El jefe de gabinete de la Municipalidad de Ushuaia, Omar Becerra, participó en el acto organizado por al Área Naval Austral por un nuevo aniversario del fallecimiento del comodoro de Marina Augusto Lasserre, fundador de la ciudad de Ushuaia.
Ushuaia.- El funcionario estuvo acompañado por el subsecretario de Asuntos Laborales y Gremiales, Leandro Manfredotti, y por la subsecretaria de Vinculación Institucional, María José Calderón.
Tras recordar que Lasserre, al mando de la División Expedicionaria al Atlántico Sud, fundó en 1884 la Subprefectura de Ushuaia, Becerra apuntó que “fue un hecho histórico fundacional de nuestra ciudad que no solo estableció la presencia argentina, sino también marcó estratégicamente las bases de la soberanía nacional en estas latitudes”.
Mencionó también que “su figura es sin dudas una de las más relevantes para nuestra ciudad; el 12 de octubre de 1884 ordenó arriar la bandera británica que flameaba en la misión anglicana a cargo del reverendo Thomas Bridges e izar la bandera argentina, acontecimiento icónico de la fundación de nuestra querida Ushuaia”. Y agregó que “su misión incluyó también la supervisión de la construcción de los primeros edificios públicos, entre ellos el de la Subprefectura, y la colocación de balizas para la navegación”.
Por último, Becerra expresó que “desde la gestión del intendente Walter Vuoto rendimos homenaje a la memoria del comandante Lasserre y a través de su figura a la Armada Argentina, institución ligada al desarrollo y crecimiento de nuestra ciudad”.
El uruguayo que fundó Ushuaia
Augusto Lasserre nació en Montevideo en 1826 y a la temprana edad de 14 años participó a en la defensa de su ciudad natal contra el sitio de Oribe; era sobrino del Almirante Francisco José Seguí. Hacia 1845 viajó con su familia a Francia, donde cursó sus estudios en el Liceo Naval de Souriolt.
Cinco años más tarde regresó directamente a Buenos Aires, donde se enroló como Subteniente de Artillería en la fragata ‘25 de Mayo’, bajo bandera argentina y con la firme convicción de defenderla, para luchar contra Montevideo y contra los franceses. Poco después se firmó la paz con Francia y fue destinado a un posible bloqueo a Montevideo; pero éste se levantó a mediados del año siguiente, con la rendición de Oribe ante Justo José de Urquiza.
Augusto Lasserre pasó entonces a formar parte del Ejército Grande de Urquiza, en la flota que apoyó el avance hacia Buenos Aires; fue incorporado a la flota de la provincia de Entre Ríos y luego a la Escuadra de la Confederación Argentina, pero no participó en la Batalla de Caseros. Luchó contra el Estado de Buenos Aires y en 1853, a pesar de haber mantenido sus principios, fue dado de baja de la flota.
Se reincorporó poco más tarde a la flota confederada, con el grado de Capitán. En octubre de 1859 fue uno de los jefes de la flota federal en la Batalla de Martín García, donde fue gravemente herido. Fue ascendido al grado de Mayor y poco después a Teniente Coronel. Con ese grado, y al mando de un vapor, luchó contra la escuadra porteña que acompañaba a Bartolomé Mitre en su avance hacia la Batalla de Pavón. Algún tiempo después de esa batalla, cuando el Gobierno de la Confederación fue disuelto, Mitre ordenó su baja.
Los años siguientes se dedicó a la navegación. Aun estando fuera de las contiendas y dedicándose a la actividad privada como marino mercante, durante muchos años Lasserre formó marinos que, posteriormente, fueron de mucha importancia para las luchas por la soberanía de nuestra República y que sirvieron en la Armada Argentina. Hizo varios viajes a la Patagonia, entre los cuales el más destacado fue el que realizó a las islas Malvinas en 1868, publicando luego un importante trabajo descriptivo de las mismas. En octubre de 1874 fue reincorporado a la Armada Argentina, para sofocar la revolución porteña que tuvo lugar ese mismo año dirigida por Mitre, apresando el único barco de guerra que le quedaba a éste. Lasserre estaba al mando de los vapores “Pampa” y “Almirante Brown” y por su mérito fue ascendido al grado de Coronel de Marina.
Lasserre marcaría para siempre la soberanía en las tierras del Sur, cuando en 1884, comandando una expedición de seis buques a Tierra del Fuego e Isla de los Estados, desembarcó en la Bahía Ushuaia, donde se encontró con el reverendo Thomas Bridges en la Misión Anglicana instalada junto a unos 350 pobladores yamanas.
Luego de la reunión entre Lasserre y Bridges, el Pabellón nacional fue izado para siempre, marcando un hecho determinante de soberanía argentina en esas tierras.
Posteriormente, realizó tareas de balizamiento para mejorar la navegación en la zona y construyó varios edificios públicos, entre ellos, la Subprefectura -antigua denominación de la base naval de la Armada Argentina-, constituyéndose estas primeras acciones de soberanía como evento fundacional de la ciudad de Ushuaia.
El ejercicio de los derechos soberanos sobre este territorio fue comunicado y aceptado por el Gobierno chileno, en un viaje de Lasserre tiempo después a Punta Arenas.
Como parte de su extensa carrera, trajo de Europa al crucero acorazado ‘Patagonia’ y, retirado desde 1894, se dedicó a diseñar un bote salvavidas insumergible que fue probado con éxito y patentado en nuestro país, Estados Unidos de Norteamérica y Francia. El 20 de septiembre de 1906, luego de ser Jefe de la Segunda División Naval en Puerto Belgrano y mientras ejercía el cargo de Vocal del Consejo Superior de Guerra y Marina, falleció en la ciudad de Buenos Aires.