El ingeniero Ricardo Chacra, uno de los propietarios de Roch, explicó las razones del desabastecimiento que se anuncia para los meses de invierno, fundado en la guerra Rusia-Ucrania pero también en la desinversión del país en infraestructura, porque “el recurso está”, aseguró. Los problemas tienen componentes macro por el contexto mundial, pero también se originan en la falta de divisas del país para hacer frente al aumento de costos. Se estarían acelerando los tiempos para construir un gasoducto que debió comenzarse el año pasado, desde Neuquén a Salliqueló, dado que hay gas suficiente en Vaca Muerta pero no hay cómo trasportarlo. El gasoducto San Martín, que cruza el Estrecho de Magallanes, sí tiene capacidad para transportar más gas, pero no hay inversiones en la provincia y no se cuenta con recurso disponible. No obstante se analiza un convenio con Chile para enviar gas desde Neuquén y que parte de lo que importa en barcos el país vecino ingrese a Tierra del Fuego para ser inyectado por el gasoducto. También se apunta a obtener los excedentes de Bolivia que no va a requerir Brasil, donde han hecho un importante desarrollo en energía hidráulica.
Río Grande.- El ingeniero Ricardo Chacra, uno de los propietarios de la empresa Roch, habló sobre el riesgo de desabastecimiento advertido desde el sector privado y desde el gobierno nacional, con la posibilidad de cortes programados de energía para los meses de invierno. “Todos sabemos que estamos escasos de reservas y el tema se complicó con la invasión de Rusia a Ucrania, por la disponibilidad de gas para Europa y el mundo. Por las restricciones impuestas a Rusia, varios países dejaron de comprarle gas y lo buscan en otros lugares. El precio del GNL, el gas natural líquido que llega en barcos, comenzó a tener un aumento considerable. El año pasado, para las importaciones que se hicieron para Argentina, el precio oscilaba entre 8 y 15 dólares el millón de BTU. En este momento las operaciones están en 40 dólares el millón de BTU y Argentina es un importador de GNL. Lo necesita para el invierno porque la producción del país no alcanza a satisfacer la demanda de gas para generación eléctrica, para uso residencial y para la industria”, dijo a Radio Universidad y Provincia 23.
“En invierno el consumo aumenta sustancialmente y por eso se importaba gas y se completa la demanda con GNL que llega por barco. El presupuesto preveía importar a los valores anteriores y hay un aumento muy grande de la necesidad de dólares para pagar ese gas. El año pasado el gasto total orilló los 10 mil millones de dólares para subsidiar la energía completa y este año se supone que vamos a andar en los 15 mil millones más, sólo para subsidiar la energía, tomando como referencia un precio de 38 a 40 dólares el millón de BTU, que se puede disparar, porque hubo ventas a 100 dólares el millón de BTU”, advirtió.
Sobre la posibilidad de reemplazar gas natural para la generación eléctrica por otro combustible, explicó que también surgen inconvenientes por falta de gasoil. “Hay usinas que pueden pasar a gasoil y comienza a haber un aumento de demanda de este combustible, y también hay aumento de la demanda de fuel oil, que usan algunas usinas. Argentina siempre fue importadora de gasoil porque todo el petróleo que procesan las refinerías argentinas no alcanza para generar el gasoil que se necesita para la industria, los camiones, los barcos y todo lo que se mueve con este combustible. Al haber más demanda, tenemos que importar más gasoil. En Argentina las naftas y productos refinados normalmente se exportan, y entre la exportación de estos productos y la importación de gasoil, el país salía hecho. Ahora la importación de gasoil aumenta mucho más porque falta gas y es reemplazado por gasoil”, sostuvo.
Problema de desinversión
Chacra afirmó que “si Argentina tuviese la infraestructura necesaria para transportar gas, lo podría producir. Hay gas suficiente en Neuquén, en la formación Vaca Muerta, pero los caños que salen de Neuquén para alimentar al país no alcanzan para la cantidad de gas que se necesita. Hay gas, pero no hay forma de transportarlo, por eso se está hablando del gasoducto que sale de Neuquén y va a Salliqueló, que se tendría que haber hecho el año pasado, para tener disponible el gas de Vaca Muerta, porque hoy no hay lugar en el caño”, expuso.
“El gasoducto que va desde Tierra del Fuego y cruza el Estrecho de Magallanes puede transportar más gas, pero el problema es que no lo tenemos en la isla. No está disponible porque hay que hacer inversiones importantes en el desarrollo de los yacimientos off shore. Suponiendo que se desarrolle Fénix, no creo que antes de los dos años tengamos ese gas disponible, y serían por lo menos 10 millones de metros cúbicos”, estimó.
Hoy está ocurriendo que un camión que lleva gasoil para llegar a Santa Fe puede que quede varado porque no tiene gasoil para regresar. “Estamos con ese problema y, si el camión lleva 25 mil litros de combustible tiene que llevar para él mismo, tomar para el camión y entregar menos. La situación está bastante compleja, se están buscando soluciones, se llamó a licitación para el gasoducto a Salliqueló y en este momento se está negociando con Chile la posibilidad de entregarle gas de Neuquén, habilitando alguno de los gasoductos que se usaban antes, y que Chile nos entregue gas que está importando desde barcos por el sur, para mandarlo eventualmente por el gasoducto San Martín. No sé si la negociación va a ser exitosa o no. Otra negociación se está haciendo con Bolivia por los excedentes de gas que no tomaría Brasil, porque ha mejorado mucho la producción hidráulica de energía en ese país. Brasil tendría un excedente de gas que compraba a Bolivia y eso se está negociando para Argentina, pero no sé cómo se está cerrando. Esto aliviaría un poco el faltante y la importación por barco, que va a demandar muchísimo dinero, porque es en dólares”, dijo.
Un mal evitable
A lo largo de los años se pudo haber resuelto la situación y haber ahorrado en importaciones, pero no se hizo por falta de inversión. “Ese es un mal endémico en la Argentina, porque no se hacen las obras, que son en pesos, no en dólares, y haría mucho más fácil todo, porque el recurso lo tenemos”, reiteró Chacra.
En cuanto a las inversiones de la empresa a su cargo, informó que “acabamos de perforar el primer pozo en el yacimiento San Martín y estamos en el proceso de terminación. El otro pozo es horizontal, dirigido, en la zona de Las Violetas, y ayer terminamos de perforar el piloto para poder hacer la derivación al horizontal. Apareció petróleo en el yacimiento San Martín pero todavía no lo tenemos totalmente evaluado”.
También dio a conocer los avances para sacar el recurso por la boya de Total. “Se está construyendo la primera parte de los 9 kilómetros desde río Cullen de Roch hasta río Cullen de Total. Los estudios preliminares ya se hicieron y se está preparando toda la parte de obra para comenzar. Calculamos que, para junio o julio, dependiendo del clima, vamos a tener la terminal de Total operativa para nosotros. Vamos a poder sacar la producción por la boya de Total, que es la única en la isla y también implica una cuestión económica importante porque antes, teniendo dos boyas, los costos eran muy altos”, concluyó.