El propietario de Granja Porcina, uno de los emprendimientos más importantes de la provincia, dio a conocer las perspectivas para el resto del año y la intención de ampliar volúmenes de producción para el próximo, con lo que superaría las cien toneladas anuales. Destacó que el mayor volumen permite bajar los precios o al menos sostenerlos y, comparando con los valores del año pasado, el incremento sería del 30%, inferior a la inflación. Adelantó la decisión de avanzar con una planta propia de faena, no para uso continuo, sino para suplir al matadero municipal cuando tiene mucha demanda o no trabaja por los feriados. También están produciendo chorizos, con buena aceptación entre los clientes y para 2022 sumarían otra máquina para avanzar con longanizas, calabresa y chorizo colorado. También para marzo tiene previsto incursionar con la pierna de jamón de cerdo.
Río Grande.- Daniel Parún, uno de los productores porcinos más importante de la provincia, dialogó con Radio Universidad 93.5 sobre las perspectivas de crecimiento del emprendimiento, que para 2022 superaría las cien toneladas anuales.
“Estamos tratando de que la producción aumente cada vez más y hemos logrado llegar a fin de año con muchos animales. Hay mucha expectativa sobre las ventas los últimos días del año. Esperamos tener suerte y vender todo lo que hemos producido”, dijo.
Consultado sobre los reclamos al municipio de Río Grande por el funcionamiento del matadero, dijo que se solucionaron. “En general mejoró muchísimo, luego de varias charlas con Matías Lapadula y el director del matadero. Trataron de aumentar la cantidad de animales y mejorar la faena. Por suerte mejoró bastante pero independientemente de eso estamos pensando en armar una pequeña sala propia, porque cuando hay muchos feriados o fechas importantes se reduce la capacidad de faena. Hay pequeños productores que también necesitan faenar y nos ha sucedido que hemos quedado un día sin tener mercadería en el local, por un feriado”, señaló.
“Ya tengo todo armado en el campo y queremos tener una sala pequeña para que, cuando el matadero municipal tenga poca disponibilidad, podamos hacer la faena de manera propia. Tenemos un médico veterinario que nos está acompañando, que es Fabián Zanini, y estuvo haciendo las averiguaciones en SENASA. Queremos esta sala para seguir creciendo y produciendo. Va a ser solamente para mi establecimiento y no va a ser una tarea continua, sino solamente para los momentos en que el matadero municipal tiene mucha demanda”, aclaró.
Nuevas madres
La granja tiene previsto aumentar la cantidad de madres para el año próximo. “Hoy tenemos 70 madres y la idea es llegar a 80. Este año hemos hecho 13 inseminaciones artificiales y nos ha ido muy bien. Queremos guardar 20 madres de esas crías para reponer 10 y tratar de llegar a 80, además cambiar otras 10 que están completando el ciclo reproductivo. En base a las ventas y el mercado, veremos si aumentaremos las madres. Cada madre da dos partos a un promedio de diez animalitos por cada parto, por 80 madres son 1.600 animales, que dividido los 12 meses del año da un número importante para vender por mes. Estamos hablando de más de 100 capones mensuales con algún lechón que se pueda ofrecer. Toda la producción al mes de mayo la tenemos cubierta y lo que sale en diciembre es para junio. Hoy estamos con 350 animales para sacar a partir de febrero. En enero cerramos 30 días y a partir de febrero empezamos a atender nuevamente en el salón de ventas. La idea es sacar no menos de 80 capones mensuales, es decir 20 por semana”, dijo.
Aumento del consumo
Destacó el aumento del consumo de carne de cerdo producida localmente, si bien “sigue ingresando cerdo de la Patagonia, también congelado, pero nosotros estamos apostando a que el volumen nos permita tener precios muy accesibles. También estamos abriendo las puertas en Ushuaia y ya tenemos algunos clientes semanales que tienen una cierta cantidad de consumo que para nosotros es importante. Esto nos obliga a crecer, según cómo venga la economía el año que viene”, manifestó.
“Nuestros principales clientes en Ushuaia son los restaurantes, también consume la hostería Kaikén en Tolhuin y ellos quieren cortes muy puntuales. El restaurante Chez Manu de Ushuaia tiene el codillo de cerdo como plato principal, que tiene 48 horas de elaboración y se cocina 24 horas más. La elaboración es muy especial y ellos consumen todos los codillos. A eso le suma algo que antes se tiraba, que era el hígado de cerdo, y hoy están haciendo una terrina de cerdo a base de hígado, de papada de cerdo y bondiola, todo con muchísima elaboración. La hostería Kaikén hizo un pedido bastante importante para fin de año, de solomillo y bondiola. Por suerte se está dando a conocer Granja Porcina y el producto le gusta a todo el mundo porque tiene muy buena calidad”, celebró.
Aumento de alimentos
Pese al incremento del costo del alimento balanceado, no se trasladó al precio final y de un año a otro habría un aumento del 30% en el valor de la carne. “El alimento balanceado en los últimos dos años y medio aumentó un 360%. El 55% de inflación que tuvo el país en general se duplicó para el alimento. La bolsa de maíz se cotiza en dólares, la soja también, y el 70% del balanceado es maíz, y el resto es soja y núcleos. Yo lo estoy trayendo de Bahía Blanca y hoy tenemos tres proveedores. La previsibilidad es muy buena y sólo falta que las condiciones económicas nos permitan crecer, porque tenemos un montón de animales y ojalá podamos seguir estando en el mercado, cada vez con más cantidad de kilos para bajar los precios o al menos sostenerlos”, planteó.
“Hoy todo el mundo está preguntando por los lechones. El año pasado vendíamos el kilo a 1.000 pesos, hoy está a 1.200 pesos y seguramente la próxima semana que llega el alimento balanceado, veremos si hubo alguna variación y tendremos que aplicar algo más, pero no creo que sea más de 1.300 pesos el kilo. Esto es un 30% más que el año pasado –por debajo de la inflación-, y la idea es que la gente pueda acceder”, reiteró.
“En Buenos Aires está costando 1.250 pesos el kilo de lechón, más caro que acá; y el solomillo lo tenían a 1.050 pesos y nosotros lo tenemos a 750 pesos”, comparó.
Pedidos para las fiestas
“En diciembre tenemos 100 capones para sacar y casi 100 lechones, y 100 capones van a ser casi 8 mil kilos; en lechones son 12 kilos de promedio así que son 1.200 kilos más, es decir que estamos cerca de los 10 mil kilos para diciembre”, indicó ante el aumento de la demanda por las fiestas.
Más de cien toneladas
En lo que se refiere a producción anual, prevé superar las cien toneladas “porque el año que viene para el mes de julio tenemos pensado hablar de 120 capones mensuales. Creo que vamos a superar tranquilamente esas cien toneladas. Para que sea rentable y podamos seguir funcionando como pequeños productores necesitamos más volumen”.
Hasta ahora la respuesta es muy buena, “todos los días suena el teléfono con pedidos, se comunican por las redes sociales y por suerte hay un montón de clientes. A partir de la próxima semana cuando tengamos claro el precio, empezaremos a hacer las reservas y como máximo el 20 de diciembre los lechones estarán en el local para que los pasen a buscar”, anticipó.
Fábrica de chorizos
También dio a conocer la incursión en chacinados. “Hace unos meses compramos una secadora exclusivamente para hacer salamines. Tiene un control máximo de humedad y un control máximo y mínimo de temperatura, y en aproximadamente siete u ocho días los salamines salen secos. Nosotros ponemos 60 kilos y terminan saliendo 35 kilos más o menos. Son alrededor de 200 salamines que entran y salen muy ricos, son 100% cerdo, con 20% de tocino y 80% de carne. Todas las semanas hacemos 60 kilos y a todo el mundo le gusta. La idea es poner otra máquina más el año que viene para empezar a hacer longaniza, calabresa y chorizo colorado”, dijo.
Finalmente adelantó que en marzo comenzarían a hacer jamón de cerdo. “Ya estamos preparando algunos cajones para ponerlos en sal, de una manera muy tradicional. Queremos hacer uno por mes, porque también es un riesgo. Uno pone 14 kilos que pesa una pierna y veremos cómo sale después de seis meses”.
Por el momento no hay venta en los supermercados porque “más allá del volumen, tienen una forma de pago diferente, los plazos son más largos y en la granja tenemos gastos todos los meses. No podemos esperar más de 30 días para los pagos. Por suerte la mayoría de la gente ya conoce nuestra carnicería y todo lo que traemos se puede comercializar. Venimos muy bien y a medida que vamos creciendo en producción bajamos los precios. Hoy un kilo de cuerito cuesta 30 pesos y ese precio no se consigue en ningún lado”, afirmó.
Recordó que la granja se encuentra “a 95 kilómetros de la ciudad y debo decir que Vialidad Provincial hace lo posible para mantener las rutas en buenas condiciones. El viaje al campo es de poco más de una hora cuando antes eran más de dos por el estado de la ruta”.