El senador Nacional por Tierra del Fuego, Pablo Daniel Blanco, pidió ayer a la mañana que las autoridades del Ministerio de Relaciones Exteriores, Ministerio de Seguridad, Ministerio de Defensa y Ministerio de Agricultura, Ganadería y Pesca, informen sobre las medidas de vigilancia temprana que van a adoptar frente a la amenaza de los derechos soberanos y la sustentabilidad de los recursos vivos del Mar Argentino provocada por el desplazamiento de la flota pesquera China de más de 350 barcos que han iniciado su desplazamiento al Atlántico Sur.
Río Grande.- También requirió que informen sobre las medidas de carácter diplomático adoptadas, de manera bilateral con el gobierno de la República Popular de China en relación al arribo de la flota mencionada a nuestras aguas y con el gobierno de la República Oriental del Uruguay en relación al apoyo logístico y operativo creciente que dicha flota tiene en puertos uruguayos; y multilateral en el ámbito de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura y otros organismos dedicados al uso responsable y la protección de los mares.
“Esta práctica pesquera implica una amenaza directa a intereses vitales de nuestro país y una práctica invasiva apoyada en países vecinos que resultan ser aliados de esta depredación de lo nuestro”, afirmó el senador de Juntos por el Cambio Pablo Blanco.
“Si bien la pesca en la milla 201 es libre, por efecto de las especies altamente migratorias y transzonales, los efectos predatorios de esta práctica no regulada y no declarada, se extienden sobre nuestro mar territorial. La flota en cuestión, que pertenece a la denominada Milicia Marítima de China, hoy se encuentra estacionada frente a la costa peruana pero en estos días iniciará la travesía hacia esta parte del mundo, previo paso por el Estrecho de Magallanes. Esta flota, es un brazo militarizado del gobierno de la República Popular China con la cual satisface necesidades imperiosas de alimentos pero, a su vez, es parte de una estrategia marítima de dominio e influencia internacional”.
“El puerto de Montevideo se ha convertido en el punto principal de apoyo de estas flotas estatales chinas, lo cual implica una toma de posición del gobierno uruguayo en relación a las prácticas predatorias que afectan nuestro patrimonio alimentario poniendo en riesgo su sustentabilidad en el tiempo”.
“El Gobierno Nacional se encuentra atrapado en una crisis económica que lo hace prisionero de cuanto país tiene influencia y poder en asuntos del bien común. Es de prever que la debilidad del Poder Ejecutivo será aprovechada por el Gobierno chino para avanzar con su estrategia de logro de fines en el corto, mediano y largo plazo”, finalizó el senador fueguino.
El proyecto fue acompañado por los senadores Nacionales: Eduardo Costa, Silvia Elías de Pérez, Stella Maris Olalla, Roberto Basualdo, Pedro Braillard Poccard, Juan Carlos Marino, Víctor Zimmermann; Alejandra Vucasovich, Claudio Poggi y María Belén Tapia.