La ministra de Producción Sonia Castiglione informó sobre las condiciones de reapertura de la actividad en las plantas industriales en la zona norte. Los turnos serán de un máximo de ocho horas y no habrá actividad de comedor, sino entrega de viandas. También destacó el acuerdo logrado con Textil Río Grande para la reapertura de la planta, y la posibilidad de sostener los puestos de trabajo. Respecto de la prórroga del subrégimen industrial, aseguró que siguen avanzando las negociaciones con las autoridades nacionales.
Río Grande.- La ministra de Producción Sonia Castiglione dialogó con FM Master’s sobre distintos puntos, entre ellos el acuerdo alcanzado con Textil Río Grande que permite la reapertura de la actividad. El anuncio fue realizado el jueves pasado por el gobernador Gustavo Melella, mediante videoconferencia con los delegados de la planta, de la que participaron los ministros de Trabajo y Empleo, Marcelo Romero; y de Producción y Ambiente, Sonia Castiglione, junto al legislador provincial Federico Greve.
Se logró revertir la decisión de la empresa de irse de la isla y Castiglione remarcó que “desde el momento uno el gobernador se puso al frente de las gestiones con los dueños de la empresa para poder arrimar algún tipo de solución y sostener a la empresa de Río Grande. Esto dio sus frutos y la actitud de los trabajadores y trabajadoras ha tenido la principal relevancia en todo esto. Se han manifestado en un marco de paz social, de propender al diálogo, de no dañar las instalaciones. Fue una actitud muy madura con el objetivo de sostener las fuentes de trabajo”, dijo.
“El gobierno fue parte de la solución para allanar algunos caminos y que la empresa tome esta decisión de reabrir las puertas. Claramente va a ser con otro ritmo, porque la industria textil está realmente muy golpeada después de los últimos cuatro años, más esta pandemia. Es una buena noticia empezar a trabajar y poco a poco recuperar el ritmo. Ahora tienen que adecuar las instalaciones, porque ellos dejaron de trabajar en marzo, cuando entramos en la cuarentena. Luego no hicieron ningún tipo de adecuación, de acuerdo a los protocolos. Ya tienen el protocolo presentado, no aprobado, y tienen que adecuar las instalaciones con las mismas normas de seguridad e higiene que tiene el resto. Verán si hace falta traer algunos insumos y eso es parte de la logística de la empresa, pero la reactivación sería prácticamente inmediata”, afirmó.
“Todo puesto de trabajo que se pierde es un puñal en el pecho, sobre todo para un Ministro de Producción, porque uno tiene que generar condiciones para el empleo, para el desarrollo de las actividades económicas que generan ese empleo. Esta pandemia nos impuso una variable que no existía y que hoy es eje de todas las decisiones que se están tomando. Cada puesto de trabajo que se pierde es doloroso y esta posibilidad de que vuelva a producir una industria, con la cantidad de trabajadores que involucra, es una alegría y una tranquilidad para ese grupo de trabajadores”, celebró.
Respecto de la situación de Ambassador, recordó que “hay un ofrecimiento de trabajo a fasón de parte de una industria de Río Grande. Hemos acercado las partes y se está intentando acordar este tipo de trabajo. Desde la comisión del área aduanera nos toca aprobar los trabajos a fasón que proponen las industrias y las condiciones, así que podremos intervenir para que las condiciones sean las mejores, en favor de los trabajadores”, garantizó.
Prórroga del subrégimen
Consultada sobre la prórroga del subrégimen, que fue planteada en la reunión de la comisión de seguimiento de la industria de la Legislatura provincial, indicó que “llevamos mucho tiempo de conversaciones con el gobierno nacional respecto de la prórroga y las modificaciones que habría que hacer al subrégimen, para que potencie el desarrollo de otras actividades productivas de la provincia. Estamos generando muy buenos elementos para llegar a la prórroga, y luego se verá si es por 10, 15, 20 ó 30 años. Claramente nosotros vamos por los 50 años, pero es una construcción sobre lo posible para mejorar este sistema de beneficios impositivos para el desarrollo del territorio”, expuso.
“Nosotros coincidimos en la necesidad de modificar las características del subrégimen. Encontramos una sintonía en la mirada de la nación y estamos trabajando en el formato y en la manera de hacer esas modificaciones, para que los sistemas productivos a desarrollar sean posibles. Algunas actividades necesitan un desarrollo desde cero, otras tienen algún avance pero todas están por desarrollarse. Esto va desde el valor agregado a los hidrocarburos, a la producción de alimentos y valor agregado sobre eso, sobre lo forestal, la turba, la pesca, la acuicultura, el polo logístico antártico, la concesión del puerto de Río Grande. Son muchas variables, todas tienen sus tiempos y deben tener una lógica para que realmente sirvan y no sea puro humo”, advirtió.
“Nosotros trabajamos con perfil muy bajo y hasta que no tenemos un logro concreto no salimos a dar ningún tipo de noticia. A veces pasa tiempo sin hablar de la prórroga del subrégimen pero no quiere decir que no estemos trabajando, porque lo estamos haciendo y todas las semanas nos reunimos virtualmente con equipos técnicos de nación para ir avanzando en esto. Las conversaciones vienen a buen ritmo y en el momento en que logremos cerrar todo esto, será el día del anuncio, no antes”, señaló.
Progreso con flexibilizaciones
También aludió a los cambios en los requisitos para acceder a las líneas del programa PROGRESO. “Después de más de dos meses de trabajar con esta herramienta y lo que estaba especificado en el informe que elevamos a la Legislatura, el 60% de quienes habían solicitado un crédito no había proseguido con el trámite. Fue un dato que tomamos y empezamos a investigar qué pasaba. La mayoría tenía que ver con la incertidumbre que había y no querían endeudarse cuando recién empezaban a abrir, además algunos ya tenían créditos tomados. Estamos trabajando en una refinanciación y una ampliación de plazos de gracia, porque hay que llevar los vencimientos mucho más adelante. De seis meses de gracia pasamos a doce meses y no se paga ni un peso, porque no se paga ni interés ni capital, con una tasa del 12% anual y 36 meses para la devolución, en lugar de 24”, detalló.
“Creemos que es más atractivo, porque en 12 meses pueden pasar muchas cosas con esta pandemia. Somos optimistas en que pueda existir una vacuna y pueda llegar a una nueva normalidad la actividad económica y productiva de la provincia. Un año es un buen tiempo como para que la mayoría de los sectores acomode su situación. Los créditos y subsidios Progreso son herramientas con una gran ductilidad, podemos ir modificando en la medida que se vayan planteando los distintos escenarios, así como lo hicimos ahora, para ayudar a la gente de una manera más efectiva”, se comprometió.
Reactivación de la industria
Respecto de la reapertura de las electrónicas y textiles en la zona norte a partir de hoy, explicó que “luego de un análisis del COE y una autorización del Ministerio de Salud de la Nación, se van a retomar las actividades. Va a haber muchos condicionamientos para las electrónicas y textiles, porque ya las plásticas estaban en actividad por ser proveedoras de insumos de elementos esenciales”.
“Va a haber turnos con un máximo de ocho horas, con tiempo para la desinfección entre turno y turno, con el 50% de la capacidad productiva de las plantas, y la capacitad del transporte también al 50%. No se va a usar el comedor sino que va a haber entrega de viandas, como se hizo cuando empezamos a flexibilizar la cuarentena anterior”, informó.
“Si una industria quiere hacer turnos de seis horas puede hacerlo y tiene que informarlo, pero el máximo es de ocho horas por cada turno. Las autopartistas están trabajando, pero con turnos de seis horas. Las textiles van a ir al 80% de la capacidad productiva, porque la cantidad de trabajadores que concentran es muchísimo menor que en las electrónicas y los espacios son distintos, porque los procesos también son distintos. Esto permite la posibilidad de incorporar más personal por turno. Se sigue respetando el máximo de ocho horas por turno, la no apertura del comedor y entrega de viandas, que es una medida válida para todos”, apuntó.
Consultada sobre el pedido de la UOM de realizar un testeo a todos los trabajadores que retomen la actividad, consideró que fue acertada la respuesta del COE, que expresó que “no tiene sustento sanitario ni epidemiológico este pedido”, porque no brinda garantías de que el trabajador esté incubando la enfermedad y sea asintomático. “Fue muy claro el COE en su respuesta ante la consulta sobre la posibilidad de que sirva o no el testeo”, opinó.
Finalmente dijo que por el momento se sigue sin actividad presencial en la administración pública pero los trámites se siguen llevando adelante mediante la comunicación virtual.