A lo largo y ancho de Tierra del Fuego, se observan diferentes puestos de control, en la mayoría de los casos, liderados por personal de la Policía de la Provincia de Tierra del Fuego. Desde el pasado 16 de marzo, día en que se decretó el aislamiento preventivo, social y obligatorio, son más de 1700 uniformados -mujeres y hombres-, incluidos los cadetes de la Escuela Superior de Policía, quienes permanecen en las calles, entre 12 y 14 horas, para el beneficio y cuidado de los ciudadanos.
Río Grande.- El pasado 16 de marzo el Gobierno de la Provincia de Tierra del Fuego, decretó el aislamiento preventivo, social y obligatorio debido a la pandemia COVID-19. A partir de ese momento, hubo una serie de personas que fueron exceptuadas de permanecer en sus hogares manteniendo el confinamiento, a fin de establecer la normativa que se dispuso desde ese momento en adelante.
En esta primera línea de trabajo, y casi detrás de los trabajadores de salud, se encuentra el personal de la Policía de la Provincia.
El comisario Darío Rodríguez, a cargo del área de dicha institución dijo a este medio que, son más de 1700 efectivos, incluidos los cadetes de la Escuela Superior de Policía. Actualmente, cada uniformado está trabajando alrededor de 12 a 14 horas y cuando se superan las 8 horas de trabajo, se pagan los recargos”, que son horas extras.
A la hora de salir a las calles, cada efectivo utiliza “mascarillas o tapabocas, guantes de nitrilo y tanto móviles como las dependencias, hay órdenes de realizar limpieza y desinfección cada 2 horas”. Acerca de los elementos de protección, Rodríguez indicó que “gran parte es aportado por el Gobierno, pero igualmente, empresas privadas y vecinas y vecinos, hacen aportes, que son agradecidos por la Institución”.
El mayor problema que se presenta en las calles, es que “los ciudadanos cumplan con el DNU -Decreto de Necesidad y Urgencia- y no circulen sin motivos por las calles. De hecho, hasta este momento, se han iniciado más de 400 causas del ámbito federal, por infracción al mismo”, comentó el comisario.
La intención desde la Institución es “efectuar los controles preventivos y necesarios para garantizar que se cumplan las medidas establecidas, con la finalidad de proteger a todos los ciudadanos y ciudadanas”.
Respecto de las licencias por vacaciones, Rodríguez explicó que en principio debieron suspenderse, pero de extenderse la cuarentena, deberán comenzar a otorgarse a fin de no incumplir con este beneficio laboral.
Descendió el índice de delitos
Consultado sobre el índice delictivo, el comisario Rodríguez explicó que ha descendido notoriamente, “arriesgaría a decir que descendió el 80 por ciento”, aunque sigue existiendo delitos contra la propiedad en algunos sectores de la ciudad, “es positivo este descenso”.
Entre 30 y 40 por ciento menos de denuncias por violencia de género
Asimismo, el comisario comentó que un lugar donde se reforzó la cantidad de numerarios, fue la comisaría de Género y Familia, “en principio entendimos que podía llegar a haber mayor cantidad de denuncias debido a la cantidad de tiempo que permanecerían todos los integrantes de la familia en el hogar, sin embargo, esto no ha ocurrido, de hecho a diferencia del resto del país, también descendieron los números de denuncias, entre un 30 y 40 por ciento”, a la vez que, cada vez que se toma una denuncia, el personal policial se traslada a los domicilios para recepcionar las denuncias y hasta este momento, tampoco se han registrado exclusiones de hogar.
A este fenómeno, diferente a lo que sucede en el país, Rodríguez no encuentra explicación, sino que seguramente será un dato a analizar por otros especialistas, por ejemplo, un sociólogo.