El legislador de FORJA, presidente de la comisión de Salud de la Legislatura, adelantó los cambios que vienen para el sistema de salud del país y de la provincia. A nivel nacional ya se discute un proyecto de telemedicina, y a nivel local se avanza en la adhesión a la receta digital y la histórica clínica digital. Mostró especial preocupación por la crisis en la OSEF y la abultada deuda con los prestadores, y consideró que la solución pasa por reforzar el sistema de salud pública, para no depender tanto del privado. “Lamentablemente las obras sociales están arrodilladas ante muchos prestadores locales, y mientras los hospitales no funcionen, los privados hacen negocios”, manifestó.
Río Grande.- El legislador de FORJA Daniel Rivarola, presidente de la comisión de salud de la Cámara, dialogó con FM La Isla sobre su rol y el trabajo que se viene realizando, y señaló que la comisión de salud “trabaja también sobre leyes previsionales, leyes del trabajo, y en la parte de salud interviene cuando ingresan proyectos de ley que tienen relación con este tema. Estamos trabajando sobre proyectos de ley que quedaron pendientes de 2019, pero obviamente hay más acercamiento al Ministerio de Salud que el resto de las comisiones, y esto hace que estemos al tanto de la situación de Río Grande sobre todo con respecto al tema COVID. Los proyectos que van ingresando no tienen relación directa con el COVID sino con otro tipo de afecciones”, indicó.
Respecto de la falta de profesionales, recordó que el Ministerio de Salud inició una campaña a principios de año, que “tuvo resultados porque se han incorporado dos o tres profesionales en especialidades críticas, luego estuvimos atravesados por la pandemia y se cortó todo. Hoy hablar de trasladar médicos de otras partes del país en la situación en que estamos es imposible. Dentro de todo se pudo traer médicos, hay dos nuevos radicados en Tolhuin, y está el proyecto de un centro más grande con camas de internación, pero nos atravesó todo esto”, dijo.
Destacó que “hay una mirada distinta hacia el sistema y como legisladores también tenemos una mirada distinta. Mientras el actual gobernador fue intendente de Río Grande, su mirada justamente fue sanitaria. Se está viendo qué necesitan las localidades y lo principal es el recurso humano, luego obviamente la inversión en edificios. Río Grande, independientemente de esta situación coyuntural, está mejor preparado a nivel salud, tiene mejor capacidad médica por la cantidad de centros municipales, privados y del gobierno. En Ushuaia no se refleja de la misma manera y muchísimo menos en Tolhuin. Se hicieron reuniones con los vecinos de Tolhuin antes de la cuarentena y se les mostró cuál es la intención en tema de salud, de boca de la Ministra de Obras Pública y la Ministra de Salud”, repasó.
“Además hay una relación excelente con el gobierno nacional, una vez que se recuperó el Ministerio de Salud, entre los ministros de las distintas provincias. Lo que se pretende es que las especialidades más críticas estén radicadas en Tierra del Fuego, tratar de terminar con las evacuaciones y derivaciones, que no solamente sacan al paciente sino que tienen que ir los acompañantes y los chicos quedan acá. Apuntamos a un sistema mucho mejor, y a partir de ser presidente de la comisión 5 participo del COFELESA, que es el consejo federal legislativo de salud. En ese centro se está hablando de un proyecto de ley referido a la telemedicina. A partir de ahí también vamos a tener otra mirada, para que el paciente tenga contacto con un médico especialista en el norte y no tenga la necesidad de trasladarse”, dijo.
“Es un proyecto nacional, lo hablamos en la Legislatura, ya es ley la receta digital y falta que adhiera la provincia, estamos hablando de la historia clínica digital, que es un proyecto que está a nivel nacional y también debemos tratarlo a nivel provincial”, indicó.
“Se va incorporando un sistema de salud distinto, que se aceleró en virtud del COVID. Se está estableciendo un sistema de salud nacional que se va a acomodar a la telemedicina y va a mejorar muchísimo la atención de los pacientes”, aseguró.
Situación laboral
Como legislador de extracción gremial, se mostró preocupado por las fuentes laborales en riesgo, situación que se agrava con el rebrote de COVID. “A la situación complicada del comercio se le suma esta segunda ola que pone en riesgo más fuentes de trabajo. Desde la Legislatura hemos trabajado con la ley de emergencia para establecer créditos y subsidios a fin de llegar a todo el sector comercial, cuentapropistas y autónomos, para que traten de sobrellevar la situación, pero es un remedio pasajero. Si esto no tiene un corte en el mediano plazo, la situación comercial es muy compleja. Hay que ver si Río Grande se vuelve a poner de pie con el sistema fabril, que genera salarios genuinos para el comercio. El comercio de Ushuaia es totalmente distinto al de Río Grande y cada ciudad lo sufre de forma distinta. Mientras en Río Grande hay un comercio que depende exclusivamente del sector del gobierno y de la industria, en Ushuaia es turístico, lo mismo que en Tolhuin, y la situación de la pandemia hace que no tengan un horizonte claro”, planteó.
Futuro de la OSEF
En cuanto a la situación de la obra social estatal, dijo que “hay una mirada de un rescate, que es muy importante. Tiene una situación administrativa interna compleja, con una deuda enorme con los prestadores. El Estado no ha tenido aumentos durante casi dos años y los insumos médicos siguieron subiendo a valor del dólar. Esto lo atraviesan todas las obras sociales gremiales y privadas, pero cuando hay un congelamiento de ingresos, la situación es todavía más compleja. Los sectores privados han tenido aumentos salariales estos dos años y eso hace que la recaudación de sus obras sociales se vaya actualizando, atrasada pero con un incremento que mantiene las arcas un poco más gordas. La obra social provincial no ha tenido esa suerte, hay deudas con entidades privadas que provocan cortes de servicio, vaciamiento de la farmacia, malas compras. La farmacia de la OSEF ha sido dejada de lado y no tiene medicación. La nueva presidente está haciendo una labor a diario y estamos en contacto permanente por casos particulares. Tratamos de gestionar entre el paciente y la obra social, dando una mano y, siendo oficialista, es más fácil”, concedió.
“Tengo una excelente relación con la presidente anterior de la comisión 5, Liliana Martínez Allende, que ocupa la vicepresidencia y me ha puesto al tanto de muchas situaciones y me ayudó en los primeros pasos en este nuevo trabajo”, valoró.
“La verdad que la OSEF me preocupa, está trabajando en un proyecto para reforzar el ingreso económico, hay leyes que se están por incorporar que van a implicar gastos importantes en las prestaciones que tiene que brindar, y estamos acompañando. Lamentablemente las obras sociales están arrodilladas ante muchos prestadores locales, porque mientras los hospitales no anden, los privados hacen negocios. Yo le planteé al gobernador al inicio de la gestión que, si no reforzábamos la salud provincial no íbamos a poder sacar a la OSEF del pozo. Hasta que no manejemos una salud pública de nivel y no dependamos tanto del sector privado, no vamos a poder hacer convenios como la gente y manejar los costos”, advirtió.
“La OSEF es una de las obras sociales más importantes de la provincia y es la que regula costos. En el pasado hizo malos acuerdos económicos, de valores altos y prestaciones malas, y obligó a las obras sociales a regirse bajo esos convenios. Por eso hay que reforzarla con la salud pública, para que esos contratos sean del mismo Estado, y de esa manera bajar costos. Esto va a colaborar con otras obras sociales gremiales, bajando los costos que hoy están obligados a pagar”, concluyó.