La fundación de la Base San Martín, primera Base Polar Nacional (situada debajo del Círculo Polar Antártico) significó el inicio de la presencia Argentina en la Antártida Continental y del Ejército Argentino en la Antártida y con ello, un profundo reconocimiento de su geografía por parte de nuestro país. La mítica base fue fundada por el General Hernán Pujato, a instancia del gobierno del general Juan Domingo Perón.
Río Grande.- El 21 de marzo de 1951 el entonces Coronel Hernán Pujato fundaba la pionera base polar y continental San Martín.
Justamente uno de los jefes de esta base en 1993, Alejandro Bertotto, a la sazón Director de Antártida de la provincia de Tierra del Fuego desde 1994 hasta el 2001, realizó un resumen de la epopeya de este puñado de argentinos que fundó esta base situada debajo del Círculo Polar Antártico.
“El 12 de febrero de 1951 la expedición parte del puerto de Buenos Aires, a bordo del buque mercante ‘Santa Micaela’, al mando del Capitán de Ultramar Santiago Farrel, siendo los expedicionarios despedidos por el Presidente de la Nación, Teniente General Juan Domingo Perón y su Gabinete en pleno. Luego de 25 días de navegación, arriban a destino, desembarcando en el islote Barry, en Bahía Margarita. Inmediatamente comienzan las tareas de armado de las instalaciones. El 21 de marzo de 1951 el coronel Hernán Pujato, jefe de la ‘Primer Expedición Científica Argentina a la Antártida Continental’, y su segundo el entonces capitán Jorge Mottet, realizan el acto de fundación de la primer Base Polar del Ejército, bautizándola Base de Ejército General San Martín, hoy conocida como Base San Martín”, resume Bertotto.
Agrega que “durante esa primera invernada los trabajos realizados fueron intensos y demandaron un gran esfuerzo de parte de todo el personal. Con enorme sacrificio, se pudieron lograr todos los objetivos recorriéndose más de 1.200 kilómetros con trineos de perros, sobre esquíes o en vehículos a oruga Weasel. Esta amplia experiencia permitió realizar adaptaciones y modificaciones al equipamiento para las futuras campañas”.
En marzo de 1952 la dotación regresa a Buenos Aires luego de ejecutarse el relevo “bajo difíciles condiciones glaciológicas, que atrapan durante 6 días y causan averías al Transporte ARA Bahía Aguirre”.
Durante esa primera invernada, “el entusiasmo provocado por el éxito inicial impulsa al Poder Ejecutivo a decretar, por iniciativa del mismo Pujato, con fecha 17 de abril de 1951, la creación del Instituto Antártico Argentino, materializándose así otro de los anhelos de Pujato”, destaca Alejandro Bertotto.
“En 1962 tiene lugar una de las travesías más importantes de la historia antártica: ‘La travesía terrestre que unió Base Esperanza y San Martín (desactivada temporalmente en 1960) y de la cuál fue principal protagonista y gestor nuestro querido vecino, ya fallecido, Gustavo Giró Tapper”.
“El 14 de junio Giró Tapper sale de Base Esperanza con el Grupo Principal de la Patrulla, a sus órdenes. Un mes después se junta con el Grupo Avanzado (comandado por Roberto Oscar Sosa) en la Base conjunta Matienzo (que operaba en el terreno desde febrero)”, explica el antártico.
“La marcha hacia el sur se reinicia el 23 de julio, llegando a destino el 25 de agosto. Finalmente, el 18 de septiembre emprenden el regreso, arribando a la Base Esperanza el 24 de octubre, luego de haber recorrido más de 2.000 kilómetros sobre un terreno escarpado, peligroso y en el riguroso invierno antártico (noche polar), y habiendo cruzado el Antartandes, que le presentaron -según testimonio del propio jefe de la patrulla -‘…dificultades muy superiores al asalto triunfal al Polo Sur Geográfico’, en donde también participó con gran actuación”.
“San Martín, es la primera Base del Ejército Argentino en la Antártida, ya que fue fundada el 21 de Marzo de 1951 por el entonces Coronel Hernán Pujato. La creación de esta Base, que por tiempo fue una de las más australes del mundo, constituyó el jalón occidental de los reclamos de soberanía argentina en el continente y respondía a la necesidad de la Nación de reconocer una de las áreas más alejadas de la Antártida y ejercer allí su soberanía con la primera estación, al sur del Círculo Polar y sobre el continente propiamente dicho. Desde esa pionera base, se hicieron las primeras travesías argentinas de mediano y largo alcance”, resaltó Bertotto.
San Martín está ubicada en el islote Barry, en el corazón de la Península Antártica, a los 68º 07′ S y 67º 06′ W. El Islote Barry, (Caleta Sanavirón, Paso Mottet) forma parte de los Islotes Debenham (Bahía Margarita, Costa Fallieres), situados próximos al Mar de Bellinghausen. El islote Barry se encuentra separado de la Península Antártica por un pequeño canal de unos 30 metros y se comunica con la misma por un puente colgante de tres cables, que nos dirige a lo que es el lugar elegido por Pujato para que sus restos descansen en paz”.
La Base cuenta con el Laboratorio San Martín (LASAN) del Instituto Antártico Argentino y una estación meteorológica con personal del Servicio Meteorológico Nacional.
Las actividades científicas que se desarrollan en la base son: Estudio del campo magnético. Comportamiento de la ionósfera. Estudio de silbidos atmosféricos.
Análisis de ruidos cósmicos. Estudios glaciológicos. Meteorología.
“La cantidad de miembros que integran la dotación anualmente es variable, oscila entre las 17 y 23 personas. Entre éstas se cuenta con personal logístico en sus diferentes especialidades, que está a cargo del apoyo técnico, con dos observadores meteorológicos de la Fuerza Aérea y con el aporte de científicos del Instituto Antártico Argentino”, explicó el ex Jefe de la Base San Martín.
Alejandro Bertotto entendió que “la importancia de su existencia reside en que es la primera instalación argentina ubicada debajo del Círculo Polar y en que se conecta, por modo terrestre, marítimo (parcialmente) y aéreo con el resto de las instalaciones antárticas”.
Asimismo, “es muy relevante porque permite el control de la parte central de la Península Antártica y porque es la estación permanente argentina más occidental del Territorio Antártico y está en la zona de superposición de reclamos con Chile y el Reino Unido. Asimismo, su trascendencia deviene también de su ubicación contigua al cordón montañoso de la Península Antártica (Antartandes) en el que se ha localizado cobre y en el que se espera encontrar otros minerales metalíferos”.
La provincia de Tierra del Fuego ha instalado en el año 1995, en la zona de los glaciares aledaños a la base San Martín, en el marco del proyecto científico ‘Perito Moreno’, bajo convenio firmado con el Instituto Antártico Argentino y la Universidad de Friburgo Alemania, el primer establecimiento fueguino en la Antártida, constituido por el Refugio Antártico ‘Ona’, construido y diseñado íntegramente en la provincia.
Además, “la Base cuenta con la Plaza Histórica, que es el lugar en el que se hallaba emplazada la originaria Base San Martín (primeras edificaciones), y con el Mausoleo en el Islote Bárbara, donde descansan las cenizas del Gral. Pujato y su esposa, como también de Gustavo Giró Tapper y del Capitán de Ultramar Santiago Farrel”, concluye Alejandro Bertotto.
