Monumento afirma que Chile fue “descubierto” por la comuna de San Gregorio. “Aquí, en la comuna de San Gregorio, Fernando de Magallanes descubrió Chile y el Estrecho de su nombre, 21 de octubre de 1520”. Esta es la sentencia del Premio Nacional de Historia, Mateo Martinic Beros, que se consigna en la placa del monumento Reloj Solar Ecuatorial, inaugurado ayer en Punta Delgada. La ceremonia fue encabezada por el presidente del Consejo Regional, Alejandro Kusanovic, quien leyó un discurso que preparó Martinic para la ocasión y en el cual remarca su postura respecto del territorio chileno.
Punta Arenas.- (Por La Prensa Austral) El encuentro de los mares y de dos culturas representa el monumento que fue inaugurado en Punta Dungeness.
La obra es una iniciativa de la Municipalidad de San Gregorio y rinde tributo a los 500 años del descubrimiento de Chile a través del estrecho de Magallanes.
El alcalde de la comuna, ubicada a 120 km de Punta Arenas, Edgar Cárcamo, explicó que “con este acto e inauguración nos sumamos a la conmemoración de los 500 años. La ceremonia se desarrolló en la boca oriental del estrecho de Magallanes, donde vamos a dejar testimonio del encuentro de dos culturas, con un monumento que, por un lado, destaca la figura del navegante portugués y, por otro, el de un aborigen aonikenk”.
Por otro lado, el jefe municipal destacó también la inauguración del reloj solar en Punta Delgada. “Ese es un aporte de privados y de una fundación, que también da realce a lo que es la conmemoración del viaje de Magallanes”, enfatizó.
La obra se trata de un proyecto similar al instalado en Sanlúcar de Barrameda, que marca la denominada Legua Cero, en recuerdo del punto de partida y de llegada de la Armada de las Molucas. El monumento levantado en el cruce de primera angostura en la comuna de San Gregorio señala la legua 2.919, del trayecto de 14.460 que se debieron navegar para dar la primera vuelta al mundo. El corte de cinta estuvo a cargo de Kusanovic y del alcalde comunal, Edgar Cárcamo.
Un símbolo de encuentro
En cuanto a las características del monumento a inaugurar mañana en el sector del faro de Punta Dungeness, Edgar Cárcamo detalló que se trata de una obra escultórica de Américo Becerra Pinto y de la pintora artista visual Fabiola Díaz Vargas, y en la cual también participaron vecinos de Villa Punta Delgada. Este se compone de cinco elementos que representan distintos símbolos históricos.
Por un lado está la Rosa de los Vientos, que es parte de la base maciza construida en hormigón armado, recubierta con mosaico decorativo, que posiciona a la obra y sus coordenadas. Además incluye la leyenda “San Gregorio 2020, 500 años del Estrecho de Magallanes”. En la gama de colores utilizados están presentes el azul del mar y el ocre de la tierra magallánica.
También se incorpora la figura de Hernando de Magallanes, que toma como referencia la del monumento de la Plaza de Armas de Punta Arenas. El navegante mira de frente a otro de los símbolos: un aonikenk, que observa atónito la figura del hombre totalmente desconocido.
El cuarto elemento es el galeón, representado por las líneas principales en su casco y unas líneas en la parte superior simulando las velas.
Finalmente y como quinto elemento, se proyecta en la cúspide un globo terráqueo de estilo clásico antiguo; en él se señala la posición del estrecho de Magallanes en el planeta. El globo representa el gran paso en la globalización que hizo posible el crecimiento y el desarrollo, siendo este paso el más importante y utilizado hasta nuestros días.
En cuanto a los materiales utilizados, la base de la Rosa de los Vientos está construida en hormigón armado y recubierta de mosaico, las restantes 4 figuras están realizadas en fierro dulce y fierro fundido utilizando piezas de desecho estructural lo que asegura su durabilidad y resistencia, utilizando como materia prima láminas y trozos de planchas de acero de espesores variables entre los 3 y 5 mm, trabajada con la técnica de soldadura al arco y tratamiento de protección anticorrosiva. Además se incorporan elementos de reciclaje, reconocibles por el público, agregándole un factor de cercanía al público en su interpretación de la escultura.