El BIM 5 tiene una rica historia con el pueblo de Río Grande, muchos vecinos nacieron en el cuartel. Salud, seguridad, pan, leche y muchos otros servicios fueron prestados por los infantes de marina a los pobladores. En 1982 en Malvinas, sus integrantes se cubrieron de gloria con sus acciones heroicas que hoy están reflejadas en las publicaciones militares del mundo.
Río Grande.- El Batallón de Infantería de Marina N°5 Ec. (BIM5) fue creado el 26 de junio de 1947 bajo la denominación de Destacamento de Seguridad de la Gobernación Marítima de Tierra del Fuego.
En 1953 cambió su organización y se lo denominó Batallón de Infantería de Marina N°5 Ec. Si bien su asiento era en Ushuaia, se encontraba en la Base Naval Río Santiago a la espera del material y equipos especiales que necesitaba para su traslado.
Con el correr del tiempo y, a través de una orden, se designó como primer Comandante al Guardiamarina José César Scala, quien se desplegó seguido por dos suboficiales, siete cabos y 78 conscriptos Clase 1925. Ese contingente salió el 15 de septiembre de 1947 desde la Base Naval Río Santiago a bordo de una chata, con rumbo a la dársena Sur del Puerto de Buenos Aires; y cuatro días después embarcó en el transporte ARA “Chaco” hacia Ushuaia.
Luego de varias escalas en ciudades costeras, la llegada al Destacamento Naval Ushuaia se registró el 7 de octubre. En 1951, sin modificar su asiento, se destacó a la 1° Compañía de Tiradores a Río Grande, ocupando los cuarteles del Regimiento de Infantería Motorizada, los cuales habían sido transferidos al Ministerio de Marina (Gobernación Marítima de Tierra del Fuego). Luego, al año siguiente, el asiento de la unidad fue trasladado definitivamente hacia los cuarteles de Infantería de Marina de Río Grande.
Al momento de trasladarse el BIM5 (Ec.) a los cuarteles de Río Grande, cerca de 900 efectivos irrumpieron en la vida de una pequeña comunidad que, en esos tiempos, estaba conformada por unas 2.240 personas. La llegada de esta unidad de combate a un pueblo chico significó la presencia soberana del Pabellón Nacional portado con espíritu patriótico por los hombres de la Armada.
La presencia de la unidad de combate significó, entre otras muchas cosas, que el BIM5 asistiera a la comunidad en sus necesidades más elementales, como era la provisión de agua potable, leña y energía eléctrica, cuando los distintos servicios de distribución domiciliaria aún no se habían concretado.
En el conflicto del Atlántico Sur de 1982, la unidad operó en las Islas Malvinas donde se destacó por su espíritu y adiestramiento durante la preparación de la defensa de Puerto Argentino. Una vez iniciado el asalto británico todas las subunidades del BIM5 Ec. entraron en combate en primera línea con gran eficiencia y valor. Produjeron al enemigo demoras en su ataque e importantes bajas; sufriendo a su vez, muertes heroicas.