El embajador de Noruega, Halvor Sætre, ratificó la continuidad de la compañía en las campañas exploratorias offshore y en desarrollo del shale. La firma noruega Equinor tiene como objetivo determinar si efectivamente se encuentran en el Atlántico sur los recursos y el primer paso para ello es la adquisición de información sísmica, que resulta fundamental para evaluar el potencial del subsuelo. Se trata de una superficie de aproximadamente 6.700 kilómetros cuadrados, a una distancia aproximada de 25 kilómetros costa afuera de la ciudad de Río Grande, en Tierra del Fuego.
Río Grande.- Equinor es uno de los actores principales de la industria hidrocarburífera. La compañía noruega encabeza las tareas de exploración offshore y tiene participación activa en Vaca Muerta. Los proyectos despiertan expectativas y podrían cambiar la ecuación de la matriz energética.
En este marco, el embajador de Noruega, Halvor Sætre, se reunió con el secretario de Energía de la Nación, Eduardo Rodríguez Chirillo, para conversar sobre las posibilidades de inversión en el país.
Según pudo saber +e, el funcionario noruego reafirmó el compromiso de las empresas nórdicas relacionadas con la generación de energías sustentables y ratificó el interés de Equinor en sus proyectos offshore y en Vaca Muerta.
Hay que recordar que Equinor ingresó al país en 2017 y abrió una oficina en Buenos Aires en 2018. Desde entonces se ha caracterizado por participar en licencias de exploración tanto en tierra como costa afuera.
En la provincia del Neuquén, Equinor participa en dos licencias: Bajo del Toro desde el 2017, con una participación del 50% (el operador YPF posee el 50% restante), y en una de las principales áreas productivas de Vaca Muerta, Bandurria Sur desde 2020, con una participación del 30%. En este caso, Shell posee una participación también del 30%, mientras que el operador YPF posee el 40% restante.
Asimismo, encara el Pozo Argerich, el proyecto promete tener una producción superior a Vaca Muerta y abrir un nuevo camino de posibilidades para la industria hidrocarburífera del país.
El buque BGP Prospector terminó con sus tareas y se espera la llegada del Valaris DS-17. La embarcación es un buque de perforación en aguas ultra profundas, capaz de operar en profundidades de agua de más de 3.600 metros, que se encuentra realizando tareas de perforación en la Cuenca de Bacalhau, ubicada frente a las costas surorientales de Brasil.
En el informe de “Memoria de Gestión” de la Secretaría de Energía de la Nación se adelantó que, entre los meses de febrero y marzo de 2024, se llevará adelante “la perforación del pozo Argerich x-1 dentro del área CAN-100, que será el primer pozo exploratorio de aguas profundas”.
De acuerdo con las estimaciones potenciales, el proyecto Argerich podría generar en la etapa de producción 200 barriles diarios de petróleo y 25.000 puestos de trabajo directo.
Otro de los proyectos que encarará será la campaña de exploración en la Cuenca Austral y otro de Malvinas Oeste.
Las tareas en los bloques AUS105, AUS106 y MLO121 permitirá obtener información sobre el subsuelo y adquirir mayor conocimiento de la geología de los tres bloques adjudicados en 2019, durante la gestión del ex presidente Mauricio Macri.
La misma tiene como objetivo determinar si efectivamente se encuentran allí los recursos y el primer paso para ello es la adquisición de información sísmica, que resulta fundamental para evaluar el potencial del subsuelo.
Se trata de una superficie de aproximadamente 6.700 kilómetros cuadrados, a una distancia aproximada de 25 kilómetros costa afuera de la ciudad de Río Grande, en Tierra del Fuego.