El presidente de la Cámara Fueguina de la Madera planteó que, de no llevarse adelante estas medidas, en pocos meses el país quedaría sin reservas y “en Tierra del Fuego todos desocupados”, al no haber dólares para la compra de insumos para la producción. Expuso que el problema no eran los pequeños ahorristas, que compraban los 200 dólares para revenderlos en el mercado paralelo, sino “unas 25 empresas que se llevaban mil millones mensuales para pagar deudas en el exterior, contraídas en el anterior gobierno”. Aseguró que el 35% adicional a cuenta de Ganancias no es aplicable en la provincia, por la vigencia de la ley 19640.
Río Grande.- El contador Ramón Gallardo, presidente de la Cámara Fueguina de la Madera, analizó las medidas económicas del gobierno nacional y, pese a las críticas de distintos sectores, las
consideró “positivas” del punto de vista de que eran “un mal necesario”.
Por Radio Universidad 93.5 señaló que “eran esperables, porque las mismas cámaras y las pymes pedían a gritos que los dólares que están en la reserva sean afectados al aparato productivo”.
“Había problemas de nuestros asociados para cancelar alguna máquina que estaba en producción y necesitaban que no pare, pero se pusieron restricciones de todo tipo. Para mí es bienvenido y esto es similar al dólar para el turismo. Nosotros peleamos para que se frenara la sangría de que salieran reservas, para que quien produce pueda tener los dólares para la compra de insumos, porque estamos cortando clavos”, expresó.
“Para mí lo más importante que salió fue la comunicación 1.706 del sistema bancario y cancelaban anticipadamente lo que debían en el exterior, porque le dice a las grandes empresas, que no son más de 25, que reestructuren su deuda, es decir que presenten un plan de reestructuración. Son empresas que por lo general estaban necesitando más de un millón de dólares por mes para cancelar pasivos con el exterior y muchas de esas deudas fueron adquiridas en el gobierno anterior”, aseguró.
“Ahora les están diciendo que solamente les van a dar el 40% de lo que requieren para cancelar esas deudas, y con el 60% restante van a tener que reestructurar la deuda con sus proveedores extranjeros. Muchas veces en la Federación reclamamos que no puede ser que el dólar viva a los saltos. Yo no culpo al que compra los 200 dólares, sino que se movían grandes sumas a través del contado con Liqui, que era una maniobra legal para comprar un título en pesos y venderlo en el extranjero. Eran muchas veces estas grandes empresas que recurrían a los préstamos del Banco Central a tasas bajas, y los volcaban a la compra de estos títulos, para hacer este negocio de aprovechar estos beneficios. Esto el Banco Central lo sabía”, subrayó.
Reiteró que “no son más de 25 empresas las que estaban utilizando más de un millón de dólares mensuales para cancelar deudas en el exterior, y no son pymes. Por eso el Banco Central está pidiendo a todas las empresas que tengan deudas por más de un millón mensual, que presenten un programa de reestructuración de esa deuda, porque el banco les va a vender dólares por el 40% y tendrán que refinanciar el resto”.
Panorama mejor
“Hay cosas que veo positivas, y veo una situación mejor que hace dos meses. Hace dos meses teníamos a un gobierno nacional en tratativas para arreglar la deuda externa. Hoy está arreglada y es positivo. Segundo, eran necesarias estas nuevas medidas, porque el Banco Central ya tenía menos de seis mil millones de divisas y se iban dos mil millones mensuales”, aportó como dato de la realidad, con un horizonte que planteaba el agotamiento en un par de meses.
“También es positivo que ya se elevó el presupuesto al Congreso y son medidas que ayudan a una cierta tranquilidad. Cuando elevé el proyecto al gobernador sobre cómo ampliar la matriz productiva de Tierra del Fuego, decía que toda la clase política y todos los que vivimos en la provincia, peleamos para que se prorrogue la 19640; pero el problema siempre era que no había dólares. Nos guste o no nos guste, usamos insumos importados y utilizamos divisas, cuando exportamos muy poco. Esa ecuación al gobierno nacional no le cierra. En este momento tan delicado el gobierno está decidiendo a quién le da y a quién no”, dijo sobre el impacto en la provincia.
“Yo tuve una videoconferencia con un funcionario de alto rango del Ministerio de Economía y me ha manifestado que es una locura pensar en 50 años o en 25 años de prórroga. Lo que me dijo es que tenemos que ampliar la matriz productiva. Acá falta una pata, que son los industriales y deberían elevar una idea superadora. Moreno dentro de todo hizo algo positivo para nosotros –dijo del ex Secretario de Comercio Interior del kirchnerismo- cuando obligó a que, si importaban un peso, tenían que exportar un peso. Por eso tiene que haber una contrapartida. Hay muchas empresas que están exportando, no justamente electrónicos, sino pescado o carbón. Yo creo que la ley se va a prorrogar, no en los plazos que se están pidiendo, sino que van a ser más cortos, y se va a exigir algo por el estilo”, adelantó.
“Mientras tanto, frente a esta escasez de dólares, seguirán con el dedo. Le darán a unos sí y a otros no, porque no alcanza”, dijo.
Inseguridad jurídica
El contador concedió que estas medidas profundizan la inseguridad jurídica del país, que espanta inversiones y empresas ya radicadas. “Estoy de acuerdo con eso, pero estamos mejor que hace dos meses cuando no sabíamos si se podía arreglar la deuda externa. Hay 25 empresas que se chupaban todos los dólares para cancelar pasivos que adquirieron en el gobierno anterior, y esto lo vemos como positivo porque esos dólares ahora se le pueden dar a las pymes para que puedan seguir produciendo, como el caso de las industrias de Tierra del Fuego, que necesitan insumos importados. Si no, no habría dólares, porque es como en el hospital donde no hay oxígeno para todos”, comparó.
Con respecto a los 200 dólares, que ya tenían el impuesto país del 30% y se agregaría el 35% a cuenta de Ganancias, aclaró que “la resolución general de AFIP dice que se va a aplicar el 35% sobre la base anterior, en carácter de anticipo al impuesto a las Ganancias. A mi criterio una resolución general de AFIP no puede pasar sobre la ley 19640, porque en el artículo 1° dice que estamos exentos de todo impuesto de carácter nacional por actividades, operaciones o bienes que uno tenga en el territorio. El artículo 4° hace mención al impuesto a las Ganancias, por lo cual entiendo que no corresponde, y tendrían que sacar una ley que modifique la 19640 para poder hacerlo. Esta resolución de AFIP no es aplicable en la provincia y la misma resolución dice que los que no paguen impuesto a las Ganancias, como es nuestro caso, podrán solicitar la devolución del importe retenido. De entrada, no pueden retener algo de lo que estamos exentos por ley. No tenemos por qué dejarnos retener y después pedir la devolución, porque no corresponde. Esa es la diferencia con el resto del país de los que no pagan Ganancias”, manifestó.
“Es una manera de limitar la compra de dólar ahorro, y además salió una resolución que cambia la apertura de una cuenta en dólares. Primero tienen que justificar ingresos suficientes y que tienen capacidad de ahorro en dólares. En segundo lugar, no pueden ser beneficiarios de ningún plan social. Lo que se quiere desestimar a esos seis millones de personas que compraban el dólar ahorro”, sostuvo.
“Todos compraban dólares porque eran casi 6 mil pesos de diferencia, que los usaban para comprar cosas, no es que eran grandes inversores. La gente lo usaba para el consumo y no son los grandes especuladores, pero ante la escasez que hay, están cortando por todos lados”, reconoció.
“Yo no justifico la medida, lo que digo es que era un mal necesario, porque no había otra opción. Si el país se quedaba sin dólares, en Tierra del Fuego quedarían todos desocupados”, advirtió.
“Obviamente muchas inversiones no van a venir, y no podemos esperar que vengan grandes inversiones cuando les cambiamos la bocha todos los días. Pero esto era un mal necesario y no había otra salida”.
«Particularmente creo que esta medida del control del dólar no va a surtir efecto, porque por más que se vaya a 130 pesos, la gente va a seguir comprando la moneda estadounidense», finalizó.