El secretario general de SETIA, Mariano Tejeda, consideró la propuesta de la Federación Argentina de Industrias Textiles de subsidiar a los trabajadores fueguinos como “una falta de respeto a la provincia y al ser humano”, y lo enmarcó en los dirigentes que “piensan que la Argentina termina en la General Paz”. Reclamó que se tomen decisiones políticas con firmeza para defender los puestos de trabajo y la industria en general, ante un ataque que no apunta sólo a las textiles sino a toda la industria promocionada. Afirmó que los gremios han hecho todas las gestiones posibles en todos los niveles de gobierno y, “en esta cadena de responsabilidades, nada tienen que ver los trabajadores, por eso hoy hay que sentarse como corresponde, agarrar la lapicera y poner lo que hay que poner para que todos los trabajadores gocen de la 19640”.
Río Grande.- El secretario general de SETIA, Mariano Tejeda, fue consultado por Radio Universidad 93.5 y Provincia 23 sobre las declaraciones del contador Ramón Gallardo, que reveló la propuesta de la Federación Argentina de Industrias Textiles de subsidiar a los trabajadores fueguinos, a cambio de que no se prorroguen los beneficios promocionales.
“No deja de ser más de lo mismo. Es una falta de respeto hacia la industria textil particularmente y es parte de la intención de algunos dirigentes políticos que creen que la Argentina termina en la General Paz. Hay un montón de provincias totalmente pujantes y productivas, como es el caso de Tierra del Fuego. Hace poco más de un año se logró la prórroga del subrégimen industrial y todavía está en veremos la industria textil, pero este ha sido el motor para que muchas industrias se hayan radicado en la provincia. No tengo ninguna información de lo que dijo el contador Ramón Gallardo, y tampoco es clara, porque en la industria textil existen dos cámaras representativas, una es la FAIIA, que es la Federación Argentina de Industria Indumentaria y Afines, y representa a las empresas de indumentaria o confeccionistas; y la otra es la FITA, que es la Federación Argentina de Industrias Textiles. Creo que mezcla las dos cosas y no deja de ser pescado podrido lo que se pueda decir desde esta Federación o este núcleo de empresas que pretenden pagarle el sueldo a un trabajador para que se vaya a trabajar al norte, o subsidiarlo para que no tenga que trabajar y cobre un sueldo. Es una falta de respeto a la provincia de Tierra del Fuego, y una falta de respeto al ser humano, al trabajador y la trabajadora, porque el trabajo dignifica y trabajar dignamente es lo que todos queremos”, sentenció.
“Este lobby empresarial pretende distintas medidas para socavar la 19640 hasta dejarla sin efecto, y la provincia debe defenderse desde su arco político, desde los sectores empresariales fundamentalmente. Así como hay un lobby de empresas del norte, hay que hacer lo que corresponde en términos políticos y empresariales para defender nuestras industrias, como lo hacemos los representantes de los trabajadores. Nosotros estamos defendiendo una posición muy clara en favor de las fuentes de trabajo de Tierra del Fuego”, afirmó
Falta de insumos para producir
En cuanto a la falta de acceso a insumos por la escasez de dólares, dijo que “es algo de larga data. Nosotros hemos propiciado reuniones en el ámbito gubernamental tanto provincial como nacional con las mismas empresas, y no deja de ser uno de los grandes problemas de la industria del país en general. Hay recursos de amparo que se han presentado y esta es una solución política. Se deben atender las necesidades del empresario para poder producir, pero por sobre todas las cosas hay que poner a los trabajadores. En Tierra del Fuego hay más de mil trabajadores que dependen en forma directa de esta industria y se necesita que las empresas sigan produciendo y que los trabajadores puedan conservar el trabajo que en muchos casos tienen hace muchísimo tiempo”, pidió.
Fuera de la prórroga
Se le preguntó si tuvo algún contacto con la Ministra de Producción o a nivel nacional con José De Mendiguren, porque no hay avances para las textiles. “Los gremios hemos trabajado desde el momento en que se conoció la decisión de discriminar a la industria textil y empezar a analizar anomalías que pudo tener alguna, después se supo que eran una o dos, pero hay un relato claro al ponerse en tela de juicio a todas las empresas que están en la provincia. Tanto los gremios de AOT, SOIVA y SETIA hemos hecho todo lo posible, nos hemos reunido con Ariel Schale en la época de Kulfas, y hemos vuelto con las carpetitas ante los cambios de ministros a solicitar otra vez lo mismo. De Mendiguren tiene el tema sobre la mesa, pero no solamente estamos hablando de una prórroga para la industria textil, igual a la del resto, sino que hay que atender los ataques de dirigentes políticos que pretenden dejar sin la 19640 a la provincia de Tierra del Fuego. Tenemos un tema particular que es Australtex. En nuestro caso estamos trabajando y ahora viene un período vacacional. Entendemos que se va a volver a trabajar de forma normal. Las otras empresas siguen produciendo y la incertidumbre nos alcanza a todos”, dijo.
Recordó que “Australtex hoy tiene unos 230 trabajadores, desde que empezó a trabajar al 100% luego de haber reconstruido la empresa. Es la que tiene más personal y hay empresas muy antiguas. En Australtex la mayoría de los trabajadores son de AOT, luego está Textil Río Grande que tiene más de 30 años de antigüedad, Fabrisur también. Todas tienen un promedio de 30 años produciendo en Tierra del Fuego. Son once las empresas radicadas en la provincia y se sabe que solamente una hizo las cosas mal. Es una falta de respeto generalizar, cuando la mayoría hizo las cosas bien. La culpa no es solamente del chancho, porque han pasado gobiernos de todos los colores y la institución que debe controlar a las empresas es el propio Estado. Hay un montón de actores que han pasado a lo largo de 40 ó 50 años y no se puede discriminar a toda la industria textil por una sola empresa. Creo que hay una animosidad y no hay que tener miedo a plantearlo, porque uno representa a los trabajadores. Los empresarios y los gobiernos tienen que bregar para que las industrias estén produciendo y trabajando, y por todos los trabajadores que dependen de ellas para llevar el pan a su casa. Si hay cosas que no se controlaron, si hay manejos espurios que van en detrimento de la prórroga que debería alcanzar a la industria textil, en ningún caso ha sido responsabilidad de los trabajadores. Esto tiene que ser una decisión política, y no una salida como la que planteó Carrió en su momento, de pagarle 300 mil pesos a los trabajadores para que se queden en su casa. Es una falta de respeto y lamentablemente hay gente que escucha a estos dirigentes que pretenden hacer política, pero nunca le han llevado nada bueno al pueblo”, cuestionó.
“Desde que entró en vigencia la ley hubo distintos recortes y en algún momento tiene que terminarse la tibieza de parte de los responsables de que esto haya sucedido o que se haya permitido que sucediera. No es solamente el caso de la industria textil sino de la electrónica, los plásticos, porque hay un montón de trabajadores y trabajadoras del ámbito público y privado que dependen de la 19640. Lamentablemente siempre caemos en el dicho de que dios está en todos lados, pero atiende en Buenos Aires, y en un escritorio de Buenos Aires no se puede definir el destino de Tierra del Fuego, por eso hay que poner lo que corresponde desde el sector político, porque este es el momento. Tenemos un drama institucional que se vive desde Jujuy a Tierra del Fuego y, si en un año cambiamos y volvemos para atrás con un gobierno como el de Macri, poca vida le va a quedar a la industria de Tierra del Fuego. Ya sabemos lo que pasó entre 2015 y 2019 porque se perdieron más de 20 mil puestos de trabajo en la provincia, directos e indirectos”, advirtió.
“Esta prórroga se produjo durante el gobierno de Alberto Fernández, a quien le entregamos un petitorio y tuvimos un desacuerdo con Matías Kulfas por lo que hizo. En esta cadena de responsabilidades nada tienen que ver los trabajadores, por eso hoy hay que sentarse como corresponde, agarrar la lapicera y poner lo que hay que poner para que todos los trabajadores gocen de la 19640. Hay que dejar de manosear la ley, porque la toca cualquiera, y es el respaldo para que cada trabajador de la provincia pueda desarrollarse sin temor de que cuando cambie el gobierno vuelva a tocar la ley y deje en peligro a todo el ámbito de trabajo de la provincia”, expresó.
“Tierra del Fuego puede tener su sustento y su viabilidad bajo el amparo de la 19640, y eso no le mueve la aguja a ninguna provincia del continente. Es mentira que se ponen en riesgo los puestos de trabajo en otras provincias. La ley debería ser eterna e intocable, para no estar discutiendo esto”, dijo.
Gremios unidos
Con respecto al respaldo del resto de los sindicatos, indicó que “hace un mes hubo una reunión importante entre las tres organizaciones sindicales con el gobierno de la provincia y se sigue trabajando todo el tiempo. Se formó una comisión de gremios industriales donde está ASIMRA, UOM, los plásticos, los compañeros Camioneros y nosotros, haciendo fuerza para revertir esta situación. En todas las textiles hay más del 85% del personal que es efectivo, con una gran experiencia, y hay que poner en valor eso porque son parte del motor de la economía de Tierra del Fuego. Contamos con varias organizaciones sindicales que están trabajando día a día, pero las decisiones políticas se tienen que tomar en función de cuidar el trabajo y la industria, si no, el hilo siempre se corta por lo más delgado, que son los trabajadores. Queremos un equilibrio para que cada trabajador pueda ir tranquilo a cumplir con su tarea”, concluyó.
