El secretario general del sindicato de la construcción Julio Ramírez recordó varios proyectos que quedaron en la nada y, tras los anuncios de obras municipales con fondos nacionales, prefirió esperar a “que empecemos a trabajar”. Aseguró que sigue pendiente de pago la deuda con las constructoras y la obra pública está prácticamente paralizada. Tampoco hay grandes obras en el sector privado.
Río Grande.- El secretario general de la UOCRA, Julio Ramírez, fue consultado por Radio Universidad 93.5 sobre las perspectivas de empleo que se abren para el sector a partir del anuncio de financiamiento nacional para obras municipales. “Yo me voy a poner contento cuando empecemos a trabajar en las obras, porque ya hubo un montón de licitaciones y nunca se empezó nada. Quedaron muchas obras paradas y todos se quedaron sin trabajo”, dijo, mostrándose escéptico ante estos anuncios.
“Ahora según las versiones y lo que dijo el presidente es que van a mandar dinero para las municipalidades de Ushuaia y Río Grande, aproximadamente 200 millones de pesos a cada una y con eso los intendentes están preparando licitaciones para empezar algunas obras y terminar las que se empezaron. Yo tuve una audiencia con el intendente de Ushuaia hace seis o siete meses y me dijo que tenía 500 obras en marcha, pero cuando recorrí, había gente trabajando con planes. Ahora cuando empiecen se verá qué obras licitan, si lo hacen con empresas o las hacen ellos, porque me entra la duda sobre esta situación”, señaló.
Remarcó que “el 70% de la gente contratada tiene que ser local, en todas las obras que se van a hacer. Ya hemos tenido gente que quedó sin cobrar por alguna empresa que se fue y nadie se hizo cargo. El que perdió fue el trabajador, como ocurrió con la obra del puerto de Ushuaia. Ahora creo que se va a hacer de otra forma y va a haber gente local, se va a administrar de otra manera. Con la experiencia que tuvimos, nosotros vamos a vigilar más de cerca a las empresas para que cumplan con los compañeros”, advirtió.
Respecto de si ha tenido contacto con las funcionarias de las áreas de Obras Públicas, tanto del municipio como de la provincia, dijo que “con la secretaria de Río Grande estuvimos hablando, está preparando los proyectos para empezar algunas obras. Ellos piensan hacer cordones, veredas, un gimnasio en Chacra y en la margen sur. Me parece muy importante también si el gobierno termina los 14 kilómetros de ruta de san Sebastián a la frontera chilena, porque se viene anunciando esa obra hace varios gobiernos y espero que se termine”.
“También está el tramo 1 del Corredor del Beagle en Ushuaia y el camino a Lapataia. El microestadio de Río Grande está en un 40% y tengo entendido que no es una obra prioritaria para este gobierno y habrá que esperar, porque la plata la destinaron a otra cosa así que esa obra quedó parada”, señaló.
“La planta de tratamiento de residuos de la margen sur sigue en marcha y creo que se va a terminar, después va a haber una ampliación porque quedó chica. Es una planta para 40 mil personas y necesitamos una más grande, por eso están viendo la posibilidad de ampliarla”, aseguró.
En cuanto a las deudas con las constructoras, la situación no se ha resuelto: “Yo hablo con algunos empresarios y siguen diciendo lo mismo, que les dieron muy poco de lo que les deben y con eso no pueden hacer nada. Si deben 100 millones les han dado 13, que es nada”, criticó.
“Vamos a confiar en este gobierno, en los intendentes, creo que vamos a salir adelante, que la gente ni bien pase la veda invernal, si nos seguimos cuidando, va a tener trabajo, que es lo que esperamos todos”, expresó.
Con respecto a la obra privada, dijo que “la única empresa que está trabajando es en la obra que está al lado de Status, con la mitad de la gente, son unas 20 personas, y hay alguna obra chica. Las empresas están haciendo lo posible para mantener la gente y tengo versiones del gobierno de que van a empezar a pagar y regularizar todo. Ojalá sea así para que no perdamos más puestos de trabajo y a mediados de agosto se pueda empezar con las obras”, concluyó.