Fredy Miranda, uno de los maestros antárticos, reclamó que se revise la decisión de cerrar la Escuela 38 asegurando que dicha posibilidad depende de “una medida política”. “Estamos a tiempo, porque si hay una decisión política se puede hacer ya que no son más de 25 personas o 30 las que tienen que llevar a la Antártida, entre ellas el matrimonio docente”, remarcó el maestro. Mencionó que “todos los países hacen ciencia en la Antártida, pero educación solamente hace Argentina y eso tiene que prevalecer”.
Río Grande – Fredy Miranda, maestro antártico, recordó que la Escuela 38 “Presidente Raúl Ricardo Alfonsín” es “la única escuela que existe actualmente en la Antártida, ya que Chile también tenía una en una de sus bases, pero en la actualidad esta es la única y fue la primera en instalarse en la Antártida en el año 1978. Entonces son 42 años funcionando, además de haber sido la única del país y una de las pocas del mundo que tuvo clases en 2020”, a pesar de la pandemia.
El docente lamentó que “este año se van a ver interrumpidas las clases, entonces parece que fuera todo lo contrario. Seguramente habrá clases en todo el mundo y en la única escuela que no habrá clases es la de la Antártida, eso como docente antártico digo que duele mucho”, indicó el maestro, quien se desempeñó en el año 2015 en la escuela de Base Esperanza.
Mencionó que personalmente “estuve ahí, vi jugar niños, corretear, les di clases, reímos, jugamos con nieve; pero eso se verá interrumpido este año por decisiones políticas que personalmente no comprendo, ni acepto. Sigo pensando que estamos a tiempo, porque si hay una decisión política se puede hacer, ya que no son más de 25 personas o 30 las que tienen que llevar a la Antártida, entre ellas el matrimonio docente que pertenece al Ministerio de Educación de Tierra del Fuego”, indicó.
El docente antártico recordó que recientemente “vino el presidente Alberto Fernández a la reunión de capitales alternativas, con el clima que tuvimos los estuve esperando me acerqué y le presenté mi inquietud. Él me dijo que me quedara tranquilo, que algo van a hacer y que no entendía esta situación; pero por lo visto siguen firmes con esa decisión que lamento”, señaló Fredy Miranda.
Después advirtió que “gracias a la Antártida tenemos ese nombre de país bicontinental y como tal tenemos que honrar a todos los docentes, que desde el año 1978 estuvieron ahí. Son 42 años ininterrumpidos de actividad en la Base Esperanza, pero este año se verá interrumpido y es una verdadera pena”, insistió. Diferenciando que “todos los países hacen ciencia en la Antártida, pero educación solamente hace Argentina y eso tiene que prevalecer”, reiteró.
Finalmente recordó que solamente se trata de “llegar sin Covid y después ya no hay más contacto con el Continente, hasta septiembre u octubre cuando llegan los cruceros. Pero ¿para qué tienen que llegar los cruceros?”, se preguntó. Indicando por último que “se apresuraron en tomar esta decisión a mediados de octubre” y señalando que “se podría haber vacunando a treinta personas más, que son las familias que van a la Base” para no tener que interrumpir el tradicional ciclo lectivo.