La Asociación de Amigos del Reino Animal Fueguino (ARAF) impulsa un proyecto de ordenanza de respeto y protección integral para los equinos en Ushuaia, con la intención de que se convierta en una iniciativa provincial.
Ushuaia.- El pasado jueves, la presidenta de la Asociación de Amigos del Reino Animal Fueguino (ARAF) Rosana Vélez, presentó ante el Concejo Deliberante de Ushuaia, el proyecto de ordenanza para proteger a los equinos.
En los fundamentos de la iniciativa destaca que en Argentina existe un gran apego al caballo, ya que se encuentra arraigado en la historia de nuestro país y es parte de su identidad cultural; sin embargo, no hay mención alguna de respetar su dignidad psicofísica.
“En este nuevo paradigma que estamos transitando, debemos dejar de lado nuestra visión antropocéntrica y entender que los animales no humanos sufren, porque son conscientes, ya que tienen consciencia de sí mismos y del ambiente que los rodea; sintientes, porque pueden sentir placer y dolor; y sujetos de derechos, porque existen leyes que los protegen y pena los actos delictivos en su contra, es decir con esto está de más que claro de que están sujetos a normas de derechos, vigentes en nuestra legislación”, destacan.
“Desde ARAF vamos más allá del bienestarismo, y buscamos no solamente la consideración de los animales desde lo ético, sino desde lo moral como seres no solo sintientes y conscientes, sino seres dotados de razonabilidad”, expresó Vélez.
El objetivo de esta ordenanza municipal es establecer normas y regulaciones para garantizar el bienestar, la salud y la protección de los equinos, en la Ciudad de Ushuaia, Tierra del Fuego, Argentina.
“Como sociedad necesitamos una política pública para solucionar la problemática sobre los equinos en nuestra sociedad, siendo la sociedad la primera destinataria, pero no la última. La última destinataria es la persona humana y no humana”, detalló.
La iniciativa establece la creación de un Centro de Rescate y Rehabilitación Equino Ushuaia (CRREU) destinado para aquellos animales que sean rescatados y requieran asistencia. El municipio deberá contar con un espacio para tal fin y contar con la presencia profesional de un veterinario. Además, el centro deberá contar con todas las herramientas para asistir y realizar tratamientos médicos si el animal no humano lo en necesitare.
También, se creará un Registro de Equinos que contendrá información relevante sobre los equinos, sus cuidadores responsables y sus condiciones de vida, y será utilizado para garantizar el cumplimiento de esta norma.
A su vez, el escrito propone que los equinos deberán recibir atención veterinaria regular, incluyendo vacunación, desparasitación y chequeos periódicos de salud.
Se promoverá la educación y concientización sobre las prácticas de higiene adecuadas en relación con los caballos, como la limpieza de sus instalaciones y el manejo adecuado de los desechos. El personal destinado al Área de Equinos, podrá solicitar la libreta de salud del animal no humano para constatar su estado y que el calendario de vacunación y desparasitación se encuentren al día.
Asimismo, los cuidadores o guardadores de equinos deberán adecuarse a las normas que establece la Ley 14.346, referente los cuidadores que deben tener los animales sin distinción de especie. En caso de incumplimiento de la norma se impondrán multas a estos.
Para finalizar la ordenanza reconocerá como sujetos de derechos a los equinos como seres sintientes que deben ser tratados con respeto y consideración. Prohibiendo el uso de métodos crueles o inhumanos en el entrenamiento, monta o utilización de los equinos.
Se fomentará la adopción y el rescate de equinos en situación de abandono o maltrato, promoviendo su rehabilitación y posterior adopción responsable.
“Como Activistas que amamos a los demás animales tenemos derecho al respeto digno, es decir, tenemos derecho a peticionarles que solucionen los problemas que nos acongojan, que nos hacen daño, nos deprimen y atentan contra nuestra dignidad, si algo nos hace sentir mal, están afectando nuestra dignidad”, concluyó Vélez.