El ex vicegobernador durante las dos primeras gestiones como provincia, Miguel Ángel Castro, dio su visión de la realidad fueguina y planteó la necesidad de elaborar un plan básico de gobierno que sea compartido con las municipalidades, para evitar la duplicidad de funciones. Con la convocatoria a elecciones para el 14 de mayo, observó que no hay proyectos presentados de parte de los partidos políticos, cuando faltan menos de tres meses. Si bien sigue perteneciendo al MPF, reconoció que el partido ha sufrido lo mismo que otros, que es el fin de las ideologías, y cuestionó que se personalicen los candidatos. Respecto de la gestión Melella, no la ve bien porque se gasta más de lo que entra, no hay un plan de gobierno claro y se ha optado por la emisión de títulos para hacer frente a las acreencias.
Río Grande.- El ex vicegobernador del primero y segundo gobierno provincial Miguel Ángel “Lito” Castro, también convencional constituyente provincial, visitó los estudios de Radio Universidad 93.5 y Provincia 23 e hizo un análisis de la situación fueguina además de recordar algunas medidas de su gobierno.
Recordó que antes de ser electo en el cargo, trabajó en el Banco Nación, que está pronto a cumplir 80 años, también como locutor en Canal 13 y en radios, y por “un accidente de la vida terminé en la política, pero no soy político de alma. Estudié mucho para tratar de entender, y recibimos la provincia con acreencias de Nación y acreencias del Territorio. Nosotros hablamos de federalismo, pero no existe en la Argentina porque todo se decide en Buenos Aires, y se tuvieron que recibir los 160 millones de dólares”, dijo de la negociación de la deuda, a lo que se opuso en su momento Luis Augsburger como Fiscal de Estado y derivó en su renuncia, porque el monto adeudado era mucho mayor.
En cuanto a los pasos a seguir en el marco del proceso electoral, expresó que “hay que hacer un plan de gobierno, y eso conlleva un plan económico. Nunca se debe gastar más de lo que ingresa y el problema que tiene la provincia es que no se cumple la Constitución, que habla de presupuestos por programa”.
También dio relevancia al diálogo con la oposición, teniendo en cuenta que en el segundo mandato hubo una entrega anticipada del gobierno al entonces electo Carlos Manfredotti. “Siempre se dice que el que pierde acompaña, pero esto no se cumplió y se debió entregar el detalle de las cuentas como estaban. En esto nos equivocamos”, sostuvo.
Lo mismo ocurrió con la transición entre el gobierno de Bertone al de Melella y, a pocos meses de las elecciones “prácticamente no hay candidatos. El gobernador ha convocado para el 14 de mayo y me pregunto qué partido está haciendo campaña, a menos de tres meses de las elecciones. Quizás hay candidatos para cargos menores, en la Legislatura o el Concejo Deliberante, pero no se conoce un plan de gobierno, para que se ordenen las finanzas”, dijo.
“Nosotros luchamos para terminar con la duplicidad de funciones, en Deportes, en Turismo, en Salud. El gobierno y el municipio de Río Grande hacen centros de salud, están haciendo gimnasios por todos lados, municipales y provinciales, pero debería mejorarse el uso del recurso económico y planificar. Tendría que haber un plan básico y general de gobierno, compartido con las municipalidades, y los partidos políticos se tendrían que juntar con los mejores técnicos y profesionales idóneos, con organizaciones no gubernamentales, y hacer un plan de gobierno, porque hay que planificar Tierra del Fuego. Ver hacia dónde va a ir la ciudad de Río Grande, si hacia el norte o hacia el sur, y dónde tenemos que extender los servicios”, señaló.
“Nadie habla de la Cooperativa Eléctrica, que es un ente insuficiente económicamente y siempre depende de la provincia. Se habla de energía eólica pero no se sabe nada; en cambio en Chubut ya están haciendo un parque eólico”, citó como ejemplo de la falta de planificación.
“Los que fuimos convencionales constituyentes visualizamos una provincia enmarcada en la Constitución, que nos marca el camino a seguir, y por eso hablamos la subsidiariedad del Estado en la parte económica. Esto significa que el Estado no interviene en la inversión, sino que lo hace el privado. Sin embargo, la Municipalidad está con un criadero de pollos compitiendo con el privado. Está bien porque por un lado se está fomentando algo genuino acá, pero sabemos que no es real y no va a durar en el tiempo, porque significa mucha inversión y va a ir subiendo el costo. Tenemos que aprovechar lo que realmente tenemos, el gas, fomentar una petroquímica, un buen puerto como el que queríamos hacer y lamentablemente la segunda mitad de fondos para terminarlo se malgastó en otra cosa. Hubo intereses de las dos ciudades porque Ushuaia no quiso ni va a querer nunca un puerto activo en Río Grande”, afirmó.
“Hoy hay un reclamo de 100 millones de dólares, no porque Estabillo haya dejado deuda sino porque no siguieron haciendo el puerto. Siendo vicegobernador, yo planteé una petroquímica chiquita. Había una empresa que en su momento puso una destilería container y hacía su propia nafta y su propio gasoil, porque lo que tenía Río Grande no daba abasto. Yo propuse este año en la Legislatura que haga el proyecto Alas de Fuego que había presentado Pérez Companc. Era una destilería container que se iba a instalar en San Sebastián, para tener combustible propio y no depender de los barcos. Después salió el proyecto HIFUSA y yo asumo la autocrítica porque se desvió ese proyecto. Para hacer algo grande hay que comenzar por cosas chicas”, subrayó.
Consultado sobre la empresa provincial Terra Ignis, dijo que “como experiencia, todo lo que es del Estado da pérdidas. Ocurre con Aerolíneas Argentinas, con el Laboratorio del Fin del Mundo. Espero que no sea así esta vez, pero no puedo aceptar por ejemplo que una profesora de inglés sea vicepresidente de Vialidad Provincial. Hay una carrera de ingeniero Vial. Los países que son grandes potencias en el mundo confían en la gente capacitada. Acá se quiso aprobar el secundario con 16 materias previas. No hay planificación y el área de planificación debería ser la mejor de cada gobierno, sea provincial o municipal, y cuando se hacen las campañas políticas hay que entrelazarlas con los municipios”, insistió.
Más gasto público
Asimismo, comparó el presupuesto actual de la Legislatura, de 4 mil millones de pesos, con el que manejó en su momento. “Yo manejaba 14 millones de pesos, que eran 14 millones de dólares, para la misma cantidad de legisladores; teníamos 130 empleados cuando ingresamos y terminamos con 84, y tenía dos asesores”, apuntó, en comparación con los más de 70 de Mónica Urquiza.
“Hay que propender al trabajo en el sector privado, no en el público, y capacitarlos porque no saben qué hacer en una oficina. Nosotros comenzamos con la transformación del Estado público, pero fracasó porque los gremios no aceptaron la necesidad de readecuación de los sectores. Cuando asumí en la Legislatura no existía la informatización, se manejaban con máquinas de escribir y fotocopias; y yo venía del banco donde tenía todo computarizado. Llamé al gremio y estaba Fagúndez en ese momento, para decirle que iba a capacitar al personal porque era la casa de las leyes. Los capacité y a los ocho o nueve meses todos querían su computadora porque era más fácil. Dejamos conformada la Secretaría Administrativa, la Secretaría Legislativa. Acá ya tendría que haber un palacio municipal, porque alquilan por todos lados. Cuando estaba ‘Chiquito’ Martínez le presentamos un proyecto de edificio más el Concejo Deliberante, para dejar de alquilar locales privados, pero todos los días veo una oficina nueva”, cuestionó.
Sin ideología
Castro se definió como “peronista a nivel nacional y vengo de familia peronista. A nivel provincial sigo siendo del MPF, pero el Movimiento sufrió lo mismo que todos los partidos políticos: se terminaron las ideologías. Hoy se personalizan las candidaturas. Nosotros lo primero que hicimos fue presentar el Proyecto de Vida, que había que seguirlo haciendo, pero hoy ningún partido hace eso. Hoy la gente capaz, que ha desarrollado un proyecto en el sector privado, no quiere ocupar un cargo público”.
También criticó la cantidad de funcionarios que son traídos de afuera. “Nosotros quisimos ser provincia para gobernarnos nosotros con gente nuestra, que conociera el territorio. El banco se creó para tener autoridades fueguinas, porque tenemos profesionales fueguinos, pero tuvimos de presidente al contador Pesce que estaba procesado en su momento y venía del Banco Central. Nadie dijo nada”, señaló.
Finalmente se refirió a la situación de la provincia y la actual gestión. “Sinceramente no la veo bien. Ojalá me equivoque. Para poder opinar sobre la gestión del profesor Melella tendría que analizar bien el presupuesto y tendría que haber un plan de gobierno publicado, además nunca gastar más de lo que entra, pero estamos emitiendo títulos para poder pagar acreencias. La obra social está andando mal, la farmacia no tiene medicamentos y la caja de previsión es cambiante todos los días. Espero que dure a través de los años, pero creo que en cualquier momento el jubilado va a tener un ajuste muy grande”, concluyó.