores que tienen su actividad restringida, considera que la recuperación podrá ser más rápida si están dadas las condiciones para reanudar la actividad sin mayores riesgos y existe una demanda que justifique la reapertura. También podrá avanzarse de manera gradual en las actividades que presentan «poca intensidad de empleo, no implican afluencia de gente o se desarrollan en regiones aisladas y poseen una elevada formalidad».
Por otro lado, la consultora consideró que desde el punto de vista económico y en el corto plazo, las provincias que fiscalmente dependen de recursos de la Nación «tienen menos incentivos a liberar actividades a nivel local, dado que eso no implicará grandes cambios en su recaudación».
En cambio, las que dependen de recursos propios pueden alterar la evolución de sus ingresos totales permitiendo una mayor actividad. «En general, estas provincias suelen ser las de mayor población y mejor poder adquisitivo del país. A su vez, si estas provincias se encuentran endeudadas o con un déficit más elevado, la presión será mayor», sostiene el informe.
Desde el punto de vista político, el análisis contempla que «lo más probable» es que las provincias alineadas al oficialismo coincidan con la estrategia del Ejecutivo Nacional, por lo que demorarían en tomar medidas que apunten a liberar actividades económicas.
Además, el Gobierno pretende dejar en claro que las actividades recreativas estarán limitadas, como la asistencia masiva a lugares públicos, que puedan ser foco de contagio, y las reuniones en espacios cerrados (clubes, locales bailables, eventos privados), que se prevé seguirán prohibidas hasta que el virus no dé muestras claras de extinguirse en la comunidad.
Además, se promoverá el uso masivo y continuo de los tapabocas o barbijos no solo a lugares cerrados, como comercios y oficinas laborales, sino también a otros.
El transporte mantendrá el actual protocolo para que viaje solamente gente sentada. Buscarán asegurar más servicios, para permitir que no se generen los aglomeramientos
El inicio de las clases también se demorará, probablemente más tiempo que la reanudación de las actividades laborales.