Así lo expresó el obispo Jorge García Cuerva sobre los 10 años del Papa Bergoglio a la cabeza del Vaticano.
Río Gallegos.- Díez años atrás, el miércoles 13 de marzo del año 2013, el Vaticano anunciaba al nuevo Papa que asumiría tras la histórica e insólita renuncia al papado de Benedicto XVI. La fumata blanca que emanaba el Vaticano al grito de ¡habemus papam! marcaba un final, pero también un nuevo comienzo para la iglesia católica, un inicio revolucionario.
De la mano del Papa Francisco -quien es el primer Papa latinoamericano que ha tenido el Vaticano- muchas cosas han cambiado en la iglesia católica rompiendo los ciminetos y dando lugar a aquellos que siempre fueron marginados por la iglesia.
En este marco, el obispo de Tierra del Fuego y Santa Cruz, Jorge García Cuerva, dialogó con el programa de radio El Mediador el cual se transmite por Tiempo FM 97.5 y se expresó sobre los 10 años del papado de Francisco, señalando que este tiempo de pontificado “se puede definir como una etapa revolucionaria de la iglesia en un mundo complejo y un período desafiante para los Argentinos. Tenemos que tomarnos un lapso, leerlo y escucharlo a Francisco y no dejarnos llevar por sus intérpretes ocasionales”.
La figura de Francisco a la cabeza de la iglesia católica trajo consigo rotundos cambios en paradigmas preestablecidos que, en otros años, habrían sido escenarios imposibles de imaginar: “Hubo un gran cambio en su estilo pastoral, la figura del santo padre la teníamos como una figura extremadamente protocolar, que tiene que ver con las tradiciones y costumbres que Francisco rompió desde el primer momento queriendo tener contacto directo con la gente y teniendo gestos simbólicos impactantes. Estos diez años son un enorme compromiso de todos para ver sus pensamientos y concretarlos”, señaló García Cuerva.
Uno de los puntos fuertes que a abordado Francisco a lo largo de su papado es una problemática que, desde sus comienzos, los cardenales habían planteado la necesidad de la reforma de la estructura gubernamental de la Santa Sede y el Papa está generando un cambio muy grande mirando para adentro, estando para evangelizar y «estar al lado de los pobres y tocar la carne sufriente» de los marginados. Por otro lugar, el Papa “ha planteado una encíclica social fuertísima, ya que es la primera vez que se habla sobre el medioambiente, lo que significa para todos el cambio climático y lo que es el cuidado de la casa común. Insiste en trabajar para el cambio por ser una iglesia más abierta y misericordiosa”, remarcó el Obispo.
García Cuerva expresó que, quienes se encuentran a cargo de los distintos estrados que posee la iglesia católica “estamos para regalar los sacramentos, no estamos para complicarle la vida a la gente, nosotros tenemos que ser facilitadores de la gracia de Dios y tenemos comunidades en donde las exigencias son tan grandes para dar un sacramento, que uno siente que está más en un puesto de gendarmería que en una parroquia”.
Para finalizar, el Obispo señaló que si bien el Papa tenía planeada una visita electoral para este año, la misma fue pospuesta, debido a que no quiere que nadie utilice su figura como una estrategia de campaña política por lo que decidió postergar el viaje: “El plantea las ganas que tiene de venir y el porqué no vino antes. El tiene a la Argentina en su corazón y tal vez el año que viene puede ser una buena oportunidad”, concluyó.
Fuente: Diario Tiempo Sur.