A raíz de la firma del gobernador Gustavo Melella con el jefe de Gabinete Santiago Cafiero y el presidente de ARSAT Pablo Tognetti de un convenio que prevé asistencia y asesoramiento, y además la inversión para interconectar la red provincial de fibra óptica con la red nacional, el gerente de servicios satelitales, Martín Fabris, explicó que por este acuerdo “se utiliza la infraestructura que ya había desplegado la provincia y ARSAT va a invertir en la iluminación de la fibra óptica”, por lo que tendrán acceso todas las localidades de la provincia. Se refirió a la importancia del lanzamiento de un nuevo satélite, el ARSAT-SG1, previsto para 2023, que se sumará al ATSAT I y II. Ambos actualmente “están facturando alrededor de 40 millones de dólares al año y un 30% son servicios de exportación en Estados Unidos y otros países del continente”.
Río Grande.- El gobernador Gustavo Melella firmó el pasado jueves un convenio con el jefe de gabinete Santiago Cafiero y el presidente de ARSAT Pablo Tognetti, que permitirá la asistencia y asesoramiento a la provincia, pero además la finalización del tendido de fibra óptica con la etapa de iluminación, que será financiada por la empresa nacional.
El convenio forma parte del plan Conectar 2020-2023 anunciado por el presidente Alberto Fernández, y Tierra del Fuego fue la primera en firmarlo.
Junto al jefe de Gabinete participó la secretaria de Innovación Pública, Micaela Sánchez Malcolm; el presidente de ARSAT, Pablo Tognetti e integrantes del Directorio.
En diálogo con Radio Universidad 93.5, el gerente de servicios satelitales de ARSAT, Martín Fabris, expuso los alcances de este convenio, que “establece la interconexión entre la red provincial que entregó la provincia de Tierra del Fuego a la red de fibra óptica que tiene más de 50 mil kilómetros de fibra iluminada. Dentro de ese marco, se estaría sumando conectividad a cinco ciudades de la provincia”, dijo en referencia a los cinco nódulos instalados.
Recordó que en 2012 se realizó el tendido del cable submarino de fibra de 40 kilómetros. “La inversión que hizo ARSAT en ese momento fue el cruce del Estrecho de Magallanes. Por este nuevo convenio se utiliza la infraestructura que ya había desplegado la provincia y ARSAT va a invertir en la iluminación de la fibra óptica. La inversión la hace ARSAT para poder dar servicio a esas cuatro o cinco ciudades”, señaló.
“El 90% del plan Conectar va a ser financiado con fuentes internacionales. Dentro de las inversiones, ARSAT tiene previsto el lanzamiento de un satélite de nueva generación, el SG1, de alta eficiencia para dar conectividad satelital en toda la República Argentina, incluida Tierra del Fuego. La inversión ronda los 200 millones de dólares, y es financiada por la CAF. En total hablamos de una inversión de 38 mil millones de pesos”, precisó.
Aclaró que “la diferencia de este satélite de alta capacidad es que está orientado a brindar conectividad satelital. Esto se logra teniendo coberturas más chicas y multiplicándolas a lo largo del territorio. Con la misma potencia se puede brindar mayor capacidad para atender. De esa forma bajan los costos de la conectividad satelital. El otro factor que introduce este nuevo desarrollo es que este satélite es de propulsión eléctrica. Todo el peso asignado al combustible se traslada a potencia eléctrica”.
También el plan conectar prevé inversiones en el Centro Nacional de Datos que funciona en Benavídez. “Se va a actualizar el sistema de respaldo y se va a invertir en servicios de seguridad informática. Hay además un plan de actualización de las estaciones terrenas, porque están operativas hace diez años y necesitan un mantenimiento adecuado”, dijo.
Respecto de la televisión digital abierta, la inversión es “de 450 millones para recuperar las 101 estaciones distribuidas por todo el país. Esta red digital terrestre cubre un 85% de la población. Es el resto brindamos un servicio de televisión digital satelital. La principal inversión está destinada a recuperar infraestructura de las UPS y los grupos electrógenos que no fueron correctamente mantenidos”, indicó.
Tecnología de exportación
Fabris destacó que “el ARSAT-SG1 además de dar cobertura a la Argentina, cubrirá Chile, Paraguay, Bolivia y Uruguay; por lo tanto como hacemos con el ARSAT II podríamos exportar servicios. El éxito del proyecto ARSAT I y II es que cada uno cumplió cinco años con una disponibilidad del 100%, quiere decir que no se interrumpió el servicio ni un segundo desde la puesta en operación. ARSAT II, además de cubrir Sudamérica, cubre Estados Unidos, y toda la capacidad que podía vender en Estados Unidos está siendo vendida. Por lo tanto podemos decir que estamos exportando servicios de valor agregado con tecnología argentina”.
Lamentó que “n cuatro años no se hizo mantenimiento, y eso es lo que necesitamos recuperar, por eso está considerado el plan de actualización. Además genera inconvenientes en la transmisión. El plan Conectar apuesta a un mantenimiento correcto y garantizar un servicio de calidad. El mantenimiento en una estructura que ya lleva diez años es importante”, subrayó.
“Hay ciertas políticas de Estado que, más allá de los gobiernos, se han mantenido. La política satelital debería ser una política de Estado y se debe favorecer el desarrollo de capacidades evidentes que tiene la Argentina. Se han lanzado satélites de comunicaciones que además permiten exportar este tipo de servicio, por lo tanto son ingresos de divisas. La alternativa a un satélite nacional, es un satélite internacional, y ahí en lugar de ingresar divisas, es un pago hacia el exterior”, observó.
“Nosotros tenemos dos satélites, pero hay 40 licenciados. Aun así, nuestros dos satélites están a un 90% de ocupación. Esto quiere decir que lo que se hizo, se hizo bien, y hay que darle continuidad”, planteó.
“Los dos satélites están facturando alrededor de 40 millones de dólares al año y un 30% son servicios de exportación en Estados Unidos y otros países del continente. También estamos trabajando en exportar la capacidad de nuestra infraestructura para dar servicios a otros operadores. Dentro de Benavídez alquilamos el lugar y estamos firmando convenios con empresas operadoras internacionales para alquilar nuestra infraestructura para que puedan hacer uso de ellas en las distintas fases del satelismo”, adelantó.
Respecto de la fecha de lanzamiento del SG1, dijo que “está proyectado para el segundo semestre de 2023, porque también hay un impacto del COVID en todo el programa. Seguramente haremos un concurso y veremos con qué empresa haremos el lanzamiento. Todavía es temprano para esta fase. Haremos el mayor esfuerzo para hacerlo lo antes posible y no vamos a rescindir la garantía de calidad que nos caracteriza. A cinco o seis años de la inauguración no hubo ningún tipo de interrupción y hay un 90% de ocupación. Tenemos que mantener ese éxito con este satélite de nueva generación”, enfatizó.
Finalmente anunció que “ea se está pensando en el SG2, con proyección internacional como la tuvo el ARSAT II. No hay que olvidar de que tienen una vida útil de 15 años y ya debemos pensar en un reemplazo del ARSAT I y en un complemento del SG1. En lo que es satélites, uno tiene que estar hablando de políticas de 20 años, porque lleva entre cuatro y cinco años el lanzamiento y la vida útil ronda los 15 años. Es importantísimo que esta política de desarrollo se mantenga a lo largo del tiempo. El recurso humano es importante y apelamos a generar esta inquietud en las nuevas generaciones”, manifestó.
“Otro concepto que involucra el ARSAT SG1 es una mayor integración de productos nacionales. El ARSAT I y II tenía un importante número de partes introducidas desde el exterior. El proyecto SG1 busca una mayor integración de equipos nacionales y hay unas 80 pymes de la industria aeroespacial que son proveedoras del INVAP para la construcción de este satélite”, aseguró.
“ARSAT tiene al INVAP como contratista principal, y dentro de su matriz están estos proveedores. Se apunta a una nueva plataforma, que es un salto tecnológico, y estaría a la altura de lo que están vendiendo proveedores internacionales. Está pensada para ser competitiva a nivel de precio con las plataformas internacionales, para poder exportar la tecnología”, concluyó.
