El intendente de Río Grande expuso la necesidad de trabajar en conjunto con la provincia para evitar la proliferación del virus y que exista circulación comunitaria. Lamentó los factores externos que dieron por tierra con el logro de la ciudad de haber estado más de un mes y medio sin casos. Se sumó un médico del municipio al área de Epidemiología para intentar una coordinación y advirtió que se deberán tomar medidas desde el gobierno para frenar los contagios, con la prohibición de reuniones sociales, circulación sólo en casos de extrema necesidad y sobre todo controles. Si bien coincide en que los que llegan en los vuelos deben hacer la cuarentena, consideró “injusta” la falta de preaviso, porque la mayoría “se enteró arriba del avión” de que debían pagarse el hotel. También señaló que la ola polar dejó al descubierto “una situación de emergencia en materia de infraestructura hídrica y vial”, con obras “mal hechas” que tendrán que corregir. La coparticipación se sigue debiendo y “no hay voluntad política” para llegar a un acuerdo, lamentó.
Río Grande.- El intendente de Río Grande, Martín Pérez, dialogó con el programa Desde las Bases que se emite Radio Universidad 93.5 sobre la preocupación en la zona norte por el rebrote de COVID, que atribuyó a factores externos, dado que se mantenía la situación controlada.
“Veníamos muy bien, se venía controlando la situación y hemos tenido este rebrote que no lo esperaba nadie. Ahora hay que trabajar para que esta situación se resuelva y no avance, para evitar la circulación comunitaria del virus en nuestra ciudad”, dijo.
“Desde nuestro lugar tratamos de acompañar y de asistir para salir de esta situación. Estamos haciendo el mayor de los esfuerzos para que se pueda dar un trabajo mancomunado. La ciudad hizo una inversión muy importante desde el inicio de la pandemia, de más de 160 millones de pesos en insumos sanitarios, infraestructura, para acompañar el sistema sanitario de la ciudad. Es necesario poder contar con información para tomar las decisiones que se requieren, por eso hemos sumado un médico de nuestro staff sanitario al área de Epidemiología de la zona norte, para tener mejor información y acompañar este proceso”, indicó.
Para trabajar en forma coordinada “siempre estamos a disposición y luego el gobernador tiene la decisión. Hay un COE provincial y municipal conformado, que nos asesora en las acciones a seguir, también me he comunicado con el Ministro de Salud y autoridades nacionales y la preocupación es muy grande. Es un tiempo para trabajar coordinadamente en pos de la salud de nuestros vecinos y no hay lugar para mezquindades”, advirtió.
“Nosotros hemos sido muy claros en su momento, no coincidíamos con la llegada de vuelos a Río Grande por ejemplo, también planteamos que había que suspender rápidamente las reuniones sociales en la ciudad, y hoy también somos muy claros en pedir al gobierno que ejerza la mayor cantidad de controles posible, porque es la autoridad de aplicación, para evitar que el virus circule”, reclamó.
Llegada de fueguinos y cuarentena
Con respecto a la cuarentena obligatoria en hoteles de quienes arriban en los vuelos, aclaró que “no tenemos información de la llegada de fueguinos que supuestamente están varados. El gobierno no nos provee de esa información. Primero plantearon que no era necesario el alojamiento en hoteles y ahora dice que sí, y creo que los mismos vecinos que vienen en los vuelos se han enterado prácticamente arriba del avión de que tienen que hacer la cuarentena en un hotel. Ahora les dicen que se tienen que pagarse el hotel, y la verdad me parece un poco injusto, porque si se toma la decisión de que esas personas vengan, por lo menos tienen que informar con anterioridad de que van a tener que pagarse el hotel. Lo que es cierto es que el aislamiento se tiene que cumplir, porque tiene que ver con la seguridad sanitaria de nuestros vecinos”, planteó.
“El aislamiento lo tienen que cumplir, si es que son vecinos de la provincia, porque ese es otro tema. Estamos todos convencidos de que son personas que tienen su domicilio en Ushuaia, Río Grande o Tolhuin y eso lo corrobora el gobierno”, manifestó.
Crisis económica por la pandemia
Respecto del impacto de la pandemia en la actividad económica, dijo que “tratamos de asistir con la realidad presupuestaria que tenemos, que no hay que perder de vista. Hemos asistido a los sectores más vulnerables desde el inicio de la pandemia, ha crecido la demanda en alimentos un 400% en la ciudad y nos hemos hecho cargo nosotros; nos hemos hecho cargo de la entrega de leña a muchos sectores de la zona sur que lo necesitan por el frío intenso que hemos vivido. En materia de actividad comercial, hemos bonificado el pago de impuestos a todos los comercios que lo requirieron y hemos extendido las bonificaciones impositivas”.
“También hay una realidad, y es que el gobierno tiene una herramienta fantástica que aprobó la Legislatura con el programa PROGRESO. Son dos mil millones de pesos y uno esperaba que eso se pusiera en circulación rápidamente en nuestra economía local. El gobierno tiene todas las herramientas para poder asistir y tiene la responsabilidad de hacerlo luego de la aprobación de esta ley que se acompañó por unanimidad”, subrayó el intendente, ante la demora de respuestas que no llegan al sector privado.
“Nosotros con muy poquito hemos podido hacer mucho en el municipio, y con dos mil millones el gobierno podría hacer mucho si invierte ese dinero en la actividad comercial y en el sector del trabajo, como corresponde”, enfatizó.
Temporada invernal compleja
A la pandemia se sumó la ola polar con sectores muy afectados, como la margen sur, con la falta de agua, pero Pérez observó que quedaron al descubierto “obras mal hechas o que no se hicieron”.
“La situación se está comenzando a normalizar y esto se debe a un esfuerzo muy grande que han hecho los trabajadores municipales en este contexto de pandemia, donde tenemos una dotación muy menor con respecto a otros años. Además hemos tenido una ola polar histórica y no podemos perderlo de vista. Esta ola polar ha sacado a la luz problemas estructurales muy importantes en materia de agua. Ha mostrado que hay obras que no se hicieron de manera correcta y otras que todavía falta realizar, como una planta de rebombeo para mejorar el abastecimiento de la cisterna de la margen sur. Hemos tomado la decisión de avanzar con estas obras para que los vecinos no vuelvan a tener este inconveniente y estamos haciendo un trabajo muy importante de concientización, ayudando a los vecinos que tienen problemas en sus conexiones para que en el próximo invierno no vuelvan a congelarse las cañerías”, informó.
“Hoy estamos en una situación de emergencia del punto de vista hídrico y vial –definió-. Este invierno va a dejar una ciudad muy complicada del punto de vista vial y de la infraestructura hídrica. Vamos a tener que repensar lo que teníamos previsto hacer y reinventar nuestro plan de obra pública para mejorar la situación de las calles, y avanzar con las obras necesarias para mejorar la distribución de redes. Hay muchas obras que lamentablemente se hicieron mal en algunas zonas de la ciudad, y vamos a corregirlas y resolverlas”, aseguró.
Coparticipación sin regularizar
El intendente fue crítico de la falta de voluntad política del gobierno para resolver el reclamo por la deuda de coparticipación: “Estamos igual que siempre, no ha mejorado la situación, porque la coparticipación se sigue adeudando. Todo el esfuerzo en esta pandemia lo venimos haciendo con fondos propios y el gobierno lamentablemente no ha corregido la situación de deuda. Tampoco se ha cumplido con el compromiso de coparticipar los ATN y no están perjudicando al municipio sino a todos los vecinos”, dijo.
“Es una pena porque uno pensaba que quienes habían estado en este lugar entendían muy bien la situación e iban a mostrar otra predisposición”, observó.
Para Pérez la solución no pasa por la ley de goteo. “Es una cuestión de voluntad política. Si se quieren resolver los problemas en una mesa de diálogo, nosotros estamos dispuestos. No pasa por una ley, ni por un decreto, ni por hacer una nueva Constitución, sino por tener voluntad política. Uno ve que el gobierno nacional ha asistido a la provincia con más de tres mil o cuatro mil millones de pesos, y tenemos un presidente que se está ocupando de acompañar a la provincia. Vemos que el gobierno de la provincia ha tenido un fondeo de dos mil millones de pesos por una ley de la Legislatura, hay fondos en todo sentido y está muy bien que así sea, pero no hay voluntad política para ponerse al día con la deuda de coparticipación, ni voluntad política para coparticipar un peso de los ATN recibidos”, fustigó.
“Eso muestra que la intención no está, pero vamos a seguir insistiendo para llegar a una instancia de diálogo, porque necesitamos dar respuesta a muchos vecinos que la están pasando mal”, priorizó.
Balance del primer semestre
Finalmente se le pidió un balance del primer semestre y aclaró que “es difícil hacer un análisis objetivo en este contexto. La situación es tan adversa y tan distinta de lo que vivimos en otros tiempos, que uno ve con razón mucho enojo de la gente, mucho temor por lo que puede pasar del punto de vista sanitario. Es la sensación que se vive todos los días en la calle. Hoy queremos minimizar los riesgos que genera el rebrote del COVID y es lo que más nos preocupa: cuidar la salud de los vecinos. Más allá de que exista deuda de coparticipación o no exista voluntad política de resolverlo, estamos a disposición de la provincia para acompañas las decisiones que debe tomar el gobernador para que la situación no se vaya de las manos”, garantizó.
“Hubo un esfuerzo muy grande de los vecinos al inicio de la pandemia y luego todo se fue a la basura por situaciones externas. No creo que la solución hoy sea echarle la culpa a la gente. Las reuniones sociales se tienen que anular, tenemos que tener la menor circulación posible en la calle, porque eso va a permitir que el virus prolifere. Los vecinos lo entienden y están muy preocupados, por eso estamos incentivando la comunicación de nuestro lado sobre el cuidado que se necesita para sobrellevar esta situación”, concluyó.