La Ministro del Superior Tribunal de Justicia de la provincia y presidente de la JUFEJUS de la Argentina, doctora María del Carmen Battaini aseguró que la ampliación de la Corte Suprema de Justicia “es un tema sumamente complejo” y entendió que “no hay una única solución”. Sin emitir ninguna valoración, observó que este tema tiene un fuerte sesgo de decisión política “y en lo que hace a lo constitucional, procedimental y tecnológico, se podía probar fórmulas que evitaban ampliar el número de integrantes del máximo tribunal del país”. Sopesó diferentes modelos de gestión pero por sobre todo, entendió que el paradigma “pasa por una justicia abierta y por la digitalización”, que justamente fueron los dos temas centrales del Foro Justicia de la 9° Cumbre de las Américas del que participó la magistrado fueguina.
Río Grande.- La doctora María del Carmen Battaini, ministro del Superior Tribunal de Justicia de la provincia y presidente de la JUFEJUS de la Argentina, fue consultada por FM La Isla sobre la ampliación de la Corte Suprema d Justicia de la Nación y compartió que “es un tema sumamente complejo” dijo y evaluó que “no hay una única solución”.
Recordó que “lo hemos tratado y hablado muchísimo durante la época de la pandemia (2020) cuando trabajamos en el Consejo Consultivo y allí habíamos dado algunas recomendaciones con integrantes de distintas áreas, académicos, juristas, magistrados y abogados y cada uno tenía una solución diferente y cada uno tenía su razón”.
En ese sentido comentó que “había constitucionalistas famosos y tampoco ellos coincidían entre sí sobre qué fórmula respetaba la Constitución y qué fórmula respetaba también las leyes que, justamente, son consecuencias de esos mandatos constitucionales”.
Sobre este punto memoró que “juntos con las doctoras (Hilda) Kogan e (Inés) Weinberg, después de haber hecho -pese al poco tiempo que tuvimos- el estudio estadístico sobre causas ingresadas y resueltas y qué tipo de causas ingresaban, dimos unas cuantas directivas y algunas ideas, una de ellas era no crear un tribunal intermedio -que era una de las propuestas- porque considerábamos que lesionaban totalmente las autonomías provinciales, por eso no estábamos de acuerdo y finalmente naufragó. De hecho hubiera hecho que las causas se dilataran más en el tiempo”.
Otra de las sugerencias que brindaron las integrantes del Consejo Consultivo para el Fortalecimiento del Poder Judicial y el Ministerio Público “fue apostar a la tecnología, a la inteligencia artificial que tienen nuestros laboratorios en la UBA (Universidad de Buenos Aires), de hecho Juan Gustavo Corvalán con ‘Prometea’ logró una reducción de causas en Colombia, sacando del medio todo aquello que ya tenía un precedente y bajó muchísimo el número de ingresos”, valoró.
Justamente ‘Prometea’ es el primer sistema de inteligencia artificial diseñado y desarrollado por el Ministerio Público Fiscal de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires en conjunto con este laboratorio de la UBA.
La doctora María del Carmen Battaini abundó que “lo que nosotros medíamos era la posibilidad de eficiencia y eficacia y en ese sentido no pasaba por el aumento de integrantes de la Corte, sino que pasaba por alguna modificación de procesos”.
Entendió que esta discusión sobre la ampliación de la Corte marcaba los límites de lo jurídico de lo político “porque una cosa son los temas políticos que obviamente una no se mete porque cada Poder tendrá sus razones; pero en lo que hace a lo constitucional, procedimental y tecnológico, se podía probar fórmulas que evitaban ampliar el número de integrantes de la Corte Suprema de Justicia. Eso no quiere decir que sea desacertado, lo sabrá la política en función de las razones que tenga que dar”, entendió.
Aclaró que “no emito juicios valorativos, pero considero que la solución puede pasar por otro lado”.
La propuesta en boga es ampliar el máximo tribunal integrándolo con un representante por cada provincia y CABA, lo que elevaría ese número a 24 miembros y sorprendió que no se hablara de una ampliación más modesta, aunque Battaini no se mostró sorprendida “porque si vamos al derecho comparado, hay cortes hasta con 26 miembros, pero hay que ver cómo funcionan y cómo se organizan esos ‘cortesanos’ para que puedan dar respuestas en tiempos razonables”, insistió.
La integrante del STJ explicó cómo funciona la Corte Suprema de Justicia. “Ingresa una causa, la misma se revisa y a lo mejor se le pone una plancha y sale fuera del circuito, pero tiene que pasar por los ministros que ahora son cuatro pero en su momento fueron cinco; es decir: esa causa pasar primero por una vocalía que es sorteada, después por una segunda, por una tercera y por una cuarta. Son cuatro pasos de estudio, de evaluación y de decisión para que después pase a la reunión plenaria o al acuerdo y se pueda emitir una sentencia”.
A todo eso hay que sumar “todo el derrotero previo que tuvo una causa que llegó al máximo tribunal, ha tenido una primera instancia, la cámara (alzada), el Superior Tribunal (provincial) y después, el Recurso Extraordinario que corresponda”, dijo Battaini.
Agregó que “hay que imaginarse que si este sistema se sigue aplicando en una corte federal ampliada a 24, 25 ó 30 miembros, sería muy engorroso y dilataría la resolución de la causa en el tiempo, se me ocurre pensarlo así, que hay reorganizarlo”, concedió.
Otros términos de discusión son la Paridad de Género y los mecanismos de selección de los jueces provinciales que integrarán esta hipotética corte nacional ampliada. “Esos son temas que tienen que ser tratados y no sabemos a ciencia cierta quién lo tendrá que decidir; lo tendrá que resolver la ley o el documento -entiendo que debe ser una ley- que habilite esa ampliación y aquí surge otra incógnita, si se puede por una ley modificar la composición de una corte, estimo que sí porque ya se ha hecho, cuando se elevó a nueve integrantes, aunque después disminuyó por renuncias y fallecimientos y también cuando a través de una ley se estableció que fueran cinco miembros, tema que no es menor porque eso también hace a las mayorías a la hora de emitir una sentencia. Una corte de cinco, con tres votos coincidentes, ya se conforma un fallo; en una corte de nueve, se logra con cinco y en una de veinticinco o veintiséis se lograría con más de trece o 14 miembros con votos coincidentes”.
Observó que las decisiones de la Corte “no pasan por si gustan o no, sino por los fundamentos, aunque no guste el argumento, está fundado y es razonable”.
Consultada si tiene alguna preferencia por algún modelo de corte, la Dra. Battaini explicó que algunas cortes funcionan por salas (cada una con una especialidad determina, por ejemplo, en derecho penal, civil o administrativo). “Supongamos que en una sala se logre un acuerdo unánime o mayoritario, pero en otros casos no logran acuerdo; porque para que haya acuerdo no necesariamente significa la unidad de criterio, que sean tres decisiones iguales, sino que tiene que haber argumentos, por lo menos un argumento igual en todos aquellos que deciden, no es tan sencillo”.
Añadió que “en estas cortes que funcionan por salas también existe el plenario, lo que quiere decir que una vez que decidan las salas pasaría al plenario; es decir, todo va a depender del proceso que se regule en función de una cantidad de miembros superlativa, lo que además debe ser asimismo regulado”.
Participación en la 9° Cumbre de las Américas
Justamente Battaini participó del Foro Justicia en el marco de la 9° Cumbre de las Américas “y todo el mundo está hablando de acceso a la justicia y de digitalización y si bien no son sinónimos, la digitalización atraviesa, es una competencia transversal que coadyuva justamente en los tiempos. La pandemia nos dio el ejemplo, sino hubiera sido por la digitalización, muchísimas causas estarían en el aire, no se podrían resolver, sin embargo la tecnología nos permitió dar respuestas y por lo tanto hay que seguir trabajando en la digitalización y también sobre justicia abierta, que fueron los dos temas centrales de este foro”, apuntó.