El Proyecto PAIS, del que participan el CADIC, la UNTDF y el Hospital Ushuaia advierte que en sólo dos semanas Ómicron llegó a representar el 87% de los casos en la provincia, coincidiendo con la suba de casos. La particularidad es que durante todo el año y hasta la última quincena del año, sólo se observaron en la provincia las variantes Alpha y Gamma (a diferencia del resto del país donde Delta era predominante ya desde octubre).
Ushuaia.- Desde el comienzo de la pandemia, en Argentina viene trabajando el Proyecto PAIS, que monitorea la evolución genética del virus que causa la COVID-19 (SARS-CoV-2), con nodos de funcionamiento a lo largo y ancho de todo el territorio.
En Tierra del Fuego funciona el nodo más austral en el que participan el Centro Austral de Investigaciones Científicas (CADIC-CONICET), la Universidad Nacional de Tierra del Fuego (UNTDF) y el Hospital Regional Ushuaia.
“Este proyecto de seguimiento permite saber cuales son las variantes que ingresaron, si surgen nuevas variantes, cómo es la dinámica y cuáles son las variantes de preocupación que circulan más. Contar con esta información es importante porque cada variante tiene sus particularidades y diferencias en relación a la clínica que genera, la efectividad de las vacunas y la transmisibilidad”, explica Santiago Ceballos, investigador del CADIC y la UNTDF.
Desde el Proyecto PAIS publicaron un nuevo informe que analiza la situación actual en torno a las variantes del SARS-CoV-2 en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires y las provincias de Buenos Aires, Chaco, Neuquén, Santa Fe y Tierra del Fuego. En dicho reporte se toma en cuenta el estudio realizado en 1534 individuos entre el 1 de octubre y el 31 de diciembre de 2021, el 70% de los cuales no tenían antecedente de viaje al exterior ni contacto estrecho con viajeros.
Tierra del Fuego se destaca en el informe por presentar una situación epidemiológica particular. Durante todo el año y hasta la última quincena del año, sólo se observaron en la provincia las variantes Alpha y Gamma (a diferencia del resto del país donde Delta era predominante ya desde octubre) y un bajo número de casos.
Sin embargo, en la semana del 19 al 25 de diciembre se detectaron por primera vez la variante Omicron (que alcanzó casi el 62% del total de los casos analizados) y Delta.
Para la última semana del año Omicron superó el 83% de los casos estudiados y esto coincide con el notorio crecimiento del número de personas infectadas en este último período.
“Tener la posibilidad de realizar estos estudios en Tierra del Fuego es sumamente importante porque estamos muy alejados de los grandes centros del país y enviar muestras a analizar implica mucho tiempo y recursos, además de sobrecargar a esos centros. Es una ventaja enorme poder estudiar localmente, en detalle, cómo es la situación del virus, con equipamiento y recursos humanos propios, desde Ushuaia. Por ejemplo, esta secuenciación nos permitió confirmar que este último pico en Tierra del Fuego se debe a la variante Omicron”, asevera Ceballos.
Variante Omicron en Argentina y el Mundo
El 26 de noviembre la Organización Mundial de la Salud clasificó oficialmente una nueva variante que se detectó por primera vez en Sud África y la denominó Omicron. Ésta presenta muchas mutaciones, en particular en la proteína spike que es la que le permite al virus entrar en las células del cuerpo humano.
Según el reporte del Proyecto PAIS, “Varios estudios in vitro indican pérdida de capacidad de neutralización contra Omicron en sueros de individuos que han recibido vacunación primaria o en aquellos que han tenido una infección previa por SARS-CoV-2. En este mismo sentido, la efectividad vacunal frente a las infecciones sintomáticas disminuye significativamente para Omicron en comparación con Delta, sin embargo, la protección contra la hospitalización es mucho mayor que contra la enfermedad sintomática, en particular después de una dosis adicional o de refuerzo”.
De esta manera, Delta, que había predominado en Argentina durante octubre y noviembre, está siendo desplazada rápidamente por Omicron que, aunque aún no es la variable dominante, puede llegar a serlo en pocas semanas. “Los resultados aquí presentados están en consonancia con la situación epidemiológica observada en varios países del mundo, caracterizada hasta el momento por un incremento abrupto de la frecuencia de detección de la variante Omicron, en simultáneo con el reporte de un número muy elevado de casos de detección de SARS-CoV-2 asociados a nuevas olas de infecciones a nivel mundial”, explica el reporte.
“En este momento, Argentina transita una tercera ola, que, según nuestros resultados, inicialmente se encontró asociada a la variante Delta y más recientemente al ingreso y propagación de Omicron. Esta nueva ola de infecciones probablemente se deba a causas multifactoriales que incluyen desde la relajación de las medidas de cuidado en la población, el aumento de reuniones sociales por fin de año, el mayor ingreso individuos desde el exterior, hasta características intrínsecas de mayor transmisibilidad y probable evasión de la respuesta inmune de la variante Omicron”, concluye el informe.