La inflación de enero fue 20,6% y acumuló 254,2% en el último año

El Indec informó que su Índice de Precios al Consumidor (IPC) marcó una desaceleración respecto al pico de diciembre de 25,5%, aunque se mantuvo en niveles altos. Las consultoras habían anticipado una variación en torno al 20 por ciento. La inflación desaceleró en enero, pero aún así se mantuvo por encima del 20% y los alimentos, el rubro más sensible para el bolsillo de cualquier grupo familiar, tuvieron un incremento del 20,6% en el primer mes del año. De esta manera, los productos contemplados dentro del ítem “alimentos y bebidas no alcohólicas” alcanzaron una suba anual del 296,2% entre enero de 2023 e igual mes de este año, según la medición del Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (Indec). La región con mayor con mayor aumento de precios fue la Patagonia (24,2%), unos 3,6 puntos porcentuales por encima del promedio, le siguieron Cuyo (22,3%), el Noroeste (21,7%) y Pampeana (21,2%). Mientras que debajo de ese nivel se ubicaron el Gran Buenos Aires (19,6%) y el Noreste (19,5%).

Buenos Aires.- La inflación de enero fue de 20,6% y acumuló 254,2% durante el último año, según informó esta tarde el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec). El dato mensual implicó una desaceleración respecto al 25,5% que había marcado diciembre, el más alto desde febrero de 1991, por el cual el 2023 había cerrado en 211,4 por ciento.

Según el informe del Indec, “la división de mayor aumento en el mes fue Bienes y servicios varios (44,4%), producto del incremento en artículos de Cuidado personal. Le siguieron Transporte (26,3%) –por las subas en transporte público y el arrastre del aumento de combustibles– y Comunicación (25,1%), por el alza en servicios telefónicos y de internet”.

“La división con mayor incidencia en todas las regiones fue Alimentos y bebidas no alcohólicas (20,4%). Al interior de la división se destacan las subas de Carnes y derivados y Pan y cereales. Las dos divisiones que registraron las menores variaciones en enero fueron Prendas de vestir y calzado (11,9%) y Educación (0,9%)”, agregó el informe.

Dentro de la conformación del índice promedio de 20,6% se destacó la diferencia entre los precios estacionales (frutas, verduras y todos los servicios vinculados al turismo) que se incrementaron en un 16,2% y los precios regulados, que subieron un 26,6%, por encima del promedio. En este último punto aparecen servicios cuyos precios empezaron a ser liberados, tales como el transporte y las tarifas de electricidad, gas o agua. El resto de los productos y servicios relevados dentro del índice, conocido como “IPC Núcleo” tuvieron un aumento del 20,2%, muy cercano al índice promedio.

En el primer Relevamiento de Expectativas del Mercado (REM) del 2024 que hizo el Banco Central (BCRA), las consultoras privadas habían calculado que la inflación de enero iba a marcar el 21,9 por ciento.

Ese guarismo estaba en línea con la inflación de la Ciudad de Buenos Aires, que fue de 21,7% mensual, según informó la Dirección de Estadísticas y Censos porteño. Una de las alzas más significativas y que tuvo mayor incidencia sobre el nivel general se dio en el rubro alimentos y bebidas no alcohólicas, que tuvo un aumento del 25,4%.

En tanto, Eco Go midió que en enero la inflación fue de 18,6% e indicó que “los alimentos consumidos dentro del hogar registraron una suba de 1% en la cuarta semana de enero, marcando una fuerte desaceleración de 2,8 puntos porcentuales respecto a la semana previa. Con este dato, la inflación de alimentos consumidos dentro del hogar alcanzaría el 20,3%. Si se consideran además los alimentos consumidos fuera del hogar, la inflación en alimentos sería de 19,7% en el mes”.

Por su parte, la consultora Orlando J. Ferreres había asegurado que “la inflación de enero fue de 18,0% mensual y registró un crecimiento interanual de 244,5 por ciento. Por otra parte, la inflación núcleo avanzó a un ritmo mensual de 19,5%, marcando un aumento de 268,8% anual”.

Además, afirmaron que “Salud y Bienes varios encabezaron las subas del mes, registrando alzas mensuales de 34,3% y 30,9% respectivamente, seguidos por Transporte y comunicaciones y Alimentos y bebidas, que presentaron una variación de 21,2% y 19,2% respectivamente”.

Según el relevamiento de C&T Asesores Económicos, la inflación del primer mes de 2024 fue de 19,6% y a nivel interanual, alcanzó el 242,2%. “El alza de los precios minoristas en enero estuvo liderada por esparcimiento, factor estacionalmente clave en todos los eneros, pero que este año tuvo una suba mayor, de 36,8%, debido al impacto del ajuste del tipo de cambio oficial y el alza general de precios”, indicó el informe.

La Fundación Libertad y Progreso estimó que la inflación de enero alcanzó el 19,4%, para Seido ascendió a 21,4% y de acuerdo a la Fundación de Investigaciones Económicas Latinoamericanas (FIEL), los precios presentaron un avance en torno al 21%.

Ecolatina indicó que el IPC “trepó 21,7% mensual para acumular 52% en el bimestre diciembre-enero. Durante el primer mes del año, los mayores aumentos se registraron en Alimentos y Bebidas (+24,9%), Transporte y comunicaciones (+24,6%), impulsado por aumentos en combustibles, (acumulan más de 100% en un mes) y Equipamiento y mantenimiento del hogar (+23,8%)”.

“Como se desprende de esto, todavía durante el primer mes del año, la devaluación del tipo de cambio oficial, la corrección de algunos precios Regulados y la eliminación de los controles de precios incidieron en la inflación del mes. Más en detalle, la inflación trepó 27% en la primera quincena y luego desaceleró a la zona del 17%”, explicó la consultora.

De cara al resto del año, la estimación del Fondo Monetario Internacional (FMI) es un poco más optimista: estima que se ubicará en 150%.

En contraposición, la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económico (OCDE) revisó fuertemente al alza su previsión de inflación para la Argentina al 250,6% este año, frente al 157,1% proyectado en noviembre. “La inflación general se aceleró a finales de 2023, lo que implica un fuerte efecto de arrastre para la inflación media anual en 2024″, indicó la OCDE.

 

Los alimentos tuvieron un aumento de casi 300% en el último año

 

El incremento promedio fue de 296,2% a nivel país, pero algunas regiones registraron subas más pronunciadas. En la Patagonia, la suba fue del 313,9%

La inflación desaceleró en enero, pero aún así se mantuvo por encima del 20% y los alimentos, el rubro más sensible para el bolsillo de cualquier grupo familiar, tuvieron un incremento del 20,4% en el primer mes del año. De esta manera, los productos contemplados dentro del ítem “alimentos y bebidas no alcohólicas” alcanzaron una suba anual del 296,2% entre enero de 2023 e igual mes de este año, según la medición del Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (Indec).

De acuerdo al último estudio publicado por el organismo, los incrementos más marcados dentro del rubro alimenticio se dieron en la zona de la Patagonia, donde registraron un aumento interanual del 313,9%.

Las demás regiones aún no cruzan la barrera del 300%, pero no se mantienen lejos. Las subas fueron del 297% en el noroeste, de 295,8% en Gran Buenos Aires y la región Pampeana, de 293,8% en Cuyo y de 287,2% en el Noreste.

Si se analizan los demás rubros que componen el IPC, se observa además que un sólo ítem tuvo un incremento más pronunciado que el de los alimentos y bebidas. Se trata de “Bienes y servicios varios”, donde están comprendidos los artículos de tocador, servicios para el cuidado personal y otros bienes y servicios diversos (311,4%).

Los demás rubros medidos por el Indec estuvieron por debajo de la inflación de los alimentos, aunque tuvieron un comportamiento similar los ítems de “Equipamiento y mantenimiento del hogar” (285% de aumento anual) y “Salud” (276,3%).

 

Los aumentos más pronunciados

 

Si bien el incremento promedio de los alimentos fue del 296,2%, hubo algunos productos en particular que tuvieron subas muy por encima de la media. El caso más llamativo es el del arroz blanco simple, que no sólo tuvo variaciones de precio producto de la inflación, sino que además sufrió de los duros efectos de la sequía. En la presentación de un kilo, ese producto saltó de $198,02 en enero de 2023 a $2.046,61 en igual mes de este año (933,54% de suba interanual).

Fuera de ese caso, se encuentran muchos otros productos con incrementos de precios por encima de la media, pero con porcentajes siempre debajo del 500%. Es el caso del tomate entero en conserva, cuyo precio pasó de $140,67 a $823,78 (485,61% de suba). Completó el podio de aumentos la lata de arvejas secas remojadas, con un ajuste total anual del 471,76% (pasó de $108,93 a $622,82).

También figura en la lista de los artículos alimenticios de mayor aumento el paquete de 500 gramos de los fideos secos tipo guisero. De acuerdo a la medición del Indec, el valor pasó de $207,95 a $1.125,02 en el período analizado (441,01% más caro).

Apenas por debajo figura la naranja. El valor por kilo de ese producto era de $203,25 en enero de 2023 y llegó a $1.096,93 en el mismo mes de este año, con lo que cerró el período de 12 meses con un aumento en góndola del 439,69%.

También forman parte del “top ten de aumentos” otros tres productos de almacén. Se trata del azúcar (417,29% de suba), la sal fina (409,70%) y el café molido (379,54%).

En el noveno y décimo puesto hay dos cortes de carne. El kilo de cuadril, que costaba $1.414,62 en enero de 2023, se vende ahora a $6.603,24 (366,79% más), mientras que la carne picada común por kilo saltó de $750,61 a $3.469,9 (362,28%).

De igual manera se pueden encontrar muchos otros ejemplos de alimentos que subieron por encima del promedio del rubro alimentos (296,2%) y por arriba de la inflación general del último año (254,2%). Sin ir más lejos, sólo durante enero hubo productos que llegaron a triplicar la inflación general, como es el caso del café molido, que subió un 70,5%, contra un IPC de 20,6%.

La región con mayor con mayor aumento de precios fue la Patagonia (24,2%), unos 3,6 puntos porcentuales por encima del promedio, le siguieron Cuyo (22,3%), el Noroeste (21,7%) y Pampeana (21,2%). Mientras que debajo de ese nivel se ubicaron el Gran Buenos Aires (19,6%) y el Noreste (19,5%).

 

El Gobierno aseguró que el ajuste fiscal acentuará la baja de la inflación en febrero

 

El Ministerio de Economía consideró que el dato de 20,6% de inflación de enero estuvo explicado en parte por la inercia en el ritmo de precios que había dejado el 25,5% de diciembre y que el plan económico con ajuste fiscal y monetario prepararán el terreno para una “trayectoria inflacionaria decreciente”.

Minutos después de la publicación del índice de precios de enero, el Palacio de Hacienda consideró que “el sendero de desaceleración en la nominalidad que se viene observando desde mediados de diciembre, a una velocidad mayor que la prevista por el mercado”, plantearon. Y citaron para eso las estimaciones del Relevamiento de Expectativas del Mercado (REM) para el mes pasado, que se habían ubicado en 25% y 21,9% en las publicaciones de diciembre y enero, respectivamente.

“El número de enero todavía tiene implícito un elevado arrastre estadístico de diciembre, derivado del overhang (excedente) monetario heredado y el sinceramiento de precios relativos en la primera semana de la administración actual”, planteó la cartera que dirige Luis Caputo en un comunicado.

En ese plano, apuntó que “el traslado a precios de la devaluación de diciembre fue mucho menor al del salto del tipo de cambio en agosto del año pasado. Mientras en aquel entonces la mejora en el tipo de cambio real fue consumida en menos de dos meses, entre diciembre y enero la inflación fue de 51%, frente a una suba nominal del tipo de cambio de referencia de 129%”, midió.

“Esto se dio a pesar de que a partir de diciembre se fueron sincerando otros precios que venían fuertemente atrasados, como los combustibles o los productos de consumo masivo que se encontraban bajo esquemas de precios controlados”, cuestionó. El Palacio de Hacienda consideró que “el programa económico llevado adelante por el Ministerio de Economía apunta a sostener y profundizar este escenario de desinflación. La combinación de ancla fiscal, monetaria y cambiaria, y la normalización en el comercio exterior aseguran una trayectoria inflacionaria decreciente”.

Y por último, aseguraron que “la estabilización macroeconómica, fundada en el equilibrio financiero y el sinceramiento de precios relativos, es condición necesaria para que la economía argentina ingrese en un sendero virtuoso de crecimiento del salario real y generación de empleo de calidad”, cerraron.

La inflación de enero fue de 20,6% y acumuló 254,2% durante el último año, según informó esta tarde el Indec. El dato mensual implicó una desaceleración respecto al 25,5% que había marcado diciembre, el más alto desde febrero de 1991, por el cual el 2023 había cerrado en 211,4 por ciento.

Según el informe del Indec, “la división de mayor aumento en el mes fue Bienes y servicios varios (44,4%), producto del incremento en artículos de Cuidado personal. Le siguieron Transporte (26,3%) –por las subas en transporte público y el arrastre del aumento de combustibles– y Comunicación (25,1%), por el alza en servicios telefónicos y de internet”.

“La división con mayor incidencia en todas las regiones fue Alimentos y bebidas no alcohólicas (20,4%). Al interior de la división se destacan las subas de Carnes y derivados y Pan y cereales. Las dos divisiones que registraron las menores variaciones en enero fueron Prendas de vestir y calzado (11,9%) y Educación (0,9%)”, agregó el informe.

Dentro de la conformación del índice promedio de 20,6% se destacó la diferencia entre los precios estacionales (frutas, verduras y todos los servicios vinculados al turismo) que se incrementaron en un 16,2% y los precios regulados, que subieron un 26,6%, por encima del promedio. En este último punto aparecen servicios cuyos precios empezaron a ser liberados, tales como el transporte y las tarifas de electricidad, gas o agua. El resto de los productos y servicios relevados dentro del índice, conocido como “IPC Núcleo” tuvieron un aumento del 20,2%, muy cercano al índice promedio.

 

Inflación de febrero: ¿qué espera el mercado?

 

La inflación de enero se ubicó apenas por debajo de la proyección del mercado. En ese escenario, el mercado «viene descontando» la desaceleración de la variación de precios.

«El mercado viene descontando la desaceleración de la inflación desde mediados de enero cuando comenzaron a publicarse los indicadores de alta frecuencia por debajo de lo esperado. Hoy las expectativas rondan los 15% para febrero y 10% para marzo», señaló Paula Gandara, CIO de Asset Manangment de Adcap Grupo Financiero.

 

Por otro lado, el informe de C&T Asesores resalta que de cara al segundo mes del año existe un «gran impacto» en el tarifazo al transporte público, las prepagas y las expensas de edificios. Sobre alimentos y bebidas, añade que «luego de una importante moderación semanal a lo largo de enero, se registra un mayor dinamismo desde el comienzo del mes, en bebidas durante la primera semana y en alimentos en la segunda».

«Preliminarmente, la inflación del mes podría ubicarse en torno al 14%», vaticina la consultora.

En tanto, desde Eco Go, Bisang advierte que la devastación del poder adquisitivo, que llevó a la caída de la demanda y fue uno de los pilares fundamentales para la desaceleración inflacionaria, «no está exento de riesgos». Entre las posibles amenazas precisa las «paritarias cada vez mas cortas, potencial conflictividad social, falta de oportunidades para colocar los pesos que, combinadas con la incertidumbre sobre una nueva corrección del tipo de cambio frente a la perdida de competitividad del TC real, pueden presionar sobre los tipos de cambio paralelos; y la capacidad de negociación con la política para impulsar reformas».

Frente a las previsiones más positivas respecto a la inflación, el comunicado del Ministerio de Economía menciona que «el programa económico llevado adelante apunta a sostener y profundizar este escenario de desinflación». En ese sentido, explica: «La combinación de ancla fiscal, monetaria y cambiaria, y la normalización en el comercio exterior aseguran una trayectoria inflacionaria decreciente».

«La estabilización macroeconómica, fundada en el equilibrio financiero y el sinceramiento de precios relativos, es condición necesaria para que la economía argentina ingrese en un sendero virtuoso de crecimiento del salario real y generación de empleo de calidad», concluye.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.